Dark Light

5 - Qué hacemos?

Ya en la habitación del hombre de pelo blanco, comimos y bebimos hasta saciarnos. Luego, comenzó la discución.

-Bueno -dije cuando terminamos nuestra comida pos-celda-. La pregunta del millón: qué hacemos? Yo voy a volver con mis padres. En lo posible, a mi vida normal -continué-. Pero eso del robo coordinado... en los últimos dos meses ha habido cinco robos coordinados. Un grupo de personas que roba cuatro bancos al mismo tiempo. Siempre los mismos. Si sabemos cuándo va a ser y quiénes son, quizás podemos detenerlos.

Atenea asintió con la cabeza.

-Yo también voy a volver con mis padres -dijo-. Pero esos no son nuestros únicos problemas. Quiero averigüar quiénes son los que nos capturaron.

-Pero que vamos a hacer con los mutos? -preguntó Elias-. Y con ellos? -señaló a todas las personas incoscientes sentadas en el suelo.

-Yo no voy a volver con mis padres -dijo Artemisa-. Ellos me obligaron a ponerme el suero, aún sabiendo lo que me podía suceder.

-Puedes vivir conmigo. Aunque no te haya parecido, el día de compañía que me diste me ayudó mucho -dijo Nicole, casi inaudible-. Tengo 20 años, soy mayor de edad. Mis padres se fueron del país y me ofrecieron ir con ellos. Como me negué, y son gente de mucho dinero, me dejaron lo suficiente como para que viva una vida, hasta con algún lujo de vez en cuando. Pero necesito quedarme en algún lugar hasta que consiga comprar una casa o departamento para vivir, así que tendrás que quedarte en algún lado hasta entonces. Y, por el momento, también tengo que hacer recuperación.

-Aún vas a clases? -le pregunté a Artemisa-. A dónde?

-Marleybone -respondió.

-Puedes quedarte conmigo -le ofrecí-. Mis padres no tendrán problema. Pero no puedo decir lo mismo de Nicole. No creo que de ninguna manera me dejen traer a dos personas.

-Puede venir conmigo -dijo Atenea-. La ayudaré también a buscar un lugar para quedarse.

-Volvamos a los otros problemas -dijo Brian-. Ya todos tenemos un lugar para volver. Supongo que llamaremos a la policía a que venga a arrestar a estos. Pero tenemos que ocultar a los mutos hasta saber cómo hacer que vuelvan a ser humanos. Y, como extra, alimentarlos.

-Yo puedo venir todas las semanas a alimentarlos -dijo Elias-. Después de todo, comen una vez por semana. Atenea, tú habías dicho que había como nosotros en USA. Les podríamos pedir ayuda?

-No sería fácil contactarlos, por no decir imposible -dijo ella-. Laboratorios Starwell, que creó el suero, tiene sede en Estados Unidos. Busquemos otra manera.

-Habrá que investigar sobre los laboratorios entonces -dije-. Quizás hayan desarrollado una cura y se la podremos pedir. O, en caso de que no accedan, robarla.

-Así me parece bien. Pasemos al robo de estas personas -Brian extendió su dedo índice y señaló al canoso-. Quiero saber por qué nos hicieron todo esto. Paremos el robo. Vayamos a la reunión y averigüemos.

-Cómo nos contactamos? Cuándo nos juntamos para empezar a vigilar los bancos?

-Hay que buscar lo que nos quitaron al traernos. Con suerte sigue estando acá.

Tardamos tres horas en encontrar un cajón con todas las cosas que nos habían sacado. Y, para nuestra fortuna, nuestros celulares estaban allí. Otro rato lo ocupamos en encontrar papel y pasarnos los números.

-Todo arreglado entonces -dijo Brian-. Les parece que nos juntemos pasado mañana a la mañana? A las 10 en el puente de Westminster?

-De lujo -concordamos todos.