Caminos Cruzados💕

CAPÍTULO 51: ¡Vete a la mierda!

Se van alejados a escuchar el sonido del mar, a escuchar a las sirenas cantar. Se van a un malecón muy tarde. Se suben en los muros enormes, ven el mar desde lejos, como las olas revientan en las orillas. Los ciclistas, las parejas enamoradas, los ambulantes y ellos sentados en aquel muro que tenía un gran precipicio. Las luces de las calles y siguen sentados callados. Amil recuesta su cabeza en el hombro de Brandon.

- Papá, solía traerme aquí- dice nostálgico Brandon, ella le da un beso en la mejilla de consuelo y se apega más a él.

- Gracias por compartir este lugar conmigo, lo disfruto tanto. El mar me encanta, vivo fascinante de su belleza.

- No quiero entrar en discusiones, pero... Te encanta porque es aquí en el mar donde encontraste a Austin de niña. O porque estás...conmigo justo ahora.

- Es aquí donde estoy y donde voy a estar.

- Mi sueño de pequeño era casarme con una mujer humilde y sensata, una persona como tú. Siempre lo pedía a las estrellas.

- Cada vez me doy cuenta el chico talentoso y genial que eres- Amil, estaba queriendo lo que tenía enfrente de sus ojos- Te estoy mirando y mi corazón ama lo que ve. Y si ese sueño se cumple conmigo, te prometo que este momento, justo este, el de AHORA, será para toda la vida.

- Hasta que la muerte los separe- le dice Brandon, colocando su mano encima.

- Te quiero Brandon. No me dejes caer más.

- Intentaré salvarte de ese mundo. Porque yo quiero ser tu mundo. Lo que pase mañana que pase, por AHORA, somos tú y yo. Te quiero princesita- le roba un piquito de los labios y ella lo coge con fuerza para pegar sus rostros, no le bastaba con sentir sus labios de él, quería ahogarse en ellos.

"Tú eres mi voz, mi aliento, mi canción, mi paz. Significas todo. Tú eres mi sueño y te quiero a mi lado" – Brandon."

...

Fui a ver a mi padre a la cárcel, el gran empresario de muchas ciudades, ahora vivía entre barrotes que oprimían su libertad. Papá me comentó que mamá venía todas las mañanas y las tardes de todos los días, y le alegraba tener su apoyo y el mío.

- Yo no apoyo que asesines a una familia- respondo son seriedad, él se desconcierta- Eres mi padre, tengo que saber cómo estás.

Mis palabras le hieren el corazón, a mí me duele más que no me diga la verdad y se mantenga firme en su decisión de morir en silencio, las cosas no cambiarían si me dijera, igual me mantendría seria y fría, pero quiero saber qué lo llevó hacer aquel salvajada. Ese día la pasé con él conversando de las cosas buenas que me han pasado, cómo sigue mamá y el día a día que ha tenido mi padre con amigos no tan agradables dentro de esa cárcel. Me da lástima saber que sus últimos días lo pasará aquí, yo me lo imaginaba comiendo con mi novio o esposo, llevándome de la mano en el altar e intentando golpear a todo el que se me acercara, y sin embargo nunca lo iba hacer. Le sonreía apagadamente escuchando sus aventuras de joven y deseando en el alma que él nunca haya cometido eso.

INICIOS DE JULIO.

Actualidad.

Las clases empezaban todavía el veinte, nos quedaba pocos días para iniciar el nuevo semestre. Siete meses meses sobreviviendo sin él.

Querido Dios:

Amil.

Casi siempre he intentado portarme bien contigo y con los de mí alrededor, aunque muchos me hayan apuñalado, siento que merecen vivir de nuevo, por ejemplo, Peter. Quizás por hoy no seamos los grande amigos, solo hay que dejar que el tiempo lo diga. Lo felicito por acercarse y pedirme disculpas, ojalá sea de verdad el cambio. Y ojalá nuestras vidas, mi vida cambie.