DEVÓRAME ⚽️ (Isagi Yoichi × OC) [Blue Lock]

15° GOL

- ¿Y Bachira dónde se ha metido? No estaba en la habitación cuando hemos ido a desayunar.- Isagi se rascaba la cabeza bostezando.

- No sé, pero hoy he amanecido en su cama, con lo cual no ha pasado la noche en la habitación.- soltaba Igaguri.

- Sí... Eso es más probable que se haya levantado temprano para entrenar por su cuenta.- Chigiri le daba la razón.

- ¿Ese bulto de ahí no es él...?- Kunigami señaló la portería cuando por fin llegaron al campo de entrenamiento. Se acercaron.- ¿Pero qué...

Ladeaban la cabeza viendo aquellos bultos durmiendo en la portería. La pelirroja y Bachira dormían juntos en posición fetal, dándose la espalda, y el chico con una pelota de fútbol como almohada. Ambos tenían el chándal puesto con los deportivos de tacos, pero ella en algún momento de la noche, se quitó su camiseta para enrollarla y usarla de cojín, así que quedó en brasier. Bachira se chupaba el dedo con algunos mechones el pelo rojo y enredado de Ariel tapándole la cara, ella entrelazaba los dedos de ambas manos y parecía rezar.

- Odio no tener un móvil ahora mismo para sacar un buen plano de esto...- se quejaba Naruhaya.

Como si Bachira tuviese una especie de alarma en su cerebro que le indicara que lo observaban mientras dormía, abrió de golpe sus ojos y miró a sus compañeros. Se removió un poco y levantó su mano.

- Oh, ¡buenos días, chicos!- se le veía de muy buen humor, casi como siempre. Como si dormir debajo de una portería con una chica fuese lo más normal.

- ¿Bachira, qué demonios...?- comenzó Raichi.

- ¡Auch! Duelen mucho hoy.- por detrás del chico de ojos amarillos se erguía ella con sus ojos cerrados y bostezando. Se masajeaba sus pechos con una cara arrugada. Abrió sus ojos un poco entrecerrados por la claridad de las luces blancas del recinto y cuando vio al puñado de chicos sonrojados allí de pie, sus manos quedaron estáticas.- ¿Buenos días?- sonreía incómoda.

- ¿Qué hacéis aquí?- Isagi se veía molesto.

- Anoche tuve una pesadilla.- Ariel se ponía su camiseta con tranquilidad e intentaba levantarse sin parecer una zombie.- No podía dormir, así que fui a buscar a Eris. Me ofreció jugar con ella al fútbol y no le pude decir que no.- Bachira explicaba con una sonrisa.

- Al final dormimos aquí, terminamos demasiado cansados como para movernos.- la chica no paraba de bostezar.

- ¿Habéis jugado al fútbol? ¡¿Juntos?!- Kunigami los señaló a ambos.- Creí que Eris no podía jugar.

- ¡Sí! ¡Fue una pasada!- ella lo miró mal.- Ups, le prometí que no diría nada, lo siento.- sacó su lengua.

- Claro que puedo jugar, yo puedo hacer lo que quiera.

- Yo te dije que quería verte jugar y me dijiste que no...

- Depende del momento y con quién, no se me ocurrió otra forma de quitarle el miedo y cansarlo para que se durmiera, a las tres de la mañana.- se encogió de hombros y miró su móvil que estaba tirado por ahí.- Hostia, llego tarde a una reunión. Que os vaya bien el entrenamiento.

- ¡Hasta luego!- Bachira la despedía moviendo su mano enérgicamente.

- Quiero detalles.- Kunigami habló cuando la vio salir por completo.