56.

2.8K 621 118
                                    

56.




Capítulo cincuenta y seis.




Ellen





Intento ignorar la persistente mirada que cuela sobre mi, no era una mirada crítica o de censura, era podría decirse curiosa, curiosa y triste. Veo el subir y bajar del pecho de Haniel una y otra vez, en algún punto entre la noche y el amanecer dejé de contar sus respiraciónes, en algún punto desde de ver su vendaje cubrirse de sangre lentamente, antes de que se diera cuenta y lo cambiara. Pero en todo ese tiempo, no había prestado ni un poco de atención a mis propias perdidas.




La noche aún se sentía sobre mis hombros, el dolor aún persistía, pero solo aquí, acurrucada contra Haniel encontraba mi modo de no hundirme, de no ser un trapo lloroso, solo aquí podía tener mi ancla.





El abdomen de Haniel había necesitado puntos de sutura para que su cuerpo pudiera recuperarse más rápido y no fuera tanta la cantidad de sangre perdida. No había estado presente en el momento en que según lo que había escuchado, Haniel habría luchado contra muchos hombres negándose a atender sus heridas. Aunque había sido necesario muchos de esos hombres habían salido mal heridos al intentar contenerlo, mientras atendían sus heridas. Pero podría apostar a que ninguno de ellos, estaba resentido por todo lo que Haniel hizo.





Todos habrían tenido la misma reacción ante la situación, cuando solo a unos metros de distancia, mejor dicho a un cuarto de separación, podia escuchar a su mujer solo llorar. Solo ser lágrimas entre tantas hembras que se estremecían ante tanta sangre, ante la idea de otra perdida.





En parte una pequeña porción de mi, estaba agradecida de que Haniel no hubiera estado presente mientras limpiaban mi cuerpo, suficiente había sobre sus hombros como para tener que agregarle esa imagen a su mente. Sin embargo, sabía que su propia imaginación le daba más que suficiente para no tener que haberlo visto.





Me intento acurrucar mucho más contra su cuerpo al instante en que la calidez que me proporciona parece no ser solo suficiente, aún escondida contra su piel siento se persistente mirada sobre mi.




Haniel tenía que lidiar con su manada.




Con una guerra en puerta.

My Wolf BabiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora