03.-

3.6K 343 119
                                    

POV Omnisciente

Jaime al final fue a la fiesta, pero no para disfrutar, era para averiguar más de su alma gemela. No sabía que había pasado ahí ni menos que sintió, pero de alguna forma le gustaba. Al primero que recurrió fue a su mejor amigo, Manuel. Cuando lo encontró lo vio mirándose fijamente con un desconocido para él.

-Oye Manu, conoces a alguien llamado Nicolás?.-Preguntó el enojón, interrumpiendo esto, haciendo que Manuel le tomará más atención a él.

-De hecho sí, pero solo lo conocí acá.-Contestó Manu, sorprendido de ver a su amigo ahí.

-Estamos hablando del mismo Nico?.-Preguntó Eddie algo confundido.-Mi mejor amigo?.

-Sí.-Respondió Manuel por Jaime.

-Tienes su número?.-Preguntó Jaime sin esperar ni un segundo más. Necesitaba saber más de él, y no tenía nada que ver con que sea su alma gemela. Le interesaba.

-Por qué te daría su número? Quién eres?.-Preguntó Edgar mirándolo sospechosamente. Era muy sobre protector con respecto a su mejor amigo.

-Va a sonar algo raro, pero es mi alma gemela.-Respondió el enojón con el ceño fruncido.-Me lo vas a dar o tengo que conseguirlo de otra manera? Créeme que de alguna manera lo tendré.

-No puedo creer que un enojón culiao como tú sea su alma gemela.-Dijo el ruloso mirando un rato a Jaime para después sacar su celular y buscar el número del Nico. Cuando lo encontró, le mostró el número a la otra mitad de su casi hermano para que lo guardará.

-Por qué lo tienes como Nico y un corazón?.-Preguntó Jaime algo posesivo, guardando el celular de Nicolás en su teléfono.

-Él se colocó así en mi celular.-Contestó Eddie con una pausa.-Aunque seas su alma gemela, todavía no eres su pareja o algo, así que no vengas a pedirme respuestas por algo así.

-No me cae para nada bien el aweonao de tu alma gemela.-Le dijo el enojón a su mejor amigo, mirando fijamente a Edgar.

-Cómo sabes qué...

-Se nota, además se quedaron mirando un rato, y eso no es algo que tú harías.-Le explicó Jaime, interrumpiéndolo.-Bien, ahora puedo irme de esta fiesta, necesito ver unas cosas.

-Pero Jaime...

No alcanzó a decir nada más cuando noto que el recién nombrado se había ido corriendo de ahí. No tenía ni idea de porque no había llevado su auto.

Bueno, Manuel no tenía idea, Jaime tenía una razón. Vivían muy cerca uno del otro así que no tenía sentido haber usado su auto para ir al carrete de su mejor amigo. El enojón nunca creyó que iba a estar menos de cinco minutos en la fiesta, pero agradecía haber al menos intentado ir.

Unos minutos después llegó a su casa, abrió la puerta y entró rápidamente para después cerrar la puerta detrás suyo. Nunca había estado tan emocionado de saber sobre alguien y menos sobre un hombre. Pero así eran las cosas, quería saber más de Nicolás.

Apenas llegó a su habitación, sacó su notebook y lo prendió. Ni siquiera sabía su nombre completo, así que no podría ver si tenía Facebook o algo. Tenía su número, le podría mandar un mensaje. Era algo psicópata lo sabía, pero no quería esperar ni siquiera un día más. Tal vez cuando vería otra vez a su otra mitad.

Buscó el número de Nicolás y escribió algo.

"Te dije que no sería la última vez que sepas algo de mí, alma gemela" escribió Jaime. Estuvo apunto de enviarlo pero reaccionó.

Qué estaba haciendo? Él es heterosexual y Nicolás no cambiaría eso. Le agradecía por dejarlo ver por fin los colores y vivir para siempre pero ahí terminaba todo. Borró el mensaje, bloqueó su celular y apagó su notebook. Se sacó la ropa y se quedó solamente en boxers para luego acostarse.

Iba a dormir, pero en verdad que el moreno no salía de su cabeza. No sabía si eso era bueno o malo, pero luchaba por creer que era malo y que no debía hacerlo.

El moreno en cambio, estaba demasiado ansioso de haber encontrado a su alma gemela y más aún cuando Edgar le avisó de que Jaime le había pedido su número a él. De hecho estuvo esperando algo, un mensaje, solicitud de amistad, cualquier cosa, pero claramente no hubo nada de eso, haciendo que se desanimara un poco.

Eddie llegó después de unas horas bastante serio, cosa que preocupo al pequeño moreno.

-Qué pasó Eddie?.-Preguntó el moreno acercándose a su mejor amigo.

-Conocí a mi alma gemela y en unas pocas horas ya peleamos.-Explicó el ruloso con el ceño fruncido.-Además no me agrado tu alma gemela. Te ha hablado o algo?.

-No.-Contestó el Nico, desanimándose más.

-Vamos Nico, no te bajonees, eres una persona maravillosa, y si él no lo quiere ver, a la mierda, ahora tenemos la eternidad para conocer chicos.-Dijo Edgar animando a su mejor amigo.

-Gracias Edgar, por qué tú no pudiste ser mi alma gemela?.-Preguntó el pequeño moreno abrazando a su casi hermano.

Y en ese momento a Edgar se le ocurrió una idea.

-Podemos arreglar eso.-Dijo Eddie con una leve sonrisa, separándose del abrazo.

-A qué te refieres?.-Preguntó el moreno con el ceño fruncido por la confusión.

-Hagamos que somos novios Nico.-Dijo el ruloso con una pausa.-A ver si así nuestras almas gemelas dejan de ser tan aweonaos. Además al final quede con juntarme mañana con Manuel y dijo que llevaría a Jaime, sería un gran plan.

-Y tenemos que besarnos y todo eso?.-Preguntó Nicolás, casi avergonzándose. Ya había besado a Edgar algunas veces, borrachos la mayoría.

-Pucha, no es como si fuera la primera vez que lo hacemos.-Respondió Edgar riéndose.

-Eso sonó muy mal.-Dijo el Nico también riéndose ligeramente.

-Lo sé.-Dijo Eddie con una pausa.-Pero dime que sí Nico.

El moreno lo pensó unos segundos. No era una mala idea, además se notaba que Jaime se creía hetero y todo eso, así que por qué no?.

-Esta bien.-Dijo Nicolás con una leve sonrisa.

-Igual podríamos practicar los besos.-Dijo Edgar con una sonrisa acercándose al Nico, haciendo que este se colocará nervioso por eso.

El moreno ni siquiera se pudo oponer cuando sintió los labios de su mejor amigo sobre los suyos. De un momento al otro, ya estaba sobre la cama, abajo de Edgar.

Ya habían pasado muchas veces por esto, pero Nicolás nunca dejaba que pasará aún más lejos que los besos y algunos toqueteos. No era weón, o al menos no tanto, sabía que era una cosa para pasar el rato.

Pero lo que no sabía es que las almas gemelas de estos dos sentían un leve dolor en su pecho por lo que estos dos estaban haciendo. Y no era por el simple hecho de ser almas gemelas, solo sentían que algo malo pasaba, pero no sabían qué.

Soulmates (Jainico). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora