21 - Harold era un científico

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-Por qué? Por qué mi vida es tan...? ni siquiera sé lo que es! -me quejé.

-Es una mierda -completó Anatoly-. Pero verás cómo todo termina bien.

-Eres muy optimista.

Mi amigo sólo sonrió y se dió la vuelta. El profesor de matemática entró al aula. Parecía más demacrado que antes y empezaba a perder peso.

-Hola! -saludó en un tono de lo más deprimente-. La profesora Withelock no pudo venir, así que seré yo quien les dará la clase de literatura -anunció más entusiasmado-. Tengo entendido que están viendo ciencia ficción.

Todo el colegio sabía que Jeff, el profesor, amaba la ciencia ficción (además de las matemáticas). Pero el curso no compartía su creciente entusiasmo.

-Vamos! -intentó ayudar el profesor-. Levanten esos ánimos, que Michelle y Frank aparecerán pronto!

Todo el colegio estaba informado que mi novia y Frank, un chico de último año, habían sido secuestrados.

-Traje un cuento para leer -nos dijo-. Se llama Deformación Lineal. Les va a gustar. Te gustaría repartir, Jonas?

El profesor le entregó a Jonas una pequeña pila de fotocopias, que él repartió a todos.

-Podrías comenzar, Athan? -me incitó el profesor-. Se que te resultará interesante.

Me acomodé en mi asiento. La fotocopia no era muy larga.

-Harold era un científico -empecé-. Era la viva imagen de los científicos locos de otras películas, libros y cuentos, porque era bajito, tenía el pelo alocado y una actitud divertida y emocionante. Había ganado varios premios (y era muy conocido) por el descubrimiento del patrosco y la invención del conocidísimo MD. 

《Y un día hizo su mayor hazaña, una que sobreviviría durante mucho tiempo (aunque había que verlo desde cierta perspectiva para que esto sea cierto): la máquina del tiempo, que llamó Juancho sólo porque se le ocurrió. Crear a Juancho le tomó la mitad de su vida, tiempo que pasó inmerso en su laboratorio, y que luego de muchos accidentes y logros, terminó en este increíble resultado.

《Una vez que terminó su obra, Harold no sabía para qué utilizarla. Él era de los que creía que el tiempo no podía ser cambiado. Entonces, en cuanto pensó eso, supo que podría volver sólo para observar.

《Se subió de un salto a la máquina -un plato de dos metros de diámetro- y retrocedió unos cuarenta años. Al llegar, lo primero que vió fue un diario que tenía de fecha 16 de febrero de 2018. Supo que su artefacto funcionaba.

《Se bajó de Juancho de un salto y la escondió en un callejón. El recirdaba que éste era un día importante en el que se había desvelado un gran secreto. Pero antes de llegar a donde eso sucedería le dió un fuerte dolor de cabeza que hizo que se arrodille en el piso y se la agarre con las dos manos. Cuando volvió a abrir los ojos, ya no estaba en la misma calle. Se encontraba en un lugar muy extraño, un lugar devastado y destruido.

《-Llegaste! -le gritó en la cara una persona igual a él.

《Harold estaba desconcertado. La persona era igual a él en todo.

《-Quién eres?

《-Soy tú! -gritó el otro-. Y yo! Es confuso. Sé que antes de viajar analizaste la posibilidad de que haya otras lineas de tiempo. Bienvenido a la mía!

《El científico volvió a mirar a su alrededor. Todas las casas que veía estaban destruídas, al igual que la calle en la que estaban los dos, el científico arrodillado y el impostor parado.

Dark LightWhere stories live. Discover now