38.

2.8K 194 116
                                    

Las cuatro nos encontrábamos sentadas conversando amenamente después de disfrutar de una mañana en la playa. Habíamos decidido pasar la mañana en la playa y la tarde en casa, y así todas ganábamos. Aunque claro, sabíamos que la tía Dara y Minji aceptaron sólo porque tenían planes para más tarde con esos amigos que habían conocido. No me preocupaba mucho, es decir, ambas eran mujeres correctas y Minji, aunque soltera, nos había asegurado —después de un interrogatorio por parte de su hija— que no buscaba diversión de ese tipo y simplemente quería convivir más con personas de su edad. La tía Dara, por su parte, había asegurado que no tenía intenciones de engañar a su actual pareja. Y sí, nos había confesado que estaba viendo a alguien en su trabajo, y que aquella persona la trataba bien y la hacía feliz. Al principio no pude evitar molestarme un poco porque no me lo había dicho, pero me sentía feliz por ella.

Y hablando de parejas... Jennie y Jisoo actuaban muy raro hoy. Se veían más felices y de vez en cuando compartían miradas cargadas de complicidad y afecto, Lisa y yo habíamos chocado los cinco cuando vimos que nuestro plan dio resultado... Aunque habíamos tenido que escuchar gemidos casi toda la noche, pero valía totalmente la pena.

Ahora, acomodadas en el sofá, Jennie y yo comíamos palomitas mientras observábamos como Lisa y Jisoo jugaban en sus celulares. Mis piernas, sobre las de Lisa, eran masajeadas cada cierto tiempo por sus manos cuando se tomaba unos instantes del juego. Jisoo, por su parte, mantenía sus piernas sobre el sofá y la mirada concentrada en el celular entre sus manos. Y Jennie, bueno... Ella les enviaba una mirada aburrida.

—¡Agh! ¡Maldición! 

Jisoo gritó y lanzó su celular al sofá. Afortunadamente cayó sobre uno de los cojines, y por esa razón no se hizo daño.

La pelinegra apuntó a Lisa con su dedo índice y le gritó.

—¡Me bajaron de rango! ¡Y es todo culpa tuya!

—¡¿Ah?! ¡¿Mía?! —Lisa, quien se encontraba de brazos cruzados sentada a su lado, frunció el ceño y la observó.

—¡Sí! ¡Si me hubieses hecho caso, no habríamos perdido!

—¡Claro que no! ¡Eran más que yo!

—¡Te dije que defendieras la maldita torre y sólo te fuiste tras ellos! ¡Sé que eras un tanque pero no eres invencible, imbécil!

—¡No es mi culpa! ¡Si tú no hubieses muerto de forma estúpida habríamos logrado bajárnoslos!

—¡¿Forma estúpida?! ¡Todos murieron menos tú!

Jennie y yo nos observamos levantando una ceja, un tanto confundidas ante la absurda discusión que se desarrollaba frente a nosotras.

—¡Nunca me haces caso! ¡Fuiste inútil en la partida! —gritó Jisoo, completamente encolerizada.

—¡Tú fuiste inútil con ese personaje! ¡No sabes usarlo! —contraatacó Lisa del mismo modo.

—¡¿Disculpa?! —llevando una mano a su pecho con dramatismo, la pelinegra jadeó—. ¡He usado ese personaje mucho antes de que tú usaras el tuyo!

—¡Usarlo antes no te convierte en experta! ¡Eres un asco!

Jisoo jadeó indignada otra vez y le golpeó el pecho con su dedo índice.

—¡Retira lo que dijiste, Manoban!

—Sueñas, Kim.

Jennie y yo tuvimos que intervenir antes de que llegaran a los golpes.

—¿Se puede saber por qué están peleando esta vez? —preguntó Jennie, un poco irritada.

—Porque Lisa es un asco y se cree invencible —contestó Jisoo, cruzándose de brazos y haciendo un puchero.

Promise┊ChaelisaWhere stories live. Discover now