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—¿Qué estás haciendo? Voy para allá con Hyungwon —habló Minhyuk apenas Changkyun atendió su teléfono.

—Estoy con Kihyun —respondió mirando al castaño, quien cortaba pedazos de queso para la pizza.

—Opa, ¿Interrumpimos algo? —una risita y un murmullo inentendible se escuchó del otro lado—. Preguntale si le molesta que vayamos, tenemos cervezas

—Mmh... —mordisqueó su labio y llamó al mayor—. ¿Te molesta si vienen Minhyuk y Hyungwon?

—¿Cómo me va a molestar? Es tu casa —sonrió.

—Bueno vengan —le respondió al rubio.

—Estamos en la esquina, anda abriendo

Cortó el teléfono y soltó un suspiro. Kihyun se percató de ello y antes de que Changkyun se fuera habló.

—¿No querías invitarlos?

—Quería estar solo con vos —murmuró, saliendo de la cocina para abrir la puerta. Kihyun apretó sus labios para no sonreír y siguió con su trabajo.

Al poco tiempo se escucharon varias voces en la entrada y luego los pasos que se dirigían hacia la cocina. Kihyun no iba a negar que se sentía algo incómodo, aunque podía considerar a Minhyuk como un amigo.

—¡Ki! —escuchó la voz de Minhyuk a su espalda. El nombrado giró con una sonrisa—. ¿Te molesta un abrazo cortito?

—No, para nada —respondió, abriendo sus brazos para invitarlo. Al instante Minhyuk se acercó y rodeó su cuerpo unos segundos, con varios golpecitos amistosos en la espalda.

—Hola, Kihyun —saludó Hyungwon, un poco desde la distancia. Esperaba no incomodar a Kihyun y saber cómo tratar con él. El castaño le devolvió el saludo y volvió con su trabajo de las pizzas.

—Se pueden sentar si quieren —habló Changkyun, mientras guardaba las botellas en la heladera. Hyungwon tomo asiento, pero su amigo no.

—¿Me prestas un pantalón? No aguanto más el jean

—No —contestó, caminando en dirección a su habitación. Min lo siguió con una sonrisa hasta que ambos estaban en el cuarto.

—¿Algún chisme? —preguntó curioso, sentándose en su cama.

—Ninguno —levantó sus hombros y comenzó a revisar sus cajones en busca del pantalón deportivo.

El rubio miró a su alrededor, analizando cada rincón hasta que sus ojos y boca se abrieron por completo al encontrar el envase de lubricante en el suelo. Mordió su labio para no reír y pensó bien sus palabras.

—Si interrumpimos podías haberlo dicho

Changkyun volteó confundido para verlo, la peor idea que tuvo. Minhyuk sostenía con la punta de sus dedos el envase, mientras su rostro tenía esa típica sonrisa que hacía cuando descubría un chisme, pero esto era mucho más que eso. El pelinegro enrojeció por completo y se acercó rápidamente para sacárselo de las manos y guardarlo en su cajón, sin decir ninguna palabra.

—Contame —sacudió el brazo del menor y palmeó a su lado en el colchón.

Changkyun lo dudó unos segundos, pero terminó sentándose, cubriendo su rostro de vergüenza. Min rió y esperó a que su amigo hablara.

—Kihyun... no, yo... bueno, sí —intentaba explicar, moviendo sus manos en el aire.

—¿Lo disfrutaron?

Changkyun dejó caer sus manos y asintió con una sonrisa—. Estoy enamorado, me siento idiota

—¿Son novios? —siguió indagando, le ponía nervioso que Changkyun contara por partes.

—No, pero le dije que lo iba a esperar, porque quiero estar con él

—Dios, sos un amor

El pelinegro volvió a levantarse a buscar el pantalón y se lo tiró a Minhyuk. El rubio rió y esperó a que el contrario salga de la habitación.
  Mientras Chang regresaba, podía escuchar unas risas, cosa que lo sorprendió porque no pensaba que Kihyun y Hyungwon iban a hablar. Al entrar, se encontró con ambos casi sin aire de reír, el peligris cubría parte de su cara con la mano, mientras que Kihyun se sostenía de la mesada.

—¿Qué pasó? —preguntó, quedándose al lado del mayor.

—Kihyun... —logró decir Hyungwon, buscando aire para calmar su risa—. Le estaba contando de una serie y me dice "parece interesante, la voy a ver" y como idiota le digo "está en inglés nomas, pero tiene subtítulos" me sentí re mal

Otra vez estallaron en risas. Changkyun mordió su labio para no reírse y al instante llegó el rubio. Cuando explicaron otra vez la situación, no pudo evitar unirse a las carcajadas.

—Que humor horrible que tenes, Kihyun —dijo el rubio mientras se sentaba—. Kyun, abrite una cerveza, caminar me dio sed

—¿Van a empezar con su alcoholismo? —bromeó Kihyun, buscando alguna silla libre para sentarse.

—¿No vas a tomar? —le preguntó, agarrando el envase que Chang le entregaba. Kihyun levantó sus hombros ante la pregunta—. Un vasito, dale

—Mira si me emborracho y veo doble

—¡Kihyun! —se quejó el pelinegro, mientras los otros dos se reían del comentario—. A mi no me sirvas mucho

—¡¿Qué?! —rió el rubio—. Ahora se hace el sano

—Vengo tomando mucho, dame un respiro —se sentó al lado de Kihyun y agarró su mano para llamar su atención. El castaño se percató de ello—. No tomes si no queres

—No te preocupes, si no me gusta te doy mi vaso —sonrió, acariciando la mano del menor con su pulgar. Chang también sonrió al verlo.

Pero luego de ese medio vaso, Minhyuk siguió rellenando el mismo, entre las porciones de pizza y las charlas, Kihyun comenzaba a emborracharse. Changkyun estaba entre preocupado y enamorado, ver a Kihyun más suelto, con sus mejillas sonrojadas y una sonrisa que no se iba, le derretía el corazón.
  Incluso a veces el castaño volteaba hacia donde estaba el menor para agarrar su mano y reírse con él. Changkyun se sorprendía, hasta que en ese momento de ebriedad llegó a pensar que Kihyun podía ver, no entendía cómo Ki podía saber dónde él y cada parte de su cuerpo se ubicaba.

—Min, tenemos que juntarnos un día —Kihyun propuso, estirando su mano en dirección al rubio.

—¿Hay chisme? —preguntó burlón, agarrando la mano del castaño. Changkyun enrojeció y lo miró fijamente, Minhyuk borracho era muy peligroso—. Cuando quieras, Ki

—Min, ¿Vamos? —habló el peligris, mirando la hora en su teléfono. Habían pasado más tiempo del que pensaron.

—Ah sí, vengan a ensuciar nomas —se quejó Changkyun, levantándose para abrirles.

—No te enojes, me la debes por las veces que vomitaste mi piso —respondió Min. Kihyun rió a lo alto, contagiando al rubio, quien lo ayudó a levantarse para darle un corto abrazo—. Chau, Ki

—Nos vemos —saludó entre risas. También saludó a Hyungwon y esperó parado a que Changkyun volviera de cerrar la puerta.

—¿Estás bien? —la voz preocupada de Changkyun llamó su atención.

Kihyun asintió varias veces y dio un paso corto e inseguro en dirección al menor. Chang se acercó al instante para agarrar su cintura y evitar que el castaño se tambaleara.
  Yoo soltó una risita y rodeó el cuello del pelinegro, mientras que una mano acariciaba con cuidado su mejilla. El contrario sonrió y ladeó su cabeza para más contacto. Sin decir nada, Kihyun buscó unir sus labios, un beso que no iba a ser negado por el menor.

Los besos eran torpes, ambos borrachos, uno más que el otro. Kihyun no podía evitar reír entre los besos, sus pensamientos estaban nublados, no entendía la situación, pero se sentía muy bien con Changkyun. Bajó sus manos por el cuerpo del pelinegro, quien soltó un suspiro sobre sus labios, rodeó su cintura y sus manos apretaron con fuerza su trasero. El pelinegro dio un ligero salto en el lugar, porque no esperaba ser agarrado así.

—¿Te molesta? —preguntó Kihyun, pero sin soltarlo.

—Para nada —sonrió, volviendo a retomar sus besos, esta vez bajando por el cuello.

el sonido de tu voz ¡! changkiWhere stories live. Discover now