Fotografía

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Estaban teniendo un "día de playa" como decían los de la era moderna.

Kohaku no habría creído que la playa sirviera para algo más que pescar y conseguir materiales pero ¡realmente se estaba divirtiendo mucho! Nadar solo por nadar sin ningún otro propósito era sorpresivamente relajante y divertido.

Aunque algunos no estaban del todo felices con su estilo extremo de nadar.

-¡Vamos, Kohaku-chan! ¡Quiero tomarte aunque sea una foto sin que te veas como un fantasma!- protestó Minami con su cámara en alto mientras se acercaba a la orilla del mar.

-¿Por qué?- salió del agua con una mueca de confusión, ignorando las miradas indiscretas que le lanzaron la mayoría de los hombres presentes al verla en ropa interior y totalmente empapada. Mientras no intentaran tocarla ni dijeran nada estúpido, la verdad le daba igual. –Ya me tomaste fotos antes.- no entendía la insistencia de la reportera en tomar tantas fotos de cualquier cosa.

-¡Te ves súper bonita en tu traje de baño, Kohaku-chan! ¡Ya tome fotos de todas las chicas en el día de playa! ¡Mereces tener tu propia foto también!-

-Eh, realmente no me importa...-

-¡Vamos, solo una foto y ya!- insistió casi haciendo pucheros.

-Bien, bien.- suspiró. –Que sea rápido.- quería volver a divertirse nadando.

-¡Claro! Pero primero has una pose.- pidió muy emocionada, apuntándola con su cámara.

-¿Pose? ¿Qué pose?-

-¡La que sea, como te sientas cómoda! Tal vez algo como... eh... manos en la cadera o en la cabeza o ponerte de lado...- sugirió.

Aunque un poco confundida, Kohaku decidió tomar todas las sugerencias. Colocó una mano en la parte posterior de su cabeza y otra en su cintura y se colocó ligeramente de lado para la perspectiva de la cámara, esperando que eso sea una buena pose.

-¿Está bien así?-

-¡Muy bien! ¡Ahora solo sonríe!-

Kohaku sonrió lo más genuinamente posible, alentada por el entusiasmo de la reportera por las fotografías, y el flash se disparó de inmediato, cegándola por los próximos minutos debido a sus excelentes ojos tan sensibles mientras Minami se disculpaba profundamente por haber olvidado la sensibilidad que venía con una vista tan buena.

Una semana después, Ginro llegó a donde Minami y Mirai trabajaban en sus fotografías para llevarles su comida como excusa para mirar los voluptuosos pechos de la reportera como el pervertido que era.

Dejó la comida y sus ojos se fijaron en las fotografías ya listas pegadas a una pared.

Sonrió como idiota al ver las fotos de las chicas en la playa, pero los ojos casi se le salen de las cuencas al ver una foto de Kohaku sola posando como una diosa en ese bikini amarillo tan revelador que Yuzuriha hizo para ella con esa tela suave llamada seda.

Ella no tendría los pechos más grandes ni la cara más bonita, pero si el mejor trasero y las mejores piernas en opinión de Ginro, ¡y de todos modos el resto de ella era fantástico, podría mirarla por horas! ¡Y esta foto mostraba absolutamente todo en primer plano y con bastante claridad! Sí pudiera tener la foto, entonces podría mirarla todo lo que quisiera sin el riesgo de que Kohaku lo mate mientras no lo descubra. ¡Ohh, la ciencia era fantástica en verdad!

Casi sintiendo la baba escurrir por su boca, miró de reojo a donde Minami y Mirai estaba distraídas preparándose para comer su almuerzo y aprovechó ese momento para tomar la foto rápidamente, guardándola entre sus ropas cuidando no doblarla antes de que pudieran verlo.

One-shots SenHakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora