Adiós, chica problematica.

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Ya no contaba los días desde que había pasado todo el incidente de la prisión, tampoco desde que encontró a Dominic.

Y luego de estar días buscando alguno de los rastros de su grupo, sin éxito alguno y perdiendo un poco la esperanza, Dominic le convenció de ir a ese lugar llamado "Terminus".

Habían vistos los carteles, al parecer todas las vías de tren abandonadas hacían llegar a ese punto que al parecer era un refugio para personas, a Ellie no le tentaba mucho la idea, sentía que algo no andaba bien con todos esos carteles.

Y aunque el chico le dijo que tal vez, algunas personas de su grupo podrían dirigirse a ese lugar con el punto de encontrar a los demás, aun no le convencía esa idea.

Pero no tenia más opción, habían pasado días desde la ultima horda de caminantes de la que tuvieron que correr, y no esperaba otro día o momento para que alguna les sorprendiera de nuevo. Su cabello había crecido un poco más, haciendo que le llegara un poco más abajo de sus pechos.

Dominic tenia su cabello un tanto largo y sus facciones se habían vuelto más masculinas. Ahora mismo caminaban por la vía del tren abandonada, que decidieron tomar para llegar al supuesto refugio.

—¿Aun no te convences?— le pregunto Dominic caminando a su lado.

—No es eso, solo no me viene una buena sensación con esos letreros.— pensó la chica, confiaba en sus corazonadas.

—No seas negativa, Ellie.— rió el chico.

Los dos iban haciendo equilibrio en las barras de las vías, jugando un poco en el largo camino que les tocaba caminar, pues los dos se habían alejado bastante del terreno desde lo ocurrido.

Se escuchaban las risas de los dos, como si de niños se tratara. No hacia mal jugar un poco, y más cuando estaban en medio del apocalipsis.

No hacia falta decir que Ellie se había vuelto muy cercana al chico, le recordaba mucho a Carl y le tenía el mismo cariño que alguna vez llego a darle a su hermano menor. No esperaba el momento en poder encontrar su grupo y presentar al chico, pues últimamente se había vuelto fuerte, valiente y habilidoso con muchas cosas.

Seria muy buen amigo de Carl, pues aunque tuviera diecisiete años, seguía comportándose como un chico de quince. Y eso era divertido para la castaña, pues ella hacia lo mismo a su edad y lo siguió haciendo hasta mucho después.

—¡Eso no es justo!— le regaño Ellie riendo, al ver como el chico le trataba de empujar.

—Lo es, si quieres ganar.— carcajeó el chico.

Lo mismo hizo Ellie, trato de empujarle sin éxito. Pero sintió como Dominic tomaba su mano, para que ninguno se cayera, le sonrió divertida y siguió caminando por las barras de la vía, tomada de la mano del chico.

—¿Estas sonriendo?— le pregunto con burla el chico.

—Callaté.— le calló mientras reía.

[....]

Tiro la lata de comida que había terminado de comer, miro las ultimas tres que tenían y se preocupo un poco.

Debían seguir moviéndose rápido, de esa forma llegarían a Terminus y podrían al menos pedir un poco de comida por el momento. Estaban descansando un momento en las vías del tren, no era el mejor lugar para descasar, ya que estaban a la viste de todo pero a Ellie no le importo mucho pues solo seria un momento.

Se levanto sacudiendo sus vaqueros negros y miro detenidamente hacia el interior del bosque que rodeaba las vías de aquel tren, Dominic seguía comiendo su lata de comida, no prestando mucha atención a lo que Ellie hacia.

How many walkers have you killed? (Daryl Dixon.) Where stories live. Discover now