Love and Death| [House of wax]

Capítulo 13.

— ¿Ibas a alguna parte, Molly?—pregunto Bo mientras caminaba hacia ellos—Vincent indícale donde esta la lavadora.

El de pelo largo la tomo del brazo y la llevo hasta el cuarto de lavado, no dijo una sola palabra solo la dejo allí haciéndole una seña indicándole que pusiera su ropa en la lavadora. 
Molly así lo hizo poniendo luego en marcha el aparato, en cuanto volteó Vincent volvió a tomarla del brazo para llevarla hasta el cuarto en el que había estado los últimos cuatro días. 

Escucho como le coloco llave a la puerta, no obstante nunca la amarró de manos y pies, solo la dejo allí dentro. Por lo que Molly se dispuso a recorrer el cuarto tratando de encontrar el más mínimo hueco, o tan siquiera un teléfono, algo que le permitiera salir de allí. 

Finalmente no pudo hallar nada, el cuarto estaba lo suficientemente bien asegurado para impedir que ella saliera.

— ¿Qué vas a hacer con ella?

Cuestiono Lester a su hermano mayor, Vincent se había ido a su taller para continuar con su trabajo, por lo que Lester aprovechó para tener una conversación con Bo respecto a lo que sucedería con la joven. 

— ¿La vas a matar?—pregunto aún más curioso—no podemos mantenerla aquí para siempre.
— ¿Por qué no?—le preguntó Bo volteándose a verlo.
— Pues porque no hacemos eso—contesto su hermano encogiéndose de hombros—por lo general los matamos y  los entregamos a Vincent.
— Tú déjame manejar esto a mi ¿esta bien? Sé lo que hago.

Bo tomo su caja de cigarros y salió fuera de la casa para poder fumar uno. Lo cierto es que decidía sobre la marcha que es lo que haría con Molly, si no lo fastidiaba la dejaría vivir, si por el contrario intentaba alguna cosa para perjudicarlo la asesinarla sin piedad. 

[…]

Caída la noche Lester se presentó en la habitación de la joven con un refresco y un plato con pollo y pasta. 
— Lamento despertarte –dijo cerrando la puerta tras de él—te traje la comida.
— Gracias—susurró ella—¿podría ir al baño después?
— Primero come, luego te llevo al baño.

Molly asintió levemente con la cabeza y se dispuso a comer bajo la atenta mirada de aquel sujeto tan extraño. No era malo ni molesto como Bo, pero tampoco era un santo, eso estaba claro. 
Unos minutos más tarde la joven Jones había acabado la mitad de su plato, por lo que Lester la fue guiando hasta el baño, claro que ella ya sabía cómo llegar pero no se le despegaría para evitar inconvenientes. 

Una vez en el baño Molly enjuago su boca con un poco de agua y utilizo su dedo para de cierto modo “lavar" sus dientes, en cuanto estuvo lista salió para ser escoltada una vez más hacia aquel cuarto. 

— Hasta mañana—dijo Lester.
— Hasta mañana.

Contesto una desganada Molly.
Sin más se arrojó a la cama, haciéndose prácticamente un bollo para proceder a tratar de dormir tan siquiera un poco, le hacía falta.

[…]

— Van tres días—hablo Demian—tres malditos días ¿cómo es posible que Molly aún no aparezca?
— Esto siempre toma tiempo—hablo el detective frente a él—pero aparecerá, te lo aseguro.
— ¿Lo hará? ¿Y cómo aparecerá, como esa Sierra que la encontraron asesinada la semana pasada?—le pregunto el joven con notable rabia—no quiero a mi hermana en una bolsa para cadáveres, la quiero de vuelta y la quiero viva.
— Eso no depende de nosotros—soltó aquel hombre.
— ¡Depende si!—espeto Demian aproximándose peligrosamente a él—ustedes son la autoridad, esos malditos policías son la autoridad, su deber es protegernos y encerrar a cada maldito enfermo que pise la tierra.
— Será mejor que te calmes o solo conseguirás que te arresten—advirtió el detective—Molly aparecerá—afirmo—aparecerá viva, el equipo se está moviendo bien, probablemente estemos cada vez más cerca.

Demian no confiaba para nada en ese detective y los policías, los consideraba muy poco competentes. No sólo le impidieron continuar con su búsqueda particular sino que no buscaban correctamente a su hermana, no tenían siquiera una mínima pista de donde podía estar esta y si los días seguían pasando la situación no haría más que empeorar.