Sekiryuutei Supremo

Llegada a Kyoto

En estos instantes, todos los de segundo año estaban listos para subir al tren que los llevará a Kyoto. La noche anterior al viaje había sido más que de emoción para los que irán, muchos no conciliaron el sueño. Ise bostezo un poco dado que ayer Rias y Twilight discutían en medio de la noche, una diciendo que desea pasar la noche abrazada a él porque no lo verá unos días y la otra que no se pase de lista, que la idea es compartir. Todos los estudiantes estaban a un lado esperando la llegada del dichoso tren.

Rias era la única de tercer año presente, iba a despedir a todos y entregarles a sus siervos unos talismanes especiales. Estos servían para que no sean atacados en los templos y puedan verlos sin problema alguno, ella los usó el año pasado.

-Gracias Buchou.- Aki tomó el papel y lo guardo en su bolsillo.- Temía no poder ver los templos.

-Fufu, tranquila Aki. Kaori, por favor vigílala y que no haga ninguna tontería, muchos menos una broma.

-De eso me encargo yo Buchou, una buena jalada de orejas nunca falla.- la castaña se cubrió las orejas al oír eso.- Guerra avisada no mata gente.- la chica se cruzó de brazos molesta mientras el resto reía.

-Ahm... Pinkie... ¿Por qué la gran maleta?- Rias miraba a la chica quien llevaba una gran maleta a parte de la otra que tenía su ropa.

-Esto... Yo...- la chica se mostraba nerviosa por una razón.- ¡Aquí está mi peluche para dormir! ¡No puedo dormir sin él!- Todos sabían que ella tenía un peluche en forma de lagarto con el cual dormía, así que le creyeron.- Fiu, a salvo...- la maleta se movió un poco... ¿Qué está...?

-No importa... todos ustedes tienen suerte de que con los tratados que se hacen no vayan a tener problemas con los youkais y los onmyoji.- Rias dio un guiño.- Además, pueden hacer todo el turismo que quieran.

-¡Genial!- todos dieron un grito de alegría al oír eso ante la risa de Ise y Kiba.

-Oh, lo olvidaba.- Rias sacó un papel y se lo entregó a Asia.- Esto es para que ustedes dos usen la promoción. Uno nunca sabe.

-Entendido.- ambas Pawn asintieron a esas palabras mientras Pinkie abrazaba su gran maleta con fuerza... por alguna razón.

-No se preocupe Onee-sama, todos estaremos bien.- Asia guardo el objeto y su celular sonó de repente.- Alo Kyriu-san... Sí, todos están conmigo.

-Qué bien, espero que Rias-senpai les haya dado lo necesario porque ya vamos a abordar.- Asia agradeció a la chica la advertencia.

-Bueno, suerte todos y pásenla bien.- Rias miró a Ray.- Tú vigila que las problemáticas no tengan inconvenientes, ayuda a Twilight ¿Si?

-Despreocúpate Rias.- la caído se despidió con la mano.- ¡Vamos todos... Pinkie, deja de abrazar así a tu maleta!

Todos empezaron a caminar hacia el tren y abordarlo. Rias le susurró algo a Twilight y esta asintió un poco de mala gana y tras un abrazo rápido subió al tren dejando a Ise con la chica.

-Bueno, hora de partir.

-Hey, arregla el cuello de tu camisa.- Rias arregló la prenda del muchacho.- Cielos, vas a Kyoto como representante de la escuela, debes verte bien.- Terminó su labor y sonrió.- ¿Qué harías sin mí?

-Creo que eso es algo que no deseo descubrir.- la chica sonrió a esas palabras para luego suspirar.- ¿Pasa algo?

-Hace unos meses, lo hubiera soportado... no verte y lo hice cuando te fuiste con Rean-san a esa isla pero ahora, tras todo lo que hemos pasado y vivido, la idea de estar lejos de ti me es... difícil. Daría lo que sea por poder ir contigo, envidio a Twilight.- la chica hizo un lindo puchero.- No sabes lo importante que eres...