Disco Studio (LGBT)

Capítulo 39

Lavell tomaba de la cintura a Harry, de repente sintió que alguien tras él lo tomó fuertemente del brazo, haciéndolo caer, por suerte el chico no cayó al suelo completamente.

—¡baja de ahí, eres mío Lavell, debes estar conmigo y no con esa basura blanca! —le gritó Jammelah.

Harry dejó el trofeo y bajó del podio.

—¡déjalo en paz! ¿Tenías que arruinar su momento maldita perra? —exclamó Harry enojado.

Jammelah se abalanzó a él, pero Al la detuvo justo a tiempo. La chica no alcanzó a pegarle.

—¡estoy harto Jammelah, aléjate de mi maldición! ¿No lo entiendes? —le gritó Lavell más que molesto.

Personal de seguridad, echó a la chica del lugar.

Ellos un tanto incómodos, volvieron al podio.

—¿te hizo daño?

—no, pero la conozco, lo intentará denuevo —profirió Lavell preocupado.

Harry frotó una de sus manos en la espalda del ojiverde.

—¡ahora invitamos a los ganadores a bailar un último baile en la pista, además hay otro premio para todos ellos... Diez tragos gratis en la barra 3 , solo a los ganadores!

Lo jóvenes se pusieron más contestos aún y bajaron a la pista a bailar.

Comenzó a sonar la canción de Kat Mandu "the break".

Todos hacían palmas, pero Harry y Lavell una vez más sintieron estar solo ellos y la música.

Juntaban sus cuerpos mientras bailaban, sentían escalofríos cuando rozaban sus pieles, podían sentirlo hasta en el alma.

Entrelazaban sus brazos y piernas, eran los que más se destacaban en la pista.

—¡podría bailar contigo para siempre Harry! —le dijo Lavell de forma amorosa.

—¡también yo, siento que podría bailar junto a ti hasta el fin del mundo!

—¡Que el mundo se destruya a nuestros pies Harry, aun así seguiremos bailando!

Una vez que finalizaron su baile. La gente colmó la pista.

Más que felices, se dirigieron a la barra con sus amigos y pidieron tragos.

—Harry ¿qué te parece ir a mi lugar cuando salgamos de aquí? —le propuso Lavell al oído.

—¿te refieres a ir a conocer dónde vives? Si, me encantaría

—¡genial! —dijo dándole un guiño.

Harry mordió su labio inferior, luego del baile iría al departamento de Lavell, se puso nervioso, en ese lugar estarían solos y comenzó a especular de lo que podría pasar.

Ellos dos solos, en una habitación, con copas de más...

Sería perfecto.

＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚　˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

Pasaron las horas, eran las 5:35 de la mañana, decidieron irse. Todos estaban en la vereda del local.

Harry apartó a Davon.

—¡hey, Lavell me ha invitado a su habitación de hotel! ¿Puedes llevarte mi trofeo y tenerlo en tu casa?

—¡¿Qué, es enserio?! —dijo casi gritando.

—¡shh, baja la voz, Dios mío estoy muy nervioso! —decía pestañeando sobremanera.

Lavell conversaba con Marcus y su novia, mientras Davon, Farrah y Harry cuchicheaban.

—¡oh por Dios, Davon tenía razón, hoy tendrán sexo! —dijo Farrah emocionada.

—¡te lo dije, no puedo más de la emoción, Harry no olvides contarnos todo lo que hicieron... ! —decía Davon.

—están locas, ni siquiera sé si pasará algo... Ojalá que sí...

Farrah y Davon gritaron abrazando a Harry.

—Hey, ¿y a ustedes que rayos les pasa? —preguntó Marcus riendo.

—¡nada, solo festejabamos el logro de los chicos! —mintió Farrah.

Todos se despidieron.

Harry y Lavell caminaron en silencio por un instante.