CASA IDEAL

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...la arquitectura perfecta

de tu mente, te lleva al mejor lugar,

aunque te encuentres en el

desde el principio...


Hoy como muchas otras veces me he despertado en la cama tapado hasta las narices por el tremendo frio que hay en habitación, me levanto con muchas ansias y maldigo la vejiga tan pequeña que me ha tocado, no tengo más opción que salir de entre las cálidas cobijas hasta el baño, en un auténtico intento fallido por mantener el calor, jalo uno de los sarapes y me envuelvo en él, estúpidamente olvido que los pies, transmiten el frio que se encuentra en el piso, apenas medio rosa mi dedo gordo la loseta del suelo, el escalofrió recorre todo mi ser y casi caigo en una constante de saltos hasta llegar al baño, bajo la tapadera y me siento agradeciendo haber comprado aquel asiento térmico.

El grito de mi madre desde el primer piso me hace apresurarme, si me ve despierto a esta hora, lo más probable es que pida que la acompañe a comprar los víveres, no hago ningún ruido en absoluto y voy de puntitas desde el baño hasta mi cama, antes de ello paso por la puerta del cuarto de mi hermano y toco con gran esmero para que se levante, escucho los pasos de mamá sobre los escalones viejos de madera, el rechinido de la puerta de junto y lo que esperaba: "hijo que bueno que ya te has levantado, por favor vístete rápido y acompáñame a traer la comida de la semana, espero abajo...", mi hermano cruza el pequeño pasillo y tras abrir la puerta de mi habitación me amenaza diciendo que se las pagare.

Así me quedo dormido entre las sabanas por un momento más, es extraño, siempre digo odiar esta casa antigua, pero casi nunca recuerdo, que, gracias a ella, soy quien soy.

Entonces mamá volvió súper emocionada de las compras y mi hermano menor tenía la cara llena de enojo, le pregunte qué era lo que pasaba, él me dijo que habían encontrado a mi abuelo materno y qué hablando con mamá, le había comentado algo sobre una casa que estaba a la venta, pero que no nos diría nada hasta que llegara mi padre de trabajar.

Fue hasta que llegó mi padre que mi madre nos mandó a traer a la mesa, todos sentados allí esperamos a escuchar la noticia:

- Pues verán, me encontré con mi papá y me dijo que una casa hermosísima, estaba a la venta por la colonia en donde vive, el único inconveniente es que la casa se encuentra a unas cuantas casas de la prisión, pero aun de este modo, la casa es súper segura.

- Tendríamos que ir a revisarla y mudarnos lo más pronto posible, todo dependerá de la visita, ya que con las posibilidades que nos da mi empleo, podríamos pagarla antes de lo pensado.

- ¿Pero tendríamos que dejar nuestra vida aquí? Me refiero a que, si tendría que cambiar de escuela y dejar de ver a mis amigos y compañeros, así como a los primos que viven aquí a la vuelta

- No hermanito, la colonia en donde viven los abuelos, no es tan lejana, solo son unas cuantas cuadras de aquí

- Efectivamente, no tendríamos que cambiar casi nada, lo único seria el lugar, de allí en fuera, todo quedaría igual.

- Solo espero que no esté muy lejos de la colonia de tus padres, ya que, para tu padre, cercano, es a siete u ocho cuadras, si no es que llegando al otro pueblo.

- Esperemos no sea así, mañana iremos a verla y pasado mañana nos acompañan para ver si también les gusta, lo principal es que nos convenza a todos.

FragmentosWhere stories live. Discover now