Capítulo 9.

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No sé qué hacer, no sé qué pensar, la propuesta de Justin ha estado rondando en mi cabeza las últimas veinte y cuatro horas. Hay veces que tenemos que hacer pequeños sacrificios por nuestra familia, eso yo lo sé, pero el trabajar para Justin es un sacrificio enorme y más cuando no sé a que tipo de trabajo se refiere y como si fuera poco tendría que dejar el baile que es lo que más amo hacer, la única pasión que tengo.

Mi cabeza es un torbellino de pensamientos, una parte de mi (tal vez mi parte bondadosa) dice que acepte la propuesta de Justin pero no por el dinero, sino porque así podre ayudarlo ¿ayudarle en qué o de qué? No sé.

Por otro lado, mi parte racional dice que no acepte que alguna forma de conseguir el dinero encontraré, que yo no sé el tipo de trabajo que Justin quiere que desempeñe.

Llamé a Eduardo pero no le conté la propuesta de Justin no quise preocuparlo y la angustia en su voz me hizo tomar una decisión.

Lo haré, aceptaré la propuesta de Justin y juro por Dios que esta es la decisión más difícil que he tomado en mi vida.

Dejaré no solo mi vida atrás, sino también mi libertad, mis amigos, mi trabajo, mi familia y lo más importante eso por lo que he trabajado toda mi vida. Mi sueño. Y ahora lo que dijo Jazmín de que soy: »Una belieber, una bailarina« simplemente perdió el sentido, he dejado atrás mi profesión ya no soy una bailarina y lo de belieber está en veremos.

Es hora de afrontar mi nueva vida, mi nuevo trabajo y sé que no va a ser fácil, no tratándose de Justin Bieber.

De aquella persona que un día me devolvió las ganas de vivir y ahora me las está arrebatando.

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En el lugar de los ensayos todo está en silencio, casi como si ellos supieran que me marcho, Holly me mira preocupada y sé que la noche en vela de anoche se ve reflejada en mis ojos hinchados y rojos de tanto llorar.

Esta mañana hice las maletas y entregué las llaves del apartamento, ya que el señor Bieber quiere que vaya a vivir a su casa.

También me ha dicho que nuestros contrato tendrá vigencia de seis meses, sí contrato, Justin me hizo firmar un acuerdo donde él me daba un cantidad de dinero y yo se la pagaba prestando mis servicios a él durante seis meses.

Alfredo sabe que ya no trabajaré más aquí pero piensa que es porque regresaré a mi país. Caminé hacia Holly casi obligando a mis a hacerlo y al llegar a ella la abrazé, nos abrazamos como en ninguno de estos cuatro meses de conocernos lo habíamos hecho, las lágrimas asaltaron mis ojos y se derramaron una por una, el dolor que sentía en mi corazón es inexplicable, lloré en su hombro como hacia años no lo hacía y podía sentir como cada uno de mis sueños y esperanzas se rompían como cristales.

Dylan caminó hacia mí y sin decir nada me abrazó, sentir su cuerpo junto al mio y el saber que lo dejaría hizo que me diera cuenta que tal vez sí sienta algo por él. »Demasiado tarde« pensé.

Me despedí de todos diciéndole que me iría de vuelta a mi país y al momento de cruzar la puerta, cuando los dejé atrás me derrumbé sabiendo que dejaría a personas valiosas y que los extrañaría a todos incluso a Rebecca pero sobre todo a Holly y a Dylan.

Me subí en el taxi que me esperaba y le avisé al conductor que me dejara en el aeropuerto.

Unas puertas corredizas de cristal me dieron la bienvenida al lugar en donde dejaría mi corazón junto con mi pasado, en este lugar dejaría tal vez por un tiempo a Alexha la bailarina.

Ahí estaba Justin, esperándome al comienzo de las escaleras de su jet privado, la maldita sonrisa en su rostro hizo que la sangre me hirviera y ganas de soltarle un golpe en la mandíbula no me faltaron.
Mi nuevo destino: Atlanta.

Allí donde empezaré una nueva vida y lo más raro de todo es que es una vida al lado de Justin Bieber.

La diferencia es que ya no soy la misma Alexha de antes, ahora estoy más rota que nunca. Mi familia está a salvo y eso es lo importante, si ellos están bien ya nada importa.

Ya no me importa nada, igual, siento como si estuviera muerta.

Muerta en vida.

Continuará

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¡Ay joder! Maldita Alexha, ella y toda su wea me pusieron sentimental. :'(

Pobre chica, en realidad yo no dejo mi sueño, por lo que he trabajado toda mi vida por mi familia y no es que sea mala, no, bueno o tal vez , pero otra solución habría ¿no?
¿Ustedes que harían estando en los zapatos de Alexha? Y no me vengan con el cuento de qué: ”¡Oh, por Dios! Pero si es Justin, obvio que acepto"
No, nada de eso, piensen con cabeza fría y no como beliebers.

Se me olvidaba, ¡CAPITULO DEDICADO A DAYANA! (oye necesito hablar contigo envíame un imbox por facebook)

Chicas, por favor les pido que se pasen por mi otra nove ¿si? También es una fan fic y se llama Mi Peor Error.
Ahora , nos leemos luego, disfruten el capítulo. ¡Besos!

PD: no sean malas y respondan a mi pregunta.

Una belieber: una bailarina [Sin editar]Where stories live. Discover now