Capítulo 190

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Abrí lentamente mis ojos mientras sentía una fuerte pesadez en ellos, levanté poco a poco mis manos ya que sentía dolor en ellas, tenía un parche en mi muñeca y una venda cubría mi antebrazo. Intenté sentarme sobre la cama pero me fue imposible, ahogue un grito de dolor cuándo sentí cómo sí mi piel se rompiera, tomé un poco de aire y divisé bien en dónde me encontraba. Era una habitación de color marrón, había un pequeño sofá al rincón de este y la cama en la que me encontraba era matrimonial, había una pequeña mesa de noche frente al sofá en dónde se encontraba un florero completamente vacío, había un olor a medicamentos totalmente desagradable. La puerta se abrió torpemente dejándome ver a la persona que tanto anhelaba, sentí un jodido nudo en la garganta y solté el llanto enseguida causando aún más dolor en las zonas afectadas, intente levantarme nuevamente pero me era imposible y solo podía gritar, él se acercó rápidamente a mí y me hundió en sus brazos con cuidado.
Mario: me has pegado un susto tremendo ¿sabes? Me juraste que te quedarías en el mismo lugar en dónde te dejé, fui a buscarte pero me encuentro con que estaba apunto de perderte ¿sabes lo jodido que me sentí?- su voz estaba rota tanto cómo yo, aquella se cortaba conforme hablaba.- el médico me dijo que no había muchas esperanzas ya que estabas gravemente herida, joder, me sentí tan maldito.- tomó mi rostro entre sus manos, su rostro estaba húmedo y las lágrimas parecían no querer dejar de caer.
Tn: agradecí por un momento que tú no llegarás, prefería dar mi vida a cambio de la tuya solo sí me prometían no lastimarte.- su mirada bajo al suelo igual que su rostro, sus manos arrugaron las mantas blancas de la cama.
Mario: No quiero que me salves sí eso significa perderte.- sus ojos se encontraron con los míos nuevamente, la espalda me estaba doliendo debido a la posición en la que estaba, solté un suspiro y caí cobre mi propio brazo así logrando recargarme.- te ayudaré a recostar.- enseguida me tomó de la cintura con sumo cuidado, aunque, así me tratará con suavidad los golpes dolían. Aun tenía una cosa por saber y era una de las más importantes, Mike.

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