stormy weather [2]✨

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Donde Volkov y Horacio son pareja desde hace tiempo, y luchan contra todo lo que los intenta separar.

Salvo que son ellos mismos eso que los intenta separar.

(Parte 2, y probablemente final)
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Era más fácil así.

Se repitió ese pensamiento mientras conducía de vuelta a casa. Los nudillos blancos de apretar el volante, y los ojos rojos de retener las lágrimas. Era más fácil así.

El móvil vibró una vez más en el asiento del copiloto, pero no lo tocó. Ni siquiera desvió la mirada, fija en la carretera, aunque su mente estuviera en otra parte.

En ese momento no había nada que le impidiera pisar el acelerador y soltar el volante. Y la idea no parecía tan desagradable. Pero no podía hacerle eso a Volkov. Ya suficiente daño le había hecho esa tarde.

Aunque fuera más fácil así.



Horas antes...



A Volkov no le sorprendió que Horacio quisiera hablar con él. Lo llevaba notando raro todo el día, pero no había preguntado demasiado. Si se lo quería decir, se lo diría. No iba a presionarlo.

Lo que sí le sorprendió fue el motivo.

Maia lo había conseguido. Lo que ella quería era que se separaran, y lo había intentado activamente de todas las formas posibles. Pero, a veces, no hay nada más efectivo que no hacer nada. Y el silencio de la mujer tras la amenaza de que las cosas no se quedarían así había logrado que Horacio desconfiara.

Se había puesto paranoico de que algo podría estar sucediendo. Ya en su momento le había parecido raro que Maia cancelara el traslado de Volkov a Rusia sin poner pegas, pero había intentado convencerse de que no significaba nada. Aún así, eso no había acabado con el miedo. Horacio se sentía como si algo estuviera a punto de explotar, pero sin saber el qué, cómo o dónde. Y eso lo ponía de los nervios, porque lo único que quería hacer era proteger a Volkov.

Fue entonces cuando llegó a la conclusión de que era imposible protegerlo si estar con él cada día era lo que lo ponía en peligro.

—¿Qué... quieres decir con eso? ¿A qué te refieres? —preguntó, nervioso.

Horacio suspiró, sentado sobre su escritorio. La sede no era el mejor lugar para hablar, pero si lo hacían en casa luego no tendría un lugar al que huir.

—Ya sabes a lo que me refiero —dijo, igual de nervioso que Volkov, aunque disimulándolo un poco mejor.

—N-No... No, no sé a qué te refieres, Horacio —dijo, levantando un poco la voz.

Horacio negó con la cabeza. No podía mirarlo a la cara, así que tenía la vista fija en la puerta, por si entraba alguien.

—No podemos estar juntos si tu vida está en peligro —decretó. Volkov lo miró unos segundos, en silencio, pero al ver que no continuaba decidió hablar él.

—Horacio, por favor, mírame —dio unos pasos hacia él—. Eso es una tontería, ¿vale? No... no pienses así, por favor.

Acercándose un poco más, consiguió que Horacio lo mirara.

—Lo siento. Yo tampoco quiero hacer esto, pero... será sólo temporal, mientras... estés en peligro, mientras... Maia esté por aquí —Volkov negó con la cabeza. No quería escucharlo más.

No era la mejor opción. Para empezar, porque ese "temporal" podría alargarse mucho, sobre todo si dependía de una persona como Maia, acostumbrada a salirse siempre con la suya. Y, además, porque estar separados no iba a ser beneficioso para ninguno.

↳;; ❝Volkacio AUs♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora