Capítulo 53

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Tenía muchas casas y mayormente, los únicos que estaban interesados eran narcotraficantes, al momento de comprarlas creamos una alianza en dónde ellos no se meten conmigo y yo no me meto con ellos, de alguna manera esto me beneficia.
La puerta se abrió de golpe dejándome ver a Rose, no me gustaba que entraran así a mi despacho.
Mario: te he dicho que no entres sin antes tocar ¿es tan difícil de entender?- ella negó rápidamente.
Rose: lo siento por entrar así pero es que algo ocurrió con la señorita Tn.- se ahogaba cuándo hablaba y sus manos jugaban entre sí, me levante y me coloque frente a ella.
Mario: apresurate y habla ¿en dónde está?
Rose: yo entre a la habitación para cambiar las toallas del baño y la vi quejándose mientras trataba de mantenerse en pie, cuándo me acerque más, su ropa estaba manchada de sangre e inmediatamente la llevé con Mike.- terminando de decir corrí escaleras arriba hasta en dónde se encontraba el consultorio, entre de golpe y vi a Mike cubriéndola con una manta blanca, ella tenía agujas en sus brazos y un pequeño respirador, tenía sus ojos cerrados y bajo de ellos se habían formado ojeras.
Mario: ¿que fue lo que le paso?- él me miro después de haber inyectado algo en el suero y se giró a verme.
Mike: tuvo una amenaza de aborto y tuvo sangrado abundante, quizás despierte en un momento o en unas horas.- la mire por unos segundos y después unos guantes con sangre que se encontraban en el bote de basura.
Mario: ¿cuales fueron las causas?- él me miro y prosiguió.
Mike: pudo haber sido una caída, un golpe fuerte en el vientre o de igual manera, mucha presión en la zona.- sentí una punzada en mi pecho al escuchar todas las causas.- por suerte solo fue una amenaza y pude sacarla de ahí, ambos se encuentran bien ahora, ella necesitará mucha proteína y buena alimentación para poder recuperarse, también tendrá que estar en reposo por al menos 1 semana.
Mario: bien, puedes irte.- él asintió y salio del consultorio, tomé una de las sillas y me senté a un lado de ella tomando su mano, me volví vulnerable en cuestión de segundos, una lágrima traicionera resbalo por mi mejilla, me dolía verla así por algo que yo mismo cause

Me PertenecesWhere stories live. Discover now