Pétalos dulces

18 1 1
                                    

Pov. Brian

Estaba abrazando a ese muñeco, sin explicación alguna me sentía tan mal, quería estar todo el día en cama... Sin moverme, en eso sentí una presencia conocida, intenté salir de la cama, pero no podía estaba atado con una correa en mi cuello, la correa estaba atada encadenada a la cama, y me impedía ir muy lejos o salir de mi habitación.

No soy ningún animal, pero era razonable que ellos hicieran esto, estos últimos meses fui un demonio, ataque a mis propios amigos y mordí a Laura, varías veces, estuve amarrado un largo tiempo a esta cama, solía abrazar al muñeco para controlarme, en eso alguien tocó a la puerta.

No me moví ni dije palabra alguna, cuando en eso la puerta se abrió,  levanté mi cabeza, para encontrarme de nuevo con su mirada, Haruki me veía, su cabello era aún más largo, era normal después de dos años de no haberlo visto, los demás estaba detrás de él esperando una acción mía, no podía hablar ni decir nada.

–Eres esa persona... –dijo mientras se acercaba, obvio parecía no recordar mucho de mí, no podía hablar estaba paralizado, tomó mi cabello y me miró a los ojos fijamente.

–¿Cual es tu nombre?

–B- Brian... –dije en un hilito de voz, no podía hablar mucho, la garganta me dolía mucho.

–Brian... –me abrazó yo también lo abracé y sentí de nuevo su característico aroma, el abrazo de nuevo era algo tan cálido, por fin sentí paz de nuevo... Y mi rencor acabó.


(...)

Pov. Hajime

Lloraba todos los días bajo ese árbol de Magnolias, después de algunos años tras lo que hice...

–Yui... Me arrepiento... Lo lamento... –lloré, mientras ponía un poco de incienso, volé hasta cercanías de la mansión y fui a la tumba de sakura, puse algunas flores en su tumba y un poco de incienso.

–Perdoname Sakura... Me siento tan sólo sin ti, y sin Yuirichi... –me fui caminando hasta la mansión de nueva cuenta, mientras Akira no descubriera que soy un tengu en realidad, Richard por suerte no le había contado mi realidad, pero pareciera que Akira ya lo supiese.

Aún así no le dije nada, era muy tarde además cuando en eso vi a Akira hablar con un extraño demonio, este era albino, sus ojos eran blancos también o muy claros, era algo similar a Akira... Pero sus cuernos eran horrendos.

–Entonces ¿me entregaras el alma de tu sobrino? –preguntó el demonio, me asuste sabía que hablaban de mí.

–No, hace tiempo que te di el alma del policía, sin embargo no te he visto desde ahí ¿cumpliste con lo cometido?

–Dudo que haya sobrevivido a esas heridas tan graves, además no ha habido muertos en esa región que llegó a considerarse prohibida desde hace dos años.

–Tienes razón me sorprende... Pero no te puedo entregar el alma de Hajime...

–¿Que?... ¿Porque no?... No es de ninguna utilidad para ti, sólo una boca más que alimentar, un estorbo...

–Yo se predecir el pasado, se lo que ocurre en el presente y el futuro... Supuse hace algunos años que Hajime conseguiría un gran poder, supongo que ahora lo tiene, en cambio tu... Sólo debes cambiar de objetivo no puedo darte a Hajime tan fácil...

–Ya veo... Entonces, que cuerpo me darás...

–Conozco un cuerpo perfecto, pero te tomará un poco de tiempo ir por él... Estoy hablando de Aoyama... Un antiguo experimento que hice, sólo era curiosidad o no lo recuerdas... –Akira sonrió, el demonio también sonrió.

–Crees que funcioné...

–Sera lo más indicado... –dijo mientras lo besaba, eran de la misma estatura casi hermanos gemelos, además de que eran muy parecidos... Y pensaban igual, aunque lo que más me preocupó fue que Akira permanecía con Richard y terminaba traicionándolo con un demonio, estaban besándose apasionadamente.

–Un momento... –dijo el demonio, mientras se separaba.

–Tu amante no dirá nada...

–No claro que no... Además puede que él sea tu próximo contenedor si Aoyama no funciona, y si no te sirven esos dos... Te entregaré a Hajime... Es lo último que puedo ofrecerte... –me quedé paralizado, necesitaba ayuda... En eso tiré un jarron los dos me escucharon, corrí tratando de huir cuando sentí como me tomaban del brazo con fuerza.

–No... Por favor no... –dije asustado, Akira y el demonio me acorralaron.

–Hajime... Eres un niño desobediente... Hijikimaru cometelo... –ordeno, el demonio acercó sus fauces cerca de mi dispuesto a darme una mordida.

–No... Por favor no, no quería espiarlos, por favor no me comas... –estaba asustado, Akira comenzó a reír, y dijo.

–Que infantil eres Hajime, ¿te asustaste porque le dije que te comiera? –parecía que le hablaba a un niño, me tomó de las mejillas y comenzó a jugar con mi cara.

–Sueltame...

–Escucha... Hijikimaru, en realidad sabe que tienes poderes... Muestramelos. –me obligo, saque mis alas y mis ojos cambiaron su color, me transforme en tengu esperando en eso una bofetada de Akira.

–Vaya... Si me serás de mucha utilidad... Se que quieres vengarte de Brian, y de la mafia Roja por el ridículo que te hicieron pasar, escucha... Ayudame y Hijikimaru no te hará daño, no te comerá... –el demonio sonreía, incrédulo.

–Lo haré... Pero que hará ese monstruo... –dije señalando a Hijikimaru.

–Él es mi nuevo asesino, y tu sólo serás mi espía ve a la mansión roja, y dime que esta pasando y avisame si te enteras de que Rojo esta muerto –sonrio, asentí y me fui.

No quise volver a ver su rostro y en vez de ir a la mansión mencionada, me fui al templo de Chiori a recibir un consejo necesitaba saber que hacer con ese miedo hacía Hijikimaru.

(...)

Pov. Brian

Todo casi había vuelto a la normalidad, Haruki estaba intentando recordar a algunos de nosotros, sin embargo curiosamente Haruki recordó que me había rescatado de Akira, esperó que no recuerde lo de la cámara.

A pesar de tenerlo aquí, sentía un nudo en el pecho, una preocupación algo grande... No sabía porque era, pero sentí la misma inquietud que cuando sentí la presencia del tengu de Hajime o cuando Akira hizo presencia después de muchos años.

Espero que no estén tramando nada al respecto.

RED: El Ángel De La Muerte.Where stories live. Discover now