Capítulo 39.

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— Por Dios…¿te encuentras bien?

Pregunto Molly poniéndose  de rodillas junto a Vincent, que estaba aún en el piso con las manos sobre la herida que le habían hecho, al principio atinó en quitar la navaja que todavía estaba clavada en su abdomen, pero la blonda enseguida lo detuvo.

— No…no, déjalo ahí. Tiene que verte un médico—él enseguida comenzó a negar con la cabeza—si, si tiene que verte un médico, no puedes quitártelo porque sino podrías desangrarte y…

El grito de Bo los alarmó a ambos, no obstante en cuanto vieron hacia el costado fueron testigos de como este le disparaba al último de aquellos tipos que quedaba con vida. 

— ¿Te encuentras bien?—le pregunto acercándose a ella, quien asintió pero rápidamente devolvió la vista hacia Vincent—maldita sea…
— Hay que llevarlo a un hospital—dijo Molly rápidamente—no puede quedarse aquí así, la herida podría ser profunda, es…es peligroso.
— Peligroso será sacarlo de aquí.
— Bo—pronunció la blonda—Vincent necesita ver un médico, ¡no seas terco y llévalo!—grito mostrándose molesta ante la sola idea de que no quisiera llevarlo.

Bo soltó un bufido, no quería sacar a Vincent del pueblo, sabía que de hecho aquella idea no le agradaba para nada a su gemelo, pero no podía arriesgarse a perderlo.

Enseguida él y Lester lo ayudaron a ponerse de pie para llevarlo hasta la camioneta. 

— Molly –pronunció Bo regresando hacia donde estaba la chica para poder hablar a solas con ella—no puedes venir con nosotros pero te quedarás con Lester ¿de acuerdo?
— No es necesario, podrías necesitar la ayuda de Lester , es mejor si va contigo.
— No te dejaré sola.
— Estos idiotas están muertos, yo estaré bien, tú ve con tus hermanos—le dijo y ante el silencio de Bo, supo que había otra razón para no querer dejarla ahí—no me iré—aclaro de inmediato.
— No espero que me digas en la cara que piensas huir así que permíteme desconfiar—replico el hombre.
— No voy a irme Bo, si no me fui antes no me voy a ir ahora—le aclaro—estaré aquí cuando regresen.

Él la observo detenidamente y le creyó, realmente creyó en su palabra. De a poco se inclinó acercando su rostro al de la blonda, dándole un pequeño beso. 

— Ve—musitó Molly—confía en mi.

Se dieron un último beso y Bo se marchó junto a sus hermanos, Molly por su parte camino de regreso a casa, la idea de permanecer esperando allí con cadáveres alrededor—incluyendo los de cera—,no le resultaba el mejor plan. 

Salió de allí tratando de ser lo más rápida posible, sentía miedo, temía ser atacada nuevamente, todo lo que quería era llegar a casa y encerrarse, esperando que todo saliera bien  con Vincent en el hospital. 
Eso le preocupaba bastante, no quería que nada le sucediera, menos por su culpa pues sentía gran responsabilidad de lo que le había pasado , después de todo fue por defenderla que él acabo herido. 

Pronto el sonido de un motor la alarmó, por lo que apretó el paso. Podrían ser nuevas personas llegando al pueblo o más amigos de aquellos maleantes, estando sola no tenía la más mínima chance de sobrevivir si ese era el caso, por lo que se dio prisa para esconderse. 

Llego a la casa, se adentró a la misma y fue directo hacia su habitación. Jonesy le hacía compañía, estaba acostada a los pies de la cama durmiendo tranquilamente mientras la blonda se recostó , no sin antes claramente llevar unas cuchillas de la cocina consigo , por si acaso.

Por otro lado , Demian y Mitchell estaban apenas ingresando al pueblo. Estacionaron el carro, bajaron del mismo y fueron directo hacia aquella casa, aquel lugar que guardaba tan terribles recuerdos para ellos. 

— ¿Entramos directamente o…?
— Pues si, se supone que esta vacía—dijo Demian mientras sacaba una pistola de su mochila.
— Se supone—murmuró Mitchell—no sabemos si esos sujetos continúan con vida o algún otro familiar desquiciado.
— Entonces saca las cuchillas de tu mochila y tenlas a mano por las dudas. 

Dicho eso guardaron silencio y apretaron el paso. Una vez en la casa, trataron de ingresar pero la puerta estaba con llave por lo que tuvieron que forzar la misma con algunos golpes para lograr abrirla.

— Oye eso—hablo Mitch guardando silencio ambos, se alcanzaron a oír unos ladridos desde el fondo—hay gente aquí. 
— O quizá solo un animal se metió—sugirió Demian adentrándose a la casa.
— Si, y puso llave ¿verdad?—replico su pareja dedicándole una seria mirada—pon atención Demian, no quiero que te lastimen.

Ambos comenzaron a adentrarse al lugar ahora con mayor cuidado, estaba claro que había personas dentro por lo que tenían que estar listos para cualquier posible ataque.

Entre tanto, Molly dentro del dormitorio estaba tratando de hacer guardar silencio a Jonesy quien estaba alerta ante los ruidos en la sala.

Se puso de pie, sujeto con fuerza la cuchilla en su mano y se abrazó al perro que estaba siendo su única compañía en aquel momento. Estaba aterrada, no quería salir lastimada ni que lastimaran a Jonesy, era un animal bueno y muy amable con ella los últimos tiempos, sabia que si alguien la atacaba la defendería y no quería que acabara lastimada.

Comenzó a escuchar pasos cada vez más cerca , el corazón casi que se le salía del pecho, le susurraba a Jonesy que guardara silencio, no obstante al percibir los pasos cada vez mas fuertes y cercanos soltó unos cuantos ladridos.

— Shhh…guarda silencio por favor—susurró aferrándose más a ella.

Cerro los ojos con fuerza y se puso de pie, lista para atacar en cuanto la puerta se abriera.
Divisó el picaporte moviéndose y segundos más tarde dos figuras masculinas se dejaron ver, mismas que no demoró mucho en reconocer. 

— ¿Molly?—se los escucho decir con notable sorpresa. 

Love and Death| [House of wax]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant