Tu y yo... todo o nada

capitulo 60

No deje que Nathaniel terminara de hablar, salí tomando la misma dirección que Samantha, subí los escalones de dos en dos, decidido a ver con mis propios ojos lo que decían. Hacía más de un mes que ella no me permitía acercarme, no me hablaba, no...
Esto se terminaría de una maldita vez.
Alcance la puerta de su alcoba justo cuando estaba por cerrarla y detuve su intento.

- Espera.

Dije adentrándome tras ella que se alejó de inmediato y corrió al baño.

- Vete Samuel, no quiero hablar contigo...

Llegue hasta la puerta y la golpeé antes de volver a hablarle.

- Samantha abre por favor, tengo que hablar contigo.
- No hay nada que decir.
- Samantha, abre la puerta, o te juro que la tirare.

Advertí.

- No quiero hablar Samuel déjame sola.
- No me iré Samantha tenemos que hablar. Por última vez Samantha abre o tiro esa maldita puerta!!

Esperé unos cuantos minutos pero como no lo hacía corrí al estudio, no quería abrir? Pues bien yo lo haría. Rebusque en una de las gavetas hasta dar con las llaves de todas las puertas de la casa. Cuando regresaba me crucé con Cristhian y Nathaniel llegando hasta la misma alcoba.
Les adelante y espete molesto.

- Fuera!!

Y cerré la puerta de la alcoba con llave, busque la que necesitaba y abrí sin esperar un segundo la maldita puerta, cuando entré la y fijé mis ojos en ella la sangre se me heló por completo. Maldita sea!!!

- Que carajo crees que estás haciendo!?

Grité avanzando a ella y quitando de sus manos el maldito trozo de vidrio. Trato de esconderse, de ocultar su brazo, pero le sujete fuerte de la muñeca.

- Déjame Samuel!! Vete de aquí!! Sal de aquí ahora!!

Grito entre lágrimas luchando por soltarse.

- Con un demonio que voy a salir!! Tú estás loca!!
- Que me sueltes Samuel!!

Luchaba tratando de empujarme y apartarme de ella pero no lo iba a permitir. No la dejaría seguir dañandoce.
La pegue a mi cuerpo abrazándola con firmeza y empecé a hablarle...

- Lo siento, lo siento de verdad pequeña... Lo siento
- No!! Déjame, sal de aquí!!

Luchó por soltarse pero no lo permitiría.

- Se que te cause mucho daño amor, sé que lo que dije estuvo mal, si? Pero te amo Samantha, no dejaré que te dañes....
No lo haré amor...

Seguía forcejeando conmigo pero  también su llanto ahogado...

- Perdón... Perdóname pequeña...

Pedí cuando sentí que su lucha perdía fuerza...

- Necesito hablarte amor... Necesito que sepas...
- No Samuel... Ya no quiero seguir , no quiero ser la culpable de que no tengamos la familia que tú quieres...

Lloro intentando apartarse...

- No tienes la culpa tu amor... Solo...
- Yo te escuché Samuel, escuché que le decías a Cristhian que no querías hijos por mí, para no perderme a mi...
Les escuché hablar, escuché cuando él te dijo que ese había sido tu sueño siempre...

Llorisqueo, si había escuchado eso...

- Mi princesa... Todo eso que dije, yo... Estaba cegado, tienes que escucharme, te lo suplico...

Volví a insistir. No dejo de llorar pero al menos si asintió aceptando escucharme... Era mucho más de lo que había logrado hasta ahora. No la solté de mi abrazo, por el contrario la tomé en brazos y la metí junto conmigo en la bañera. Abrí el grifo para llenarla y empecé con cuidado a quitar nuestras ropas. Eso la puso nerviosa de inmediato, tenía que calmarla, hacerle ver que no la dañaría...