Un mundo de cabeza *Malec*

Cap #13

Simon

La fiesta era aburrida en la más simple expresión. Mesas redondas con manteles azules, del techo cuelgan banderines del mismo color con el símbolo Herondale en plateado y el invitado de honor, Jace, está en la mesa central junto a sus padres y abuela. Su padre se levanta y golpea su copa con la cuchara. Oh qué bien, otro discurso.

–Hoy, mi hijo ha sido aceptado como miembro oficial de la Clave gracias a su dedicación, esfuerzo y amor por su raza. No podría estar más orgulloso de él. Y quisiera tomar esta oportunidad para agradecer al que hizo todo esto posible, Simon Lewis. Un aplauso por favor.

Todos aplauden y yo me levanto recibiendo este gesto tan lindo... y tan repetido, me han agradecido sus padres, su abuela, sus tíos, Clary e incluso Jace, pero para ser sincero es lo más divertido que he hecho en estas últimas horas. Por el ángel, como extraño a Helen, ella sí sabía animar las cosas.

–¿Aburrido? –Clary se sienta a mi lado.

–Más que en un club de tejer –respondo deprimido–. Esto es horrible, se supone que Jace debería disfrutarlo, pero míralo, parece un muerto viviente.

Clary se asoma sobre su hombro para verlo y yo hago lo mismo. Desde que llegó parece decaído, su piel se ve más blanca y cuando fui a felicitarlo no sonrió, ni siquiera lo intentó.

–Quizás está cansado. Ya sabes lo duro del examen.

–No, es otra cosa.

–Estoy harto –Alec llega a la mesa–. ¡Odio estas fiestas! ¿No prefieren salir a algún lado?

—¿Ves, Clary? –tomo a mi parabatai por el cuello– Él me entiende.

–Claro, los dos son hombres sin clase.

–Se le llama adolescencia, hermanita –Jonathan la toma por los hombros–. ¿Quieren salir? Puedo sacarlos.

–No sabes cuanto me agradas en este momento –Alec le dedica un guiño.

–¿Pero y Jace? –pregunta Clary– ¿Piensan dejarlo aquí?

–¿Tan malo sería dejar al novato? –su hermano pone mala cara.

No sé por qué Jace no le agrada, tal vez algo de hermano mayor. A mí tampoco me agradan mucho los pretendientes de Becky.

–Bueno, es su fiesta ¿no? –Clary mira de nuevo a sus espaldas– Y no se ve feliz, deberíamos sacarlo.

–Creo que suena bien –acepto–. Pero si vamos todos ¿por qué no invitar a Isabelle?

–¿A Izzy?

–Alec, la pobre de tu hermana tampoco parece divertida junto a tu padre –señalo la mesa donde Robert platica con otros hombres e Isabelle agita su bebida–. Así sería una noche para los jóvenes. ¿Qué dicen?

–Yo encantado –Jonathan se separa de Clary y pone una sonrisa juguetona.

–Por mí está bien –Alec se encoge de hombros.

–Sólo si va Jace –condiciona Clary.

–Entonces hablaré con Jace –me ofrezco antes de señalar a Alec–. Tú ve por tu hermana y nos largamos de aquí.

Clary

La fila de Pandemónium no era algo que aguantaría con mis tacones, así que todos usamos un glamour para que pareciera que éramos los dueños y así poder pasar. No sé cómo serán los dueños, pero el glamour está diseñado para que los demás vean lo que tú quieres que vean. Ahora estamos en una mesa privada y ya pedimos bebidas.
Me alegra que Jace viniera, lo conozco desde hace mucho y saber que está aquí es importante... además esto es por él, por nadie más.