Tu y yo... todo o nada

Capitulo 81

En cuanto la limusina se detuvo frente al mausoleo supe que teníamos que dar alguna declaración. El lugar estaba atestado de periodistas, pero eso era algo a lo que ya estábamos prevenidos que pasaría. Después de todo era una gala de premiasion demasiado importante y el echo de que yo justamente fuera galardonado como el mejor honcologo de la época siendo tan " joven"  como revelaba la prensa y para broche de oro hubiera anunciado mi compromiso en matrimonio con una excelente médico cirujana que acababa de elevar el nivel de cirugía extrema gracias a todo el trabajo que ella junto a otros hizo en Layla, me tenia fichado como el hombre de la noche. Algo que no me interesaba realmente, pero que se avocaba a nuestro plan.
Sentí la presión de los dedos de mi pequeña en cuanto vio el tumulto de personas que aguardaba detrás de un cordón rojo para poder tomar fotografías y obtener alguna declaración por parte de todos los invitados.  Los cristales oscuros de la limu impedían que los del exterior pudiesen ver lo que ocurría dentro.
Bese sus labios de forma fugaz y susurre para serenar sus temores.

- Tranquila pequeña...

Ella sonrió con timidez y cargo sus pulmones de oxígeno antes de asentir para mi.
Era la hora, todo el plan estaba en marcha y era tiempo de poner la basura en su lugar.  Los escoltas entre ellos Erick descendieron en silencio creando un espacio protegido para asegurar que nadie llegara a nosotros.
Baje de la limusina con una serena sonrisa marcada en mi rostro, abroche el par de botones de mi esmoquin, acomode mi corbata y fije mi atención a mi prometida tendiendo mi mano para ayudarle a bajar mientras escuchaba como los flashes de las cámaras estallaban enloquecidos y el murmullo llamando para que brindará alguna entrevista aumentaba. Pero nada de eso era importante, no. Lo único importante para mi era darle toda mi atención a mi mujer.
Sabía que Cristhian y Verónica estaban posando para algunas fotos, junto a ellos Miguel y Lina, Alex y Phebs también se dejaban capturar por las cámaras. No era ningún secreto que todos eramos íntimos amigos y para toda la prensa del mundo los únicos solteros de nuestro exclusivo círculo de amistad eramos Iván y yo.
El echo de que jamás asistiera a ningún evento de esta magnitud acompañado de alguna mujer, hacía que la prensa me tildar a muchas veces de ser un hombre avocado a mi trabajo y mis amigos.
Cuando Samantha quedó de pie a mi lado y me dio esa dulce sonrisa no pude estar más orgulloso.   Bese sus labios con calma, sin ninguna prisa y dejando que todos a nuestro al rededor tuvieran esa imagen de nosotros como pareja...

- ( Sam) Los tienes a todos enloquecidos pequeña.

Susurre en su oído ya guiandola por la alfombra roja en dirección donde nuestros amigos y aliados aguardaban. La sonrisa no se fue de mi rostro, mi mano en la cintura de mi prometida se mantenía segura  y ella caminaba junto a mi con serenidad.
El eco de todos tratando de obtener respuesta de nuestra parte, el llamado constante de la prensa...
Todo era un caos controlado. Erick caminaba a nuestras espaldas con varios más de sus hombres.
Llegamos al palco donde serían tomadas las fotos exclusivas y responderíamos algunas rápidas preguntas antes de ingresar al mausoleo.
Escuché la pregunta que un periodista realizaba a Cristhian y Verónica precisamente sobre mi compromiso sorpresivo.

- ( Prensa) Señores Olivera, podrían comentarnos su reacción al enterarse del compromiso de el Doctor Riviera?  Sabemos que el doctor es íntimo amigo de ustedes, casi que como un hermano para usted Cristhian, que pensaron al conocer la noticia del compromiso? O ustedes ya tenían conocimiento de los planes a futuro de la pareja.

Sonreí internamente, porque sabía que tanto Cristian como su mujer responderían y dejarían caer la primera ficha del enorme rompecabezas que habíamos armado

- ( Cristian) No lo creemos algo sorpresivo, de echo el compromiso ya lleva algunos meses. Tanto mi esposa como nuestros más ayegados conocían las intenciones de Samuel de contraer matrimonio con la doctora Samantha Álvarez. Pero como bien se ha comentado nuestro círculo es algo cerrado, rara vez lo que ocurre en la vida de alguno de nosotros se hace público, pero eso es porque nos gusta mantener nuestra vida en privado. Samuel y su prometida tienen el mismo criterio de querer mantener su vida fuera del foco de las cámaras aunque el echo de que se hiciera público por ser esta una velada tan importante para Samuel tampoco generó incomodidad o molestia ni en el ni su prometida.
- ( prensa) Señora Olivera, Sabemos que usted es una es una escritora de renombre, podría compartir su opinión con nosotros sobre el romance de él doctor Riviera y su prometida, fuentes cercanas afirman que el doctor no es el hombre fiel que se esperaría al mantener un compromiso de ya varios meses tal y como usted y su esposo nos acaban de comentar...