Caminos Cruzados💕

CAPÍTULO 67: EL ESPEJO DE AMELIA

Amil.

Mis tiempos con mis amigos han aumentado ya voy dos semanas más sin Austin y la vida está continuando. Me la he pasado de casa en casa, visitando a Francesca o saliendo al cine con Amber, a veces corro con Flavia que es una ayuda para su enfermedad. Y la verdad me da tanto orgullo Flavia que continúa con su vida a pesar de que en cualquier momento pueda ser el adiós. Austin ha desaparecido literalmente, Hados prosigue en una búsqueda fallida del libro de la Otra Parte y aunque nadie le ha dicho del comportamiento de Austin, él tampoco parece atento a nosotros.

He tenido más tiempo en mí y mis shows que había estado dejando de lado. Volví a los escenarios con la compañía de mi gran mejor amigo que no dejaba de aplaudirme. Son esos momentos en lo que sé y aseguro que nunca habrá un amigo como él.

Sebastián.

Dos semanas maravillosas con la mujer que amo y los amigos más divertidos. Nos fuimos todos a una fiesta de pintura y agua que quedamos embarrados de colores en todo el cuerpo, Amil sigue estable pero no feliz. Y de Austincito no sabemos ni de sus narices. Flavia ha tenido caídas leves por su enfermedad, y siempre me he asustado por lo que le pueda pasar. No estoy preparado todavía para decirle adiós, nunca lo estaré.

...

Jacob con Matías nos reunieron a todo el grupo en la casa de Hados, todos conocíamos de pies a cabezas el lugar y aunque era enorme ya no nos perdíamos. Su sala estaba llena de sofás de cueros marrones claros, una mesa de cristal con adornos de animales encima y en su chimenea fotos de Hados joven. Su mirada en esas fotografías eran iguales a las de oreja sólo que más arrugadas y con marcas alrededor, al parecer a Hados le gustaba la ropa formal porque en todas siempre salía con una camisa o una corbata de por medio.

- Si te preguntas, sí tuve una vida maravillosa- dice Hados a Flavia que salta en su mismo lugar al ver al señor del tiempo a su costado- ¿Cómo sigues? ¿Sebastián no la ha cagado, verdad?

Me río por su comentario y él forma una sonrisa.

- Se está comportando excelente y yo estoy muy bien- le respondo demostrando que realmente sí me sentía de maravillas.

- ¿Sabes de Austin?- me pregunta arreglando sus cabellos- Nadie me habla de él y tampoco lo veo por acá.

Su pregunta me incomoda porque yo tampoco sabía de su paradero. Quisimos buscarlo en su departamento, pero hasta Jacob nos dijo que había desaparecido y no respondía las llamadas al celular, un día nada más le dijo que todo estaba bien y no se preocuparan por él.

- ¿Y bien?-insiste al ver mi silencio- ¿Te suena Austin?

- Pues, bueno... Austin...- digo a punto de contarle lo que ha pasado con él y sus extraños comportamientos con todos.

La voz de Dominique llega a la puerta principal dejando pasar a Austin que explota una sonrisa gustosa y de arrogancia a la vez. Camina lentamente mirando a sus costados saludando con la misma sonrisa con la que llegó y a otros con la mano. Amil le da la espalda y él ni se inmuta por saludarla, más bien opta por colocarse al lado de Hados que lo abraza al tenerlo al frente.

- Justo hablábamos de ti, Austin Navarro- dice Hados contento de tener a su creación.

- Lo mismo puedo decir yo, Hados, Señor del Tiempo.- le devuelve el abrazo con una sonrisa hipócrita, gira hacia a mí y sus ojos me devoran- ¿Y tú no me vas a saludar?

- Hola- respondo lo más cortante que puedo- ¿Dónde has estado?

- Por ahí- responde riéndose y Dominique acompaña su risa.