Ellie Grimes.

28.1K 1K 401
                                    

Despertó sobresaltada, pues había vuelto a soñar con su padre.
No estaba segura de cuanto tiempo había pasado desde que su madre Lori Grimes le había dado la horrible noticia.

Un horrible disparo dejo en coma a su padre, claramente no hicieron a tiempo el traslado del hospital viendo con sus propios ojos como todo el lugar era bombardeado.

No iba a negar que extrañaba como nunca a Rick, a pesar de ser la hija rebelde que no seguía el ejemplo de policía de su papá. Acomodo suavemente su cabello que era entre un castaño y rubio, se imaginan que sus ojos eran de un azul cristalino como su padre.

Extrañaba mirarse a un espejo todas las malditas mañanas para al menos ver su reflejo, Lo único que ahora su vista estaba acostumbrada a ver era a los podridos caminantes y escuchar sus horribles sonidos.

Se vistió con unos vaqueros ajustados, una vieja camisa de cuadros que le quedaba un tanto suelta y sus botines negros.

Salió de la tienda en la que compartía con su madre Lori y su hermano pequeño Carl. Era difícil ser una buena hermana mayor cuando el mundo se había ido a la mismísima mierda, pero amaba a su pequeño hermano y su rebelde hermana como el solía llamarle siempre estaba ahí cuidándolo y enseñándole la mayor cantidad de cosas.

—Buenos días Dale.— Saludó al hombre que estaba sentado en el techo de la caravana con una silla.— ¿Tomando sol matutino?

—Hey Ellie.— habló sonriendo.— ¿Pesadillas?

Se dio cuenta que en verdad había madrugado, las pesadillas siempre la despertaban antes de tiempo haciendo que no pudiera volver a dormir.

—Y de las malas.— Bromeó.

—No te preocupes, siento que hoy sera un día relajado.—

Se ajusto el cinturón donde llevaba su arma, acomodo sus dos machetes en su espalda ya que tenia dos pequeños estuches en las correas que llevaba como un pequeño arnés parecido a una especie de mochila.

—Voy al bosque.— Le avisó al hombre que seguía en su guardia matutina para el campamento.

—Confío en que no te irás lejos, y ya sé que conoces muy bien los bosques.— le respondió antes de que hablara.— pero uno nunca sabe.

—Pues ya me conoces entonces.— sonrió.

—Solo ten cuidado y vuelve antes de que tu madre no te vea en su tienda.—

Le hizo una seña con su mano, y se encaminó hasta no ver el pequeño campamento que tenían entre las montañas. Le encantaba adentrarse en el bosque, podía sentir como todo tenia vida y como el aire estaba más despejado que nunca.

Claramente a Lori no le encantaba la idea de ir al bosque sola, pero ella sabia defenderse ya que esos dos machetes que llevaba en su espalda no eran solo para adorno. Manejaba perfectamente esas dos grandes cuchillas al igual que el arma de su cinturón.

Carl siempre le pedía que le enseñara todo lo que ella sabía, pero cada ves que Ellie quería enseñarle solo una cosa insignificante Lori se lo imponía, Pero le entendía ya que Carl solo es un niño y no debe perder su niñez aprendiendo cosas de armas, por ahora.

Escuchó como un extraño sonido invadía rápidamente su campo auditivo, claramente fue un movimiento entre los arbustos y hojas del bosque. Ellie tenía una gran habilidad de escuchar el mas mínimo sonido, eso le había salvado de mil caminantes, estaba lista para coger uno de sus machetes.

How many walkers have you killed? (Daryl Dixon.) Where stories live. Discover now