Nadie se muere por amor...

572 104 54
                                    

... o eso dicen. Pero en el poco tiempo que Jason y yo habíamos estado evitando vernos —o mejor dicho, yo evitándolo a él— el sufrimiento que vivía cada día desde que la gente se había puesto en mi contra se intensificó por el simple hecho de no tenerlo cerca. En dos horas Jason me había devuelto los ánimos que un montón de personas me quitaron en siete días. Pudimos conversar un montón, le hablé un poco sobre lo que estaba sucediendo y me dio fuerzas como a nadie. Volvimos a reforzar todo el amor que nos teníamos y entendí porqué había decidido atravesar esa tempestuosa situación. Sería difícil sí, pero el daño ya estaba hecho y debía continuar luchando por lo que quería.

Al siguiente día tenía la primer clase de educación física. Unían los grupos de mujeres y varones por separado en dos cursos. Lamentablemente ese año las chicas de mi salón compartían grupo con quinto sexta. Sí, el curso de Eveline.

Entré primera al vestuario para no tener que toparme con el resto al llegar. Me vestí rápido y dejé bien guardada mi ropa por temor a que me la escondieran, lo cual solía ser una practica habitual de los matones a los más vulnerables. Además, ya me había sucedido algo similar: en clase de química me habían escondido la carpeta mientras yo me encontraba en el recreo, pasé toda la clase entera buscándola mientras la profesora me acusaba de haberlo inventado porque no había realizado la tarea.

Las demás chicas comenzaron a entrar y yo me adelanté al patio donde nos estaba esperando la profesora Sandy. Ese día al ser la primer clase tuvo la gran idea de hacernos jugar quemados. Creí que estaba frita. Cuando comenzaron a armar los equipos, fui la última en ser elegida. Esperaba lo peor, que todas quisieran asesinarme a pelotazos o algo por el estilo. Sí, me comí unos cuantos pelotazos de más cuando la profesora no veía y salí fuera, lo que dentro de todo fue bastante bueno porque sentada en las gradas no corría peligro.

Pero por otro lado, me sentía bastante patética. Si bien en los corredores me molestaban demasiado, estar allí sola apartada del grupo repleto de mujeres, quienes suelen ser más duras a la hora de tomárselas con otra chica, era extremadamente difícil para mí y mi autoestima. Eveline estaba rodeada de todas ellas, bromeando con sus amigas y riendo fuerte. Descubrí también que su grupo se había agrandado radicalmente, algo que pocas veces ocurría y yo bien sabía que no tenía para nada que ver con el hecho de ser sociables con el resto de las compañeras. Como ya bien sabemos, Michelle y sus amigos eran un grupo muy selecto que no aceptaba a nadie. Al mismo tiempo para el resto ellos eran considerados un grupo de niños adinerados y soberbios. Era algo que ya todos tenían asumido. 

Pero ahora la escenografía era distinta. Todas las chicas parecían ser amigas entre sí. Todas se encontraban rodeando al grupo de Michelle y Eveline, tratándose como si fueran grandes amigas, unidas por un mismo objetivo: odiarme. De pronto hasta la más rarita se sentaba junto a Carmen, la chica dark de la que se habían burlando incontables veces cotillaba en murmullos con Luciana mientras me lanzaban miradas indiscretas, Caro se colgaba del brazo de Melanie como si fueran íntimas amigas. Y seamos sinceros, ninguna me odiaba realmente porque estuvieran despechadas con lo que le había hecho a Eveline, sino porque necesitaban su reconocimiento, necesitaban una razón para ser aceptadas por aquellas que en algún momento las habían puesto en la situación que yo ahora me encontraba. Habían logrado cambiar la rueda y lo estaban disfrutando, sin recordar que se estaban comportando como sus mismas opresoras.

Los insultos no era lo que me dolían. Aguantar un par de comentarios malintencionados de gente que no me conocía realmente no era tan duro. Pero estar sola sin hablar con nadie y ser rechazada por personas que en algún momento creí amigas, eso sí me entristecía.

Era tan obvia la situación, que cuando la clase llegó a su fin, la profesora se acercó preocupada.

—¿Qué ocurre que estás tan apartada del grupo? Tu no eres así.

El chico equivocado© [COMPLETA]Where stories live. Discover now