DEVÓRAME ⚽️ (Isagi Yoichi × OC) [Blue Lock]

33° GOL

- Espero que no vuelvan a molestar esos mocosos.- Anri se echaba un poco de tequila.

- A mí no me importaría…- la mayor la miró entre sorprendida y pícara.- ¡Ah! No puedo creer que esté cumpliendo veinte años y esté pillada por un chico de diecisiete, ¿se puede considerar pedofilia? Estoy asustada ahora.

- Oh… ¿quién es? ¿Lo conozco?- Anri se sentaba en la cama y Ariel se revolcaba por esta también.

- Es… Isagi Yoichi.- se mordió el labio reprimiendo una sonrisa tonta y se tapó la cara con un cojín.

- ¡Oh! Ese chico tiene que cumplir dieciocho este año, así que no te asustes por eso, sólo os lleváis dos años. Hay posibilidades.- le daba un codazo y bebía.

- No, no creo que haya posibilidades, soy su entrenadora y en lo único que piensa es en mi fútbol, si le gusta algo de mí es que juego bien y ya está. Seguro…- cogía la botella de ron y se la empurraba como si fiera agua.

- ¡¿Y tú qué sabes?! Nunca sabemos lo que pasa por la mente de los hombres. Son fáciles de leer, pero otras veces sales más confundida de lo que ya estabas…

- A ver, ¿qué te pasa a ti?- Ariel puso su cabeza en las piernas de ella y esta arrugó sus labios pensando si contárselo o no.- Va, venga, yo soy una tumba.- puso sus brazos encima de su pecho como si fuera una momia.

- Bueno… Si pasas tiempo, mucho tiempo con alguien por trabajo y te acostumbras tanto a su presencia que ya no quieres estar nunca más sola… ¿es amor o simplemente aprecio?

- No sé, supongo que el enamoramiento no sólo es que te guste la presencia o la personalidad, también su aspecto, la forma en la que te trate o que te atraiga sexualmente, a no ser que seas asexual… La verdad es que no lo sé, creo que la primera vez que creí estar enamorada de alguien, me hizo tanto daño que ya no sé bien lo que es amar.

Anri se acomodó mirándola, dándole a entender que estaba preparada para escuchar esa historia.

- Vale, vale, pero antes, otro chupito.

La chica de pelo rosado asentía rápido y alegre.

- Bien, creo que no hace falta que te explique quien es Itoshi Sae, ¿verdad?

Ella negó.

- Creo que lo conocí hace tres años, tenía una beca para estudiar en España y entrenar en el Real Madrid Youth y yo en ese momento estaba trabajando allí y haciendo algo de negocios con Ego. Él tenía quince y yo diecisiete, yo no me encargaba en primer lugar de entrenarlo, pero nos conocimos en el campo. Jugamos a 1 vs 1 y le gané, a partir de ahí empezó a seguirme y empezamos a hablar. Hablar mucho, hasta que nos empezamos a ver fuera del estadio. En la primera cita nos acostamos y así seguimos por meses.- suspiró y se tragó otro chupito.- Hasta que llegué un día al campo y allí estaba él, con sus otros compañeros, me retó y yo acepté. Estaba tan pillada por él, que le dejé ganar y después de aquello no me volvió a hablar. Le pregunté qué le pasaba conmigo, nunca hicimos oficial ninguna relación pero no es normal que me dejase de hablar así como así. Me respondió que ya no me necesitaba, con aquel partido había demostrado ser mejor que yo y quería “pasar de nivel”. ¿Qué era yo, entonces? ¿Era un simple juego? Simplemente utilizó mi confianza para hacerme débil y que pudiera caer a sus pies.- se levantó a echarse más mezcla en su copa.- No le volví a ver más el pelo hasta ahora, pero tuve que escuchar historias sobre que era un prodigio, un genio del fútbol, el próximo mejor jugador de la historia. Me dan ganas de tirarle una botella de estas a la cabeza.