70

237 14 2
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¿Cómo estás Frida? —es lo primero que cuestiona Hvitserk, acercándose a la chica para hablarle, intentando apartar esa prenda que cubre su cuello

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¿Cómo estás Frida? —es lo primero que cuestiona Hvitserk, acercándose a la chica para hablarle, intentando apartar esa prenda que cubre su cuello.

Ella sonríe, agradece el gesto de Hvitserk por preocuparse. Por esa razón, Frida se descubre, dejando que él vea esa marca morada y roja que Margrethe causó el día anterior.

—Bueno, tardará un tiempo en irse, fue imposible ocultarlo de Ivar, pero ya estará mejor.

—¿Hablaste con él? —cuestiona intrigado, sabe que Frida es una chica que tarde o temprano hablará de las cosas que la incomodan o lastiman.

—¿Te gustaría ir a cazar? Me sentiría mejor si sé que estamos solos.

Hvitserk asiente, no tiene problema en aceptar salir del Gran Salón. Mientras ambos se marchan, Frida le avisa a Ivar que irá a cazar para distraerse, él asiente, tiene asuntos que tratar.

—No lo negó. ¿Cómo podría? —dice Frida, apenas se alejan de la civilización y caminan.

—¿Aun así lo aceptaste?

—Sabes lo que pasó en Inglaterra con Ubbe. Hvitserk, me siento culpable por eso, y siento que fue peor de lo que él hizo. Es decir, Ubbe es hijo de Ragnar también. No hay día que no me arrepienta, y entiendo porque él no lo dijo antes, yo tampoco le diré sobre lo que pasó en Inglaterra.

—¿Lo sigues amando? —Frida se detiene, ocasionando lo mismo en él, para observarse fijamente. Ella no sabe que responder exactamente.

—Mi cariño por él jamás se irá. Amo a todos los hijos de Ragnar, daría mi vida por ustedes. Pero, te mentiría si te digo que todo sigue igual. Las cosas han cambiado, lo han hecho desde hace mucho tiempo. Y ahora, ya no espero nada más de Ivar.

—Vaya forma de contestar a una pregunta de "sí o no"—Hvitserk no evita ser burlón ante ello, logrando irritar a la chica, él lo nota—. Sólo quiero que sepas que no le debes nada a Ivar. No deberías sentirte culpable por lo de Inglaterra, él lo tenía bien merecido. ¿Crees que tu relación con Ivar esté muriendo?

—Él me ama —la chica ahora está a la defensiva—. Las relaciones pasan por este tipo de cosas, Hvitserk. Tú mismo me lo has dicho: igual que todos los hombres, Ivar es un vikingo, se supone que es normal que haga esas cosas, y aun así siga amándome.

—Sé lo que dije, pero me parece injusto por las mismas razones que a ti. ¿Acaso no lo ves? Ivar rompió tu confianza desde hace mucho, y a pesar de que él sabía lo que hacía, seguía haciéndote creer cosas irreales, te convenció de ello —ahora Hvitserk se ha alterado, está a la defensiva, demasiado molesto, no con Frida exactamente.

—Fue ingenuo creer que eso era verdad. Somos vikingos Hvitserk, tan sólo obsérvate. Hace unos meses compartías a Margrethe con Ubbe.

—Eso es diferente Frida. Todos sabíamos lo que pasaba ahí, a diferencia de tu caso —entonces Frida se ha sentido atacada. No sabe que responder, y por eso explota, hablando más fuerte.

—¿Entonces que se supone que haga? Soy su esposa ahora, soy la reina de Kattegat.

—¿Quieres que yo te de la respuesta? —ambos ahora están enfadados. Hvitserk se pregunta a dónde se ha ido esa chica que habría dejado a su hermano en la primera infidelidad—. ¿Ahora se supone que el matrimonio te hace aceptar las humillaciones? ¿Es por esa razón que mientes sobre la virilidad de Ivar? ¿Mientes por él o por ti?

—¿De qué demonios hablas? —ahora los dos se están gritando en medio del bosque, sosteniendo esas armas de cacería. 

—Margrethe me lo dijo. Ivar no pudo violarla porque no es un hombre de verdad, él no puede satisfacer a una mujer, y por supuesto tampoco puede dar hijos, todos lo saben. Mientes cada vez que sus gemidos se escuchan, cada vez que entran a la habitación para acostarse, en realidad no hacen nada, porque no pueden. ¿Mientes para respaldar esa historia sobre su virilidad, o para qué todos piensen que en verdad estás satisfecha con él?

—Eres un imbécil —dice Frida soltando una risita furiosa, dispuesta a regresar a Kattegat, no tiene caso seguir discutiendo con él.

—No eres la Frida que conozco —esto la hace detenerse y girarse para verlo.

—¡Sorpresa! Las personas cambian. Así como no soy la misma de cuando era una niña, no seré la misma jamás.

—¿Por qué sigues con él? ¿Es el matrimonio? ¿O acaso es el poder? Tú ya no lo amas.

—¿Qué vas a saber sobre eso?

—¿Por qué Ivar? —cuestiona finalmente, desesperado por una respuesta que esperaba desde hace unos años—. ¿Por qué lo amas de esa forma, tan incondicional?

—Suenas como Sigurd, y estoy cansada de esa estúpida pregunta.

—Tenías cuatro opciones —repite Hvitserk, ahora sonando desesperado, quiere comprender, y quiere que ella comprenda también-. Björn, Ubbe, Sigurd y yo. ¿Por qué Ivar?

—Ve a casa con Margrethe.

—¿Es tan difícil de ver? Crees que te necesita, y crees que lo necesitas, te has convencido de eso, que no importa todo el daño que te haga, estás dispuesta a soportar cualquier cosa que te haga. Yo jamás te habría mentido Frida, no podría. Él no entiende todo lo que vales, no puede verlo.

—¿Y tú si ves lo que valgo?

—Por los dioses. ¡Estoy jodidamente enamorado de ti! ¿En verdad no lo has notado? Haría cualquier maldita cosa por protegerte, tú eres la razón por la que yo no seguí a Ubbe, me quedé porque tenía miedo de lo que Ivar pudiera hacerte. Mentí sobre la vez que dormiste con Ubbe porque te amo. No me importa si no sientes lo mismo por mí, sólo me interesa verte feliz, pero ahora no lo eres, y es por eso que estoy tan furioso. Puedes conseguir lo que sea con tan sólo pedirlo, por esa razón no comprendo porque permites que te haga sufrir.

Frida se queda estática. Hvitserk sólo se va, furioso.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Frida [Ivar The Boneless/Alex Høgh Andersen]Where stories live. Discover now