Tu y yo... todo o nada

Capitulo 18

- ( Iván ) Te has vuelto loco de remate Samuel.

Soltó Iván desde la vídeo conferencia que mantenía con El y Nathaniel. Cristhian estaba aquí junto a mi en mi estudio...

- ( NAT) Yo no se qué pensar. Eso de dejar todo lo que tienes aquí en Londres, irte a otro país...
Que pasa con tu trabajo?
- La mudanza a Italia es un echo. Samantha necesita salir de aquí, ser dueña de sus decisiones. Poder elegir.

Dije sin inmutarme por lo que mis amigos opinaban. Eran como hermanos para mi. Pero esta vez tenía que hacer lo que mi corazón me dictaba que era correcto y esto lo era.

- ( NAT) Te dije que tendrías que haberte mantenido al margen de ella Sam.
- ( Sam) Si yo os hubiera dicho a ustedes eso cuando se involucraron con las mujeres que lo hicieron, ustedes me habrían echo caso alguno?
Si te hubiera dicho a ti Cristhian cuando me pedisteis ayuda para tu mujer y tus hijos que no era buena esa mujer para ti... Me habrías escuchado.
- ( Cristhian) Sabes que no de coña. Nada me habría detenido de mantenerme al lado de mi mujer.
- ( Sam) Y que hay de ti Iván? Si te dijera que la mujer que pese a que no sigue a tu lado no es buena para ti...
Si te dijera que estás sufriendo por una mujer que a pesar que casi mueres por ella, no le importo dejarte y marcharse?
- ( Ivan) Lo de Isabella es distinto. Ella se marchó porque cree que estaré mejor sin ella. Tú estabas ahí Samuel.

Respondió mi amigo con la mirada llena de ese dolor que aún habitaba en el.

- ( Sam) Tu NAT te has casado con una chica para protegerla de su ex, apenas si la conocías y viajaste a la otra punta del mundo porque ella te necesitaba. Yo te he dicho que no lo hagas? Que ella no te conviene?
- ( NAT) No te abría escuchado. Lía es lo mejor que me ha pasado. No me arrepiento ni por un segundo de todo lo ocurrido.
- ( Sam) Eso es a lo que me refiero. Cuando ustedes decidieron ayudarlas, involucrarse en sus problemas, ninguno estaba dispuesto a escuchar lo que opinara ni yo ni nadie. Solo siguieron sus instintos, lo que sintieron que era correcto hacer. Yo estoy haciendo precisamente eso...
Lo que mi instinto me dice que debo hacer.
- ( NAT) Estás diciendo que amas a esa chica?
- ( Sam) No lo sé, no se lo que siento por ella. Tal vez, es solo la necesidad de a hacer lo correcto por alguien que me necesita. Ella necesita ser libre, tan libre como sea posible. Tanto en papeles, cuerpo y alma, libre de pensamiento y decisión.
- ( Cristhian) Sabes que esa conducta es casi imposible de erradicar cuando es tan severa. No pasó unos meses, paso siendo sometida por años. Y por como describes su piso aún no puede dejar de pensar de esa forma...
- ( Sam) Por eso estoy simplemente yendo y cediendo a lo que ella decida. Solo viviremos juntos, ella decidirá como, donde, hasta cuándo...
- ( Iván) Y si no te gusta lo que ella decida?
- ( Sam) Cristhian y yo sabemos que tiene carácter. Solo necesita que saque esa jaula en la que su libertad está atrapada.

Todos permanecieron en silencio sopesando mis palabras. Cuando escuchamos los tacones resonar en la sala junto al estudio.
Di una última mirada a la computadora encendida y me despedí de las dos personas del otro lado.

- Es lo que tengo que hacer, estoy seguro.

Cuando ellos salieron de línea Cristhian y yo permanecimos un par de segundos aún en silencio.

- No te diré algo que no quieres escuchar. Cuentas con nosotros y lo sabes.
- Solo eso necesito. Lo demás es asunto mío.

El asintió para mi y nos encaminamos a la sala para encontrar un par de chicas cargadas de bolsas, como si hubieran vaciado el centro comercial. En buena hora deje a Samantha en manos de Verónica.

- ( Cristhian ) Dejaron algo para otros clientes?

Pregunto Cristhian a su mujer. Ya estaba llegando a ella y tomándola de la cintura para obtener el beso que quería.