Cinco Storia (Traducción)

Capitulo 39

El festejo no cesó, las festividades aún no habían llegado a su clímax, pero de alguna manera lograron excluirlos de la película, Gideon se sentó, contemplando, observando desde lejos los acontecimientos a medida que se desenvolvían y, curiosamente, mirando hacia abajo el estado de sueño de Riki, mientras este último dormía a unos centímetros del punto en que él se hallaba.

Riki nunca prestó tanta atención cuando se trataba de estas reuniones, el caballo negro o el lobo que lo estropeaba todo y se negaba a hacer otra cosa, a menudo sentado junto a los pies de su Maestro para dormitar como lo hacía ahora, incluso con la presencia de Gideon justo al lado. Inmediatamente después de una comida y un poco más de charla casual, el Exclusivo estaba durmiendo en silencio, sus alas se retiraron dejando a la ahora no voladora mascota a sus sueños, metida en la suavidad de la silla y donde las luces se habían oscurecido para tener un poco de privacidad, como ordenó el propio Gideon....

"Agotados, ¿no es cierto, Pet?"

La fiesta se había trasladado al extremo más lejano del recinto, donde Amisa estaba ahora siendo acoplada a otra mascota menos preferida, su cantera original era Riki pero no estaba permitida, no, prohibida por su propio Maestro, por lo que tuvo que conformarse con el semental de la Academia elegido para emparejarla esta noche, una encantadora pelirroja dominada por una Platina.

Aisha se había unido a ellos allí, pero Gedeón se ha quedado aquí por alguna razón fuera de su carácter habitual, prefiriendo mirar fijamente la cara soñadora de Riki, notando los detalles más finos en la expresión de la Mascota mientras dormía inocentemente. Había algo fascinante en ello, en lo pacífico que parecía, haciendo que la otra Blondie se imaginara lo maravilloso que debe ser para Iason verlo así cada vez que lo miraba....

Gideon se tragó otra copa de vino. Tragó con fuerza, mucho después de que el amargo líquido pasó por su garganta, volviendo a poner sus ojos en la belleza del único amor de Iason, esperando mentalmente ser atrapado mientras se entregaba a algún tipo de observación, pensando de nuevo en el día de la Subasta de Mascotas cuando todo tipo de color y felicidad infectaron a Riki y sus brillantes ojos, cómo miraba a su Maestro con tanta.... adoración. Las mismas cosas que todos ven de ellos últimamente.

Sólo ahora Gedeón podía ver cómo Riki tenía unas pestañas tan finas, largas y rizadas, sus cejas y su pelo una delicada combinación con una noche sin lunas, su piel parecía más suave ahora, con reminiscencias y parecidas a las de aquellas noches en las que la mascota había regresado de los barrios bajos, cómo había sorprendido finalmente a todos en su evolución y madurez, bello incluso a medida que envejecía, una entidad asombrosa en su segunda salida, magnífica incluso antes de todas las alteraciones de Júpiter, magnética incluso cuando aún no había sido coronado como el Exclusivo de Tanagura.

Había algo natural y antinatural en Riki, con la forma en que contradecía el poder de la capital con una fuerza independiente propia, lo que era muy atractivo que incluso ellos se habían preguntado. Tenía un fuego que Gedeón no podía definir, y, a diferencia de lo que le había dicho a la mascota durante su corta caminata de regreso a Iason ese día del baile, él fue el que se sintió atraído por esta llama....

Gideon se encontró alcanzando una mano, con los dedos rizados para que sus nudillos pudieran sentir la mejilla de Riki, los guantes aislantes que se había quitado y desechado, preguntándose cómo se sentiría su piel en ese momento. Pero se detuvo, encontrando una pelea inmediata dentro de él que instantáneamente roía sus intenciones, las detuvo antes de que pudiera acercarse más.

Riki se movió, las cejas arrugándose antes de que los músculos tensos se relajasen, el menor de los movimientos de las yemas de sus dedos descansaba en el espacio que tenía ante él.