capítulo 10

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Luego de pasar un tema, los resultados ya estaban listos y el DJ con su micrófono, se apresuró a hablar.

—¡ahora si, están los resultados! —la gente gritaba emocionada —. ¡los ganadores son... El número 8 , el número 11 y el número 18!

Todos gritaron. 

—¡sí Harry, eres el mejor! —gritó saltando Farrah y luego lo abrazó al igual que Marcus. 

Harry se emocionó aún más y le sonrió de lejos a Lavell, el cual no podía creer que había ganado también.

Comenzó a sonar la canción de the Trump "disco inferno", el DJ dió la orden de que si querían canjear el premio, se dirigieran a la barra 2 con su número. Solo bastaba con mostrar el número ganador y pedir el trago de su preferencia.

Harry se acercó a la barra y pidió tres tragos fuertes. Los amigos brindaron felices.

Por su parte Lavell también pidió tres tragos y se los pasó a su novia y a Al, que luego de beberlo rápidamente, se volvió a perder entre la gente.

Jammelah por su parte, le dijo a su novio que iría al baño. Ante la ausencia de su novia, Lavell no perdió un segundo y se acercó a Harry, con su trago en la mano.

—¡felicidades, estuviste genial! —le dijo sonriente. 

—¡gracias, tú también estuviste genial! Tienes que enseñarme esos pasos que hiciste son excelentes.

Los ojos verdes de Lavell recorrían cada parte del rostro de Harry, éste no pudo evitar hacer lo mismo, aquel chico moreno le pareció hermoso e interesante.

—cuando quieras te los enseño, ¿Vienes a practicar aquí en Disco Studio?

—si, suelo venir lunes, miércoles y viernes de seis a siete y media de la tarde, ven a verme cuando quieras. —lo invitó simpáticamente. 

—¡ok! Estaré uno de esos días —el joven giró su cabeza y notó que Jammelah ya venía, despidió a Harry con una sonrisa y volvió a su lugar.

La chica se veía algo mareada, sus ojos daban vueltas.

—¿que demonios te sucede? —le preguntó molesto—. ¿qué es eso que tienes en la nariz? Ya limpiate de una vez —dijo mirando a todos lados.

La joven se pasó su mano, por su nariz, limpiando un polvo blanco que le había quedado.

Lavell sintió vergüenza ajena. Su novia comenzó a bailar sensualmente, mirando a otro hombre. El pobre pasó toda la noche tomándola del brazo porque la chica no daba más de lo drogada y ebria que estaba. Desidió llevarla a su casa, Al se quedó por unas horas más y tratar de vender lo poco que le quedaba.

Harry seguía bebiendo con sus amigos, buscando en vano con la mirada a Lavell.

—ya lo sé Harry, ¿te gusta ese chico verdad? —le dijo Farrah. 

—¿qué ? Absolutamente no —dijo riendo, sus mejillas se ruborizaron. 

—¡oh vamos, no intentes engañarme! Ya ví como se miraban, es una pena que tenga novia

—Farrah, que observadora eres, pero  sería algo imposible, además no debe ser homosexual, tiene novia.

—¿y eso qué? Su novia es una odiosa, quizás le gusten también los hombres, porque no puedes negar que el te miró de forma amorosa, además bailó contigo sin importar nada.

—no voy a insinuarle nada, quizás quiere mi amistad, pero no puedo negar que es muy hermoso 

—¡oh sí! Además tiene unos ojos hermosos, desde aquí pude ver sus ojos claros. Harry, no pierdas la oportunidad si lo vuelves a ver.

—Farrah ya para, no seré irrespetuoso, no le sacaría el novio a nadie, por más malvada que sea la persona

—¡Harry, tú siempre tan bueno! —rio su amiga.

Los tres se quedaron hasta las 5:30 de la madrugada, luego, ebrios partieron a pie.

Disco Studio (LGBT)Where stories live. Discover now