6 - Soy todo tuyo

181 14 3
                                    

Nota del Autor: Este capítulo contiene spoilers de Mi Vida con Superpoderes (de Victoriagalaxy). Leer bajo su propio riesgo.


Al día siguiente, decidí que me tomaría un día libre de ciencia ficción. Al levantarme -casi al mediodía-, recibí un mensaje de Anatoly en el grupo que teníamos con mis amigos y algunas amigas -mi hermana incluída, por estar en mi mismo año-.

están todos inviyados a mi pileta! -decía, mal escrito al estilo de Anatoly, que se excusaba diciendo que el ruso era muy distinto, pero era que escribía en el celular apurado y sin cuidado-. Festehamos el excape de Athan de la estrella de la muerte! Toda la famila invitada!

Les propuse el plan a Lisbeth y a Artemisa, que aceptaron encantadas -aunque mi hermana se quejó de que no podría ir a entrenar-. Preparamos los bolsos y salimos a caminar.

-Dormiste bien? -pregunté a Artemisa, que había dormido en un colchón en el piso.

-Muy bien -respondió-. Más cómoda y segura que lo que recuerdo de todas las otras veces que dormí en mi vida. Tú y tu familia son muy amables de dejarme vivir con ustedes. Gracias.

-No hay de qué -le dijo mi hermana.

Continuamos hablando de cosas banales hasta que llegamos a la casa de mi amigo, una casa grande y espaciosa y con una pileta gigante y un jardín aún más grande. Tocamos el timbre.

-Hola -saludó Anatoly luego de abrir la puerta-. Siempre llegas temprano.

-Llegamos puntual -reproché.

-Exacto -dijo él-. Temprano.

Traspasamos la puerta y entramos al recibidor.

-Hola! -nos saludó la madre de Anatoly cuando entramos a la cocina.

Parecía estar cocinando guiso como para cien personas. Me parecía raro el guiso con este calor, pero recordé que venían de un lugar frío.

-No han almorzado aún? -me preguntó la madre de mi amigo.

Negué con la cabeza.

-Coman con nosotros -ofreció -. Pueden dejar los bolsos en el sillón.

Hicimos lo que dijo y nos sentamos a comer el guiso. Ayudamos luego a levantar la mesa e incluso me ofrecí a lavar los platos. Pero comenzaron a llegar nuestros otros amigos. Luego de presentarles a Artemisa, que algunos reconocieron como una chica del otro curso -por lo que me enteré que iba a mi colegio-, fuimos a la pileta y pasamos toda la tarde allí metidos. Fue un día increíble para olvidar parcialmente el secuestro. Pasó tan rápido como un muto flaco.

Pero a la noche sucedió algo digno de mención. Volvimos temprano, porque la familia de mi amigo tenía que hacer no se qué cosa. Mi hermana se acostó a dormir temprano, pero Artemisa y yo decidimos mirar algunas series y películas.

Encendí la tele, para ver que había por allí. La última vez que la habían usado había estado puesto el noticiero. Estaban pasando una noticia que parecía interesante. A veces, además, veía ese noticiero porque el periodista era muy divertido.

-Ayer -dijo el periodista, que vestía un traje rojo-, el presidente de Feuer, Jason Hamilton, canceló las entrevistas en cuanto le hicieron preguntas sobre el incidente en la ciudad. Según un helicóptero de la prensa, cinco chicos con increíbles habilidades luchaban en la azotea -explicó-. Dos de esos chicos están ahora muertos y otros dos en coma en el hospital. El único chico consciente, un niño de 12 años, aún no ha podido ser entrevistado. Richard Winston, el dueño de Laboratorios Starwell, está junto con otros cómplices de investigación ilegal en la cárcel. Los habitantes de la ciudad dicen que estos chicos son héroes, pero en mi opinión, estos Power Rangers deberían desaparecer rápido porque, como se ha visto en películas, series y comics, estas cosas no suelen terminar bien. -el periodista se acomodó la corbata y pasaron a otra noticia.

Dark LightWhere stories live. Discover now