Capítulo 118

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¿En serio esto parecía un berrinche? Ni siquiera estaba cerca de ser uno. Lo miré por unos segundos y después solo asentí, no me sentía segura ahora de que todo lo que él me juraba era verdad.
Tn: está bien sí tú lo dices pero yo no voy a creerte, ahora me doy cuenta el porqué tus ojos brillaron cuándo la vieron ¿aún la quieres?- él se quedó en silencio para después tomar mi cara entre sus manos.
Mario: la aprecio porqué la conozco desde años pero de eso a sentir lo mismo que siento por ti...jamás, ¿cómo quieres que te explique que cada vez que te veo siento que mis piernas flaquean? ¿Cómo quieres que te deje claro que la única persona que me hace poner estúpido eres tú?- sus labios se pegaron bruscamente a los míos y de un movimiento ágil quedé atrapada entre su cuerpo y la puerta.- ¿no te das cuenta que me estoy volviendo loco por no tenerte? Mirame, ni siquiera soy capaz de controlarme cuándo estoy cerca de ti, ya no me siento capaz de poder sobrevivir sí tú no estás en mi vida.- creo que ha sido lo más cursi que he escuchado venir de él desde que lo conozco y fue lindo.
Tn: bien, lo siento por hacerte sentir así.- susurré sobre sus labios, su respiración estaba agitada mientras que sus ojos miraban mis labios, intente separarlo de mí sin embargo sus brazos se aferraron a mi cintura para volver a besarme pero ahora de una forma más lujuriosa, su mano toco la piel de mi espalda haciéndome sentir un escalofrío y ponerme en alerta.- ¿qué te parece sí salimos a algún lugar por primera vez juntos?- dije cuándo al fin logre separarme de él.
Mario: no me pidas tantas cosas, recuerda que te llevaré conmigo a México.- se alejó de mí cómo sí lo que hubiera dicho fuera malo, me coloque detrás de él y acaricie su hombro.
Tn: lo sé pero ¿qué tal sí salimos a comer fuera? Digo, siempre estás en casa así que, quizás te haga bien algo de distracción ¿no crees?- él se volteó lentamente hacía mí para después darme un leve empujón haciendo que cayera en la cama y él se posicionó sobre mí.- ¿qué haces?
Mario: dijiste que me hacia falta algo de distracción así que es lo que hago, nena.- hice gestos ante su tono seductivo y él solo río.

Me PertenecesOù les histoires vivent. Découvrez maintenant