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Tal como Frida y Ivar lo planearon: la primera batalla la perdieron. Sólo que ella no estuvo de acuerdo que Hvitserk rodeara el ejército, metiéndose en el bosque. Era peligroso para cualquiera. El rey Harald y el obispo Heahmund se quedaron combatiendo los ejércitos principales. Ivar se llevó a Astrid en su carruaje, por órdenes del rey Harald, ya que ella está embarazada. Y por órdenes del menor de los hijos de Ragnar, Frida lo seguía junto con ese grupo de gente que iría a proteger los barcos y el campamento. 

Todo sucedió demasiado rápido, una derrota demoledora, Harald no tuvo opción, más que retirarse, y Hvitserk con suerte sobrevivió, por eso Frida se alegra enormemente al ver a su cuñado con vida aún, sin saber todo lo que luchó en ese bosque. Ivar está furioso cuando el rey Harald le informa que el obispo ha muerto. Esa noticia también le afecta a Frida, pero no de la misma forma que a su prometido.

Todos regresan al reino de Harald. El rey no para de remarcar la terrible derrota que Ivar les ha hecho pasar, eso ha sido una vergüenza de la que difícilmente se recuperaran. Y apenas el hombre reclama al menor de los hijos de Ragnar, Hvitserk (por órdenes de Ivar) habla sobre pedir ayuda a Rollo.

Horas más tarde, la pareja de prometidos se encuentra en su habitación.

—¿Qué quería Ubbe? —cuestiona Ivar a Frida, llegando a su habitación. Finalmente teniendo oportunidad de hablar a solas con ella.

—Decirme que Floki volvió a Kattegat, pero se fue de nuevo —Frida sabe cómo modificar el ánimo de Ivar, sabe que esa noticia lo alegrará, y lo hará olvidarse de todo.

—¿En verdad?

—Yo le creí —anuncia ella con una sonrisa— no tendría razón para mentir. Al parecer Floki encontró un nuevo mundo, la tierra de los dioses. Él está bien.

—Te confesó su amor —recuerda Ivar, ahora más tranquilo.

—Lo hizo. ¿Qué más da? —Ivar sonríe, acercándose a la cama, listo para descansar a un lado de la chica, quién ya está lista para dormir.

—Todo salió perfecto, Frida. Gracias por apoyarme allá afuera.

—Lo mereces, Ivar —ambos se sonríen y se acercan para regalarse un beso. 

Frida [Ivar The Boneless/Alex Høgh Andersen]Where stories live. Discover now