Capítulo 5

14.5K 1.1K 171
                                    

Una hora después, Sam y Stella me han enseñado toda la colonia y me han dicho cómo debo hacer mi trabajo para que todo sea más llevadero.

Entramos a una sala de juegos y Sam es la primera en sentarse en el suelo. Quitándose sus sandalias nos invita a sentarnos.

—Vengan chicas, disfruten de esto conmigo. –Stella y yo nos reímos y nos sentamos frente a ella formando una pequeña ronda, —Por suerte aquí dentro hay aire acondicionado.

Stella abre una se levanta y vuelve con tres botellas de agua mineral; las tres abrimos nuestras botellas y bebemos algunos sorbos.

No quiero arruinar el ambiente pero necesito sacarme mis dudas y preguntarles lo que bloquea mi mente hace al menos una hora.

—Entonces... ¿podrían decirme porqué Nate se comportó de esa manera conmigo?

Sam y Stella me miran, luego se miran entre si y vuelven a mirarme a mí.

Stella trata de explicármelo.

—Bueno..., Nate es complicado...

No entiendo nada...

Sam parece darse cuenta de mi expresión porque empieza a explicármelo ella.

—Lo que Stella quiere decir es que Nate ha estado raro desde que nos dijeron que comenzarías a trabajar aquí. Se volvió como loco en la sala de reuniones y al día siguiente ni apareció por aquí, y Luke le dio un verdadero reproche. Se ha comportado muy raro últimamente, pero no nos ha dicho porqué. Pero él siempre tiene esos ataques en dónde se comporta como un verdadero imbécil, tú ignóralo.

—Todavía no me queda claro, –digo con duda. -Les juro que no le he hecho nada. No nos veíamos desde hace seis años...

—¿Se conocían desde antes? –preguntan ambas al unísono.

—¿Tampoco les dijo eso? –pregunto.—Si, pasamos un verano aquí cuando éramos niños pero no nos hemos visto desde entonces. Las cosas han cambiado mucho, ahora que lo vuelvo a ver.

Sam está realmente sorprendida.

—Yo soy como su hermana y nunca me ha hablado de ti.

¡Auch!

—Supongo que no era muy importante. –digo con el corazón herido.

—Bueno, –dice Stella levantándose nuevamente, —Los niños llegarán en unos cinco minutos, así que andando. Rue, cualquier duda que tengas sólo dinos y te ayudaremos.

Sonrío poniéndome de pie.

—En marcha, entonces.

•••

Sam toca un silbato y todos los niños comienzan a salir de las piscinas.

—¿Qué sigue ahora? –pregunto desorientada a Stella, quien se encuentra a mi lado.

—El almuerzo. Debemos ir hacia los vestidores de los niños y después hacia el comedor que te hemos mostrado.

Oh.

Seguimos a los últimos niños que se dirigen hacia sus vestidores y esperamos a que se cambien la ropa mojada para acompañarlos para que almuercen. Cuando llevamos a nuestro grupo de niños hacia su mesa Stella me guía hasta una mesa que está contra un ventanal, allí se encuentran sentados Sam y los dos chicos que conocí cuando llegué.

—Hola. –saludo con una sonrisa a todos mientras tomo asiento, -Soy Rue. -me presento nuevamente hacia los dos chicos de unos veinte años.

—Hola, –dice un chico de pelo castaño y tez clara con una sonrisa, —soy Jacob, un gusto. –dice y me tiende su mano. La acepto mientras río.

The First Donde viven las historias. Descúbrelo ahora