Capítulo 131

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Me quedé quieta pero no sentía temor alguno, estaba molesta por la forma que tenía para referirse a esta clase de temas, cree que porqué no soy una asesina no entenderé algo de lo que dice.
Mario: no tienes porqué hablarme de esa manera ¿escuchaste? En caso de que esté pensado que eres una ingenua...- no dejé que terminará de hablar ya que lo ataque de la misma manera.
Tn: oh ¿entonces sí estás pensando que soy una tonta para poder entenderlo?- reí incrédula y eso pareció molestarle aún más.- lamento no ser una maldita loca que le gusta andar matando gente nada más por el gusto de la venganza, lamento no tener el alma tan podrida cómo las personas que conoces.
Mario: es por eso que no hablo contigo este tipo de cosas, debí de haber hablado con Loren ya que ella sí logra entender esta clase de asuntos.- ¿me estaba comparando con esa mujer? Oh por dios, en verdad lo hizo. Le di un empujón logrando que se separará de mí.
Tn: pues lamento no ser como ella, es más ¿por qué no agarras el primer puto vuelo y vas a dónde ella para casarte por fin? Quizás así podrías dejarme tranquila de una vez por todas.- mis palabras parecieron dolerle, su rostro cambió drásticamente a uno totalmente arrepentido, se acercó nuevamente a mí pero ahora de una forma más calmada.
Mario: lo siento, no sé lo que estoy diciendo.- tomó mi rostro pero enseguida lo evadí, no quería que pensará que podía lastimarme cuándo quisiera porqué al final de cuentas cedería.
Tn: iré a dormir un rato, estoy cansada.- cuándo intente caminar sentí su mano agarrar mi brazo fuertemente para después tomar mi cara e intentar darme un beso, sus labios rozaron por mis mejillas ya que no se lo permití.- ¿qué te pasa? No vuelvas a hacer eso, ni me toques siquiera.- sus ojos reflejaban el arrepentimiento que seguramente estaba teniendo pero no me doblegue, subí rápidamente las escaleras y me encerré en la habitación. Me había dolido todo lo que me había dicho, él me gustaba y que me haya dicho todo eso fue cómo una apuñalada en el pecho, me hizo recordar todo lo que sufrí cuándo recién llegue a su lado.

Me PertenecesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora