VIII. Granger

2K 221 2
                                    



OCHO

El rubio dejó que su antigua profesora lo guiará hasta el piso superior, donde estaban los dormitorios. Se sentía mareado. Como si su cuerpo se moviera hacia adelante y hacia atrás constantemente. Apretó los ojos con fuerza y se llevó una mano a su semblante. Le dolía la cabeza.

— Pediré a algún elfo que te prepare algo para comer. — comentó la mujer, con voz suave. Draco asintió, pero luego recordó algo.

— No me lleves a mí cuarto. Cualquier otro, es mejor.

Minerva no dijo nada por unos segundos. El silencio solo era interrumpido por sus pasos.

— Bien. Como gustes.

Le guío hasta una habitación doblando a una esquina. Le abrió la puerta y le ayudó a llegar a la cama. Draco se dejó caer en la cama y cerró los ojos. Estaba tan cansado todo el tiempo.

— Te voy a dejar esto acá — la voz de Minerva lo trajo de nuevo a la realidad — Es un bastón, te va a ayudar a moverte por la casa con más facilidad.

Draco no se molestó en abrir los ojos. No hacía diferencia.

— No me interesa moverme por la casa. — espetó sin delicadeza.

— Vi como te sostenías del sofá. Te dará estabilidad hasta que recuperes tus fuerzas. — concluyó la mujer, y antes de que él pudiera decir algo sintió la puerta cerrarse.

Se había ido, por suerte.

Aunque no se había ido del todo. Sabía que en este momento se estaría aproximando a Granger y las dos hablarían de lo mal que estaba y lo difícil que sería cumplir el maldito acuerdo.

No podía creer que Granger estaba en su casa, en la mansión Malfoy, después de todo lo que había pasado. Ella estaba en la guarida del lobo, en el lugar que había sido la guardia de Lord Voldemort. Se preguntó si ella sabía, pero recordó que sí que lo sabía. ¿Por qué estaba ahí entonces? ¿Por qué no corría lejos? Era lo que él mismo haría si pudiera.

Y además no eran amigos como para que aceptara ese trato de mierda que habían establecido. Como si él tuviera el más mínimo interés en cumplirlo.

No entendía sus razones. Nada podía explicar que estuviera ahí, que aceptará ser parte de eso. Minerva le estaría dando una motivación muy buena para que la bruja más brillante de su generación aceptará rebajarse a ese trabajo.

Suspiro rendido.

Granger sería la encargada de ayudarlo a restablecerse. Se había burlado de ella lo suficiente en el colegio como para saber que ahora ella no perdería oportunidad de hacer lo mismo. Y la tendrá fácil.

Draco Malfoy - Efecto Azkaban [TERMINADA]Where stories live. Discover now