RED: El Ángel De La Muerte.

El don de Nara.

Pov. Laura

Estaba intentando curar a Brian, llevaba heridas tal vez un poco superficiales, pero si perdió algo de sangre, a sabiendas de como actuaba lo amarramos con cuerdas, esperamos a que fuera suficiente para que no hiciera tanto, apenas desinfecte sus heridas con el agua oxigenada este comenzó a reaccionar y a llorar del dolor que sentía, se movía como una bestia salvaje, le habíamos amordazado previamente para que no mordiera a nadie intentábamos mantenerlo inmóvil o si no las heridas le dolerían, lloraba mientras continuábamos curando sus heridas.

–Ya tranquilo... No te muevas o dolera peor... –dije algo preocupada, Brian no obedecía y seguía moviéndose, era muy terco, curé sus heridas y por fin lo soltamos... Tomé una correa y un collar, se la puse para evitar que se fuera o saliera de casa, estaba tan mal últimamente que parecía un tigre o algún animal salvaje.

–Perdonanos Brian, pero no puedes salir de casa... Debes controlar tu lado oni... –dije al ver que este se molestaba y amenazaba con mordernos... Lo tomé del cuello y lo obligue a acostarse, trataba de librarse de mi agarre tomó mis manos y enterró sus largas uñas, me dolía pero debía detenerlo, no podía seguir así matando a la gente que pisará el bosque alrededor de la mansión, le apreté el cuello y por fin me soltó, lo deje ahí mientras iba con el resto que veían un poco espantados mis brazos, estos tenían cortadas y sangraban un poco.

–Ven Laura vamos a limpiar tus manos... –dijo Ukyo con un poco de miedo me volteé a ver a Brian este estaba acostado y sollozaba, lo dejamos ahí encerrado mientras nos íbamos al baño en mi habitación, Ukyo me limpió la sangre mientras Persa buscaba agua oxigenada en el botiquín y algunas vendas, Ibiki tomó un algodón y le puso el agua oxigenada ardía un poco, al terminar Persa colocaba las vendas en mis manos.

–Vaya Brian a enloquecido... –dijo Ukyo viendo mis heridas.

–Es su lado oni, Yamato nos advirtió que le pasaría esto... –lo justifique.

–Perdón pero ¿quien es Yamato? –preguntó Persa era obvio ni Ibiki ni Persa lo conocieron.

–Era el padre del padre adoptivo de Brian, él lo cuido cuando el padre adoptivo de Brian murió, no hace mucho que murió tratando de defender la mansión, era un anciano respetable y sabía como controlar a Brian a la perfección, de echo podía manipular a Brian fácilmente cuando se ponía así... –dije, Persa suspiro y dijo.

–Me sorprende que un humano pudiera controlar a un oni –dijo Ibiki –esas criaturas son inestables por naturaleza, y Brian no es la excepción esta mucho peor que los onis puros...

–Si eso es lo malo, debido a que su lado humano no lo acepta, sus instintos intentan despertar aún... Brian no puede controlarlo –dijo Persa, me quedé pensando en el, ella se fue a su habitación mientras yo me iba a hacer la cena, ahora se lo que sentía Haruki, si no era yo estos morirían de hambre, entre a la cocina y vi a Kiuby y a Nara preparando algo.

–Vaya... Veo que tienen todo listo... –Sonreí, mientras Nara se volteaba y traía una charola con un filete de carne y un plato de frutas picadas con crema y malvaviscos.

–Se me olvido el chocolate... –dijo poniendo jarabe de chocolate.

–Ya esta esto es para Brian... –dijo sonriendo, a veces su inocencia era muy cautivadora, no sabía como explicarle que Brian estaba pasando por su humor salvaje, pero no podía... Lo llevé a la habitación de Brian, abrí la puerta y lo vi ahí acostado, con las heridas de su cuerpo vendadas, respiraba pesadamente... Nara se acercó deja la charola en el buró a un lado de la cama, le acarició la cabeza en los lados de sus cuernos que por cierto estaban vendados, Brian comenzó a... ¿Ronronear? ¿Los onis ronronean?...

–Ya es hora de comer... –dijo Nara levantando a Brian, cortó un poco de carne y se lo dio con un tenedor en la boca, siguió así hasta que término y después le dio el postre de frutas, Brian sin protestar y después se echó de nuevo en la cama, Nara lo arropó y le dio un besito en la frente herida...

–Duerme bien... Todo saldrá bien... –dijo tocándole la cabeza, Brian se durmió, y se acercó a mi mientras me daba la charola.

–Mira ya se durmió...

–Tienes un gran don... Me alegra que hayas controlado a Brian –dije mientras cerraba la puerta con llave.

Nara se fue a dormir tranquilamente después de la cena, este niño era todo un prodigio a veces me sorprendía su capacidad para todo, mantenía todo bajo control mejor que Ukyo y eso que Ukyo esta por cumplir 24 y Nara acaba de cumplir 7, después de eso decidí no preocuparme tanto.

Sin embargo a la mañana siguiente,  escuche gritos y mucho ruido, me subí a la habitación de Brian, afirmativo él era el que gritaba y hacia un escándalo, entre para verlo y lo encontré llorando y pataleando, gritaba de forma estridente, me harté, lo amarre de pies y manos, cuando en eso me mordió.

–Salvaje... –le dije dándole una cachetada, tal yo sea bastante desesperada cuando Brian se portaba así de desobediente, pero era obvio que no le seguiría tolerando sus infamias.

En eso el resto por fin entró.

–Escuchamos un tremendo escándalo... ¿Brian esta bien? –pregunto Ukyo.

–Pareciera que tiene rabia... –dije terminando de atarlo a la cama –pareciera poseído... Está portándose de forma grotesca...

–Espera... Brian no responde bien a los golpes... Ahora su mente debe estar intentado controlarse... –dijo Nara mientras acariciaba su cabeza, no se como lo hacía funcionaba, después de su locura... Se quedó dormido...

–Ahora pronto se calmará y volverá a ser el Brian normal...

–Nara ¿como sabes todo eso? –preguntamos todos curiosos.

–El abuelo Yamato me enseñó a cuidar de Brian, él puede descontrolarse cuando se siente estresado y con temor... –dijo mientras iba a la cocina, después le entregó la comida a Brian y lo alimento.

También se ocupaba de relajar a Brian mientras nosotros cambiábamos los vendajes de sus heridas... Era como tratar con un animal salvaje y su cuidador...

A pesar de todo esto, Nara no nos contó como cuidar de Brian, aunque creó que necesitaríamos incluso un doctorado en cuidado de onis, sin embargo yo hasta el momento tenía el control, y decidi que Brian no debía salir de su habitación sin embargo era como medio día cuando vi a Kiuby regresar con Brian que iba literalmente amarrado como un perro, Nara venía y vio toda la escena.

–Les dije que no lo sacarán, aún esta herido... –Nara se acercó a su hermano y se puso en frente de él.

–No le hagas nada... Yo le dije que podía salir, además si no salía iba a deprimirse peor –dijo Nara mientras tomaba la correa y lo llevaba a su habitación Brian parecía muy pensativo estaba perdido en sus pensamientos, la mirada al frente y cabizbajo, era algo preocupante, no quería preocuparme tanto mientras Persa subía con Brian mientras llevaba una bolsa.

–Espera ¿que traes ahí? –pregunte curiosa.

–Bueno se que este asunto tardará tiempo y esto tal vez controle a Brian –dijo Persa sacando un muñeco idéntico a Haruki del bolso.

–Lo hice con un suéter viejo de Haruki, esperó que esto calme a Brian –Persa se fue corriendo a su cuarto, la seguí esperando la reacción de Brian con ese obsequio, al entrar este seguía bastante mal, cuando por fin Persa dijo.

–Brian te trajimos un obsequio... –sonrio entregándole la bolsa, Brian la tomó en mala gana, no pareciera ponerse feliz con nada, hasta que vio el muñeco y una sonrisa se dibujo en su rostro.

–Gracias Persa... –dijo mientras una lágrima de felicidad salía por sus ojos, abrazo al muñeco mientras se acostaba.

–Así no te sentirás tan sólo... Esperó que te sientas mejor –dije contenta al verlo por fin feliz después de mucho tiempo deprimido.