Invasor(es)

16. Lil' boy.

Doyoung por más que quisiera sentirse todo un adulto que no necesitaba de nadie más, no podía negar que con la presencia de su tía se sentía como un niño pequeño.

No podían culparlo, su tía lo seguía tratando como el bebé que según ella decía que era. Para Jessi siempre sería el pequeño niño que se enfermaba con facilidad, o que lloraba porque le daba miedo la oscuridad. Un pequeño bebé que disfrutaba de ser cargado en brazos incluso si no podía expresarlo por el miedo a ser regañado.

—Hablar con tu padre es agotador —susurró Jessi, acariciando los cabellos negros de su sobrino. —Pero puedes estar más tranquilo de ahora en adelante, existe una posibilidad de que cambie.

—Las personas no cambian —Doyoung volvió a ocultarse entre los brazos de su tía, somnoliento. —Mi papá necesita ver a un doctor, ¿Por qué no vamos al hospital del centro de la ciudad? Dicen que tienen un excelente terapeuta...

—Duerme, cariño, necesitas descansar un poco.

El silencio total se hizo presente después de unos minutos. Doyoung se había quedado dormido entre los brazos de su tía al igual que cuando apenas era un pequeño bebé que no entendía nada de lo feo que podía ser el mundo. Jessi quiso llorar por este simple hecho, su Doyoung se veía tan frágil al igual que siempre, parecía incluso más pequeño que antes.

Desprotegido. Esa era la palabra que podría resumir la forma en la que se veía.

¿Cómo no podría pensar eso? Si Doyoung aún cabía con facilidad entre sus brazos.

Para su mala suerte, la mañana siguiente llegó demasiado rápido. Jackson ya se encontraba en la cocina, bailando wannabe y tratando de hacer un desayuno medio decente mientras que Jongdae a su lado tarareaba la canción en un tono bajo, aunque no admitirá en voz alta que le gustaba demasiado.

—Yo, I'll tell you what I want, what I really, really want —cantó Jackson señalando a Jongdae, casi obligándolo con la mirada a cantar.

—So tell me what you want, what you really, really want —Jongdae hizo su mejor intento de baile, causando risas en Jackson.

El pobre de Renjun, quién había entrado al lugar con esperanza de que su desayuno estuviese listo, se encontró con la terrible escena, ocasionando una cara de asco en el. Sin dudarlo corrió para poder salir de ahí.

Aunque, por otro lado, Chenle bailaba con toda la emoción del mundo bajo la atenta mirada cariñosa que le daba su hermano mayor, riendo de vez en cuando porque Minseok parecía querer dejar de lado todo para filmar ese momento gracioso.

Todo era risas hasta que se daban cuenta de que molestaban a Jessi, quien intentaba hacer un desayuno decente para su sobrino mientras que su esposo la interrumpía a cada cinco segundos para darle un abrazo o un beso. Estaba bien un poco de cariño de vez en cuando, pero no durante la mañana y mucho menos escuchando a spice girls.

—If you wanna be my lover! —gritó Minseok, saltando detrás de su hermana mayor y logrando su meta de sacarle un susto de muerte. Habría sido todo risas de no ser porque el sartén que Jessi llevaba en manos terminó chocando contra su cabeza. —¡Ay! ¡Jessi!

—Me vas a provocar un infarto a temprana edad —la mujer rodó los ojos, finalmente terminando con el desayuno. —Máster chef se queda corto ante mi creación.

—Es una maldita carita feliz con fruta —le reclamó su hermano menor, alzando una ceja. —Que aberración.

La presencia de Doyoung en la cocina casi pasa desapercibida de no ser porque discretamente Jessi lo llamó para que tomara su desayuno, no pudiendo negarse a ello.