Cinco Storia (Traducción)

Capitulo 68

Riki iba a estar perdido en sí mismo, esto quedó claro para Iason Mink en el momento en que sintió que comenzaba a bailar al ritmo del Sistema durante las festividades de la Gala. Cuando se dio cuenta de que el viejo dios lo había cronometrado todo tan perfectamente, lo vio todo tan claramente por anticipado que fue capaz de predecir hasta este punto e incluso de imponerles sus deseos. Todo lo que había hasta ese momento, es decir, cuando el destino le iba a ser transmitido a él, a Iason Mink, completa y, en esencia, a ambos como los dos seres queridos de Júpiter.

Pero de alguna manera conocía otro secreto más profundo.

Lo que fuera que ocurriera en la reunión de esta noche también sería la última - ah, no, no su relación que sólo será solidificada por todo esto, no el final de su amor y su devoción a su Exclusivo. El Blondie superior hablaba más bien del final del Júpiter conocido del pasado, donde la Voluntad de su predecesor finalmente se detiene y donde la de Iason comienza en la entrada de una nueva era, aún más poderosa.

La misma formalidad de la carga de dirigir el trono solo. Después de hoy, después de que los planes que había construido con el antiguo dios se hayan revelado plenamente a quién ha elegido, el pivote de Tanagura, la élite loca que una vez cayó de la gracia, tendrá que dirigir su herencia en su propia dirección. Por sí mismo. Para cabalgar con los vientos del tiempo y trazar su propio rumbo.

Se sintió emocionado por ello de alguna manera.

El Blondie superior no necesitaba más lujo, pero maldijo la existencia de su Mueble perfecto a quien insistían en vestirlo con un complemento para su Mascota incluso cuando era para este evento al que asistiría, caminando con los centinelas del Nivel Superior como guardias de Iason Mink, esperando hasta que el Maestro se enfrentara a la Puerta, pasando por encima de los Escáneres y comandándolos con facilidad. Subiendo a donde estaba su otro grupo y, de la misma manera, esperando a Neu-Júpiter.
Podía verlo en el conjunto de los rostros, esta comprensión, de las responsabilidades que tiene que asumir después de todo esto. Y aunque las cosas no harán más que aumentar de ahora en adelante, también parecen tranquilos, con toda confianza, mientras inclinan la cabeza ante el único semental de Tanagura. Su lealtad no vaciló ni por un segundo. Era como si ellos también estuvieran renovando su determinación. Estar en servidumbre para siempre. La Casa de Júpiter será gobernada con una precisión indomable. Todos ellos casi prometieron que serán el principal apoyo de sus Maestros en los años y aún más en el futuro.

Llegando a la cima, el Blondie superior fue recibido por la misma atmósfera que anteriormente había conocido a los demás. Sin embargo, una vez que su paso fue recibido por la atención de sus hermanos, los doce del Concilio se pusieron de pie, sus compañeros Blondies que ahora, en reverencia a su presencia, sintieron que esa sensación familiar se elevaba en él. Incluso el Anillo Oscuro del Maestro parecía pesado mientras lo levantaba brevemente para echar un vistazo, ascendiendo a este precipicio de la fuerza de Tanagura en sus resplandecientes túnicas abiertas.

Esto. Era. Poder.

Él gobernará este mundo sin temor ni duda, un alma indomable más dura que cualquier aleación. Hasta este punto, se le ha dado todo lo que necesitaba y lo utilizará todo. Por la capital. Para Amoï. Por la continuidad.... por Riki, que fue su razón de volver al poder una vez más.

"Iason..."

Lo escuchó. Claramente más que nada en realidad, el calor ahora familiar se eleva y de la misma manera se arremolina, alcanzándolo, burlándose de él. Con esto, la atención de Neu-Júpiter había cambiado completamente de la apariencia del lugar, no estaba en la sensación o en la atmósfera general. Estaba más en sintonía con la forma en que su mascota se balanceaba en su lecho conyugal ante él, mostrando sus ángulos más íntimos, ya que su cuerpo no se quedaría quieto en absoluto. Incluso la apariencia de sus alas era efímera ya que no podía decidirse si mantenerlas a fuera o ocultas en su espalda.