Capítulo 46.

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-Por favor vete.

Pidió Molly ya notablemente cansada de estar repitiendo aquello, cansada de estar viviendo aquella situación en la que jamás busco meterse.
Muchos momentos vividos en Ambrose los odiaba, sin embargo, muchos otros los recordaba con cariño. De cualquier modo, desearía simplemente no haber vivido nada de aquello, no haber pisado jamás el pueblo para de ese modo evitarse todos los líos, los sentimientos, y los conflictos internos con los que acarreaba ahora.

-Solo vete...ya no tiene caso Bo, entiéndelo de una vez. No podemos volver a Ambrose, ni siquiera tú...créeme que aunque lo intente, aunque niegué todo frente al detective ellos seguramente irán a buscarlos-expuso siendo oída atentamente por el mecánico-en lugar de estar aquí deberías estar sacando a tus hermanos de allá, llévalos a un lugar seguro.
-Lo haré, los llevaré a ellos y te llevaré a ti conmigo también-contesto este, haciéndola girar los ojos ante la terquedad-no voy a dejarte, no pienso separarme de ti.
-No podemos-musito ella , su mirada comenzaba a empañarse y eso es justamente lo que no quería, llorar frente a él-lo que sea que estés pensando simplemente no se puede, lo sucedido en Ambrose simplemente se queda allá, punto final. Haz lo que te dije, olvida todo y ocúpate de salvar a tus hermanos ahora, es lo más importante en estos momentos.
-¿Realmente no quieres regresar? ¿No quieres volver a ver a Lester...a Vincent?-ella enseguida lo miro, Bo sabia que el nombre de su hermano podría servir de palabra mágica y no dudo en usarla-no le gusto mucho el no encontrarte en casa cuando regreso del hospital.
-¿Cómo...cómo esta con lo de su herida? ¿Se encuentra bien?-pregunto Molly ignorando sus palabras.
-Si, necesito de algunos medicamentos y unos días de reposo pero se encuentra bien-respondió Bo, analizando en silencio y con cierto recelo el modo en que la joven se preocupaba por su hermano-si no vuelves por mi, al menos vuelve por él, lo pondría muy contento tenerte de regreso.

Molly no contesto, ni siquiera articulo palabra, solo atino a ponerse rápido de pie y empujar al mecánico hacia dentro del armario en cuanto diviso la claridad proveniente del pasillo filtrándose por la ranura entre la puerta y el piso.

-Cielo ¿estás bien?-un somnoliento Nick se asomó por la puerta.
-Si pá, solo tengo un poco de insomnio es todo.
-Creí oírte hablar-mencionó tallándose un ojo.
-Hablaba sola, lo siento.

Ella solía tener el mal hábito de hablar consigo misma de vez en cuando, por lo que Nick le creyó.

-Pronto darán las 2 a.m., intenta descansar ¿si? Mañana será un largo día.
-Si pá, descansa.
-Tú también cariño.
-Oye pá-lo llamo antes de que este cerrara la puerta -te amo-expreso, el rubio esbozo una pequeña sonrisa.
-Y yo a ti mi pequeña. Ten buena noche.

Dicho eso el señor Jones salió por fin del dormitorio, y una vez seguro de que no regresaría, Bo salió del armario caminando directo hacia la cama donde Molly estaba ya acostada.

-Miren quién resultó ser una niña de papi -se burló causando que ella le arrojara un almohadón.
-Esperaba más bien un "gracias" de tu parte, considerando que evite que te partieran la espalda por haberme raptado.
-Oh cariño -rio Bo-ya patee el trasero de tu padre una vez, no veo porque no podría hacerlo de nuevo.

Molly lo observo con absoluta seriedad. Le gustaba cuando comenzaba a relajarse, de hecho se convertía en otra persona completamente diferente cuando eso ocurría, una persona agradable por así decirlo, pero no toleraría que se burlara de su papá o hiciera mención de lo sucedido años atrás como si fuese una anécdota de como compro pan.

-¿Sabes?-pregunto mientras se recostaba junto a la chica-podría buscar un sitio aquí. Si no vas a ir a Ambrose, entonces Ambrose podría venir hacia ti ¿no crees?
-No...no-dijo rápidamente Molly-no puedes hacer eso, no puedes moverte de un lado a otro y arruinar la vida de las personas, decidir quién vive y quien no.

Ante aquellas palabras Molly pensó lo peor, Bo no se refería a eso, pero para la blonda fue imposible no pensar en que trasladarían el trabajo y se encargarían de crear un nuevo pueblo hecho completamente de cera.

Bo por su parte, observaba detenidamente el modo en que ella hablaba, sus gestos y como se esforzaba por no levantar la voz y ser descubiertos.
Cuando lo noto no había oído nada de lo que ella había dicho, sin embargo sabia que estaba "regañándolo" por lo que no le dio mucha importancia. En su lugar se incorporó un poco, para dirigir una de sus manos hacia el rostro de Molly, inclinarse y poder tomar sus labios en un beso que aunque la tomo por sorpresa, terminó correspondiendo, él le agradaba más allá de todo, no pudo negarse ante aquella cercanía.
En cuanto a Bo, mucho más allá de su fachada de tipo rudo y sin sentimientos-que en cierta parte no era tanto una fachada, sino simplemente su forma de ser-, desde la llegada de Molly muchas cosas habían cambiado, una de ellas eran sus sentimientos. Jamás había sentido interés, preocupación o incluso amor por alguien más además de sus hermanos y claro, él mismo. Pero algo en Molly lo cautivó desde el inicio, y ahora que llevaba tanto tiempo de conocerla, de convivir con ella, simplemente no se imaginaba una vida donde la joven no estuviese presente.
Ya formaba parte de su vida, su familia, no la dejaría ir así como así. Lucharía contra todo y todos con tal de tenerla nuevamente a su lado.

-Basta-susurró la blonda, interrumpiendo el beso que estaban dándose-debes irte, si mi papá vuelve ...

Bo ni siquiera artículo palabra, volvió a acercarse para poder tomar sus labios nuevamente entre los suyos en un beso que no demoró demasiado en tornarse un poco más desesperado.
Al mismo tiempo que su mano derecha sostenía el rostro de Molly, la izquierda viajó hacia abajo deslizándose dentro del pijama, comenzando a subir con lentitud hacia el pecho de la joven que no quería hacerlo en ese lugar, en su casa pero moría de ganas por volver a estar con él, y quedo claro en cuanto enredo sus piernas alrededor de la cintura del mecánico quien sonrió satisfecho al notar que ella estaba tan entusiasmada y deseosa como él.

Tanto como la camiseta como el pantalón del hombre terminaron desparramados en algún rincón del dormitorio. Un leve gemido salió de la boca de él en cuanto se aproximó para volver a besarla, y sintió la fricción de su abultado miembro rozar contra la entrepierna de Molly. Estaba deseoso de poder entrar de una vez en ella. La joven elevó un poco la cadera permitiéndole a Bo levantar aquel pijama que tenía puesto, y acto seguido, con poca amabilidad, le quitó su ropa interior procediendo a hacer lo mismo con su bóxer que aterrizó en algún sitio junto al resto de la ropa.
Sin previo aviso se adentró en ella, le costaba un poco ser amable más hacia un gran esfuerzo por serlo. Había aprendido de sobra que Molly no era precisamente muy fan de lo rudo por lo que trataba de adaptarse a aquello -procurando que ambos disfruten, desde luego-, pero intentaba y mucho enfocarse en el placer de la joven, quería realmente que cada noche junto a él fuese inolvidable y no para inflar aún más su ego -o quizá si, tan solo un poco-, pero principalmente era por ella. Estaba decidido a darle todo, a hacerla feliz de un modo u otro, tan feliz como él nunca lo había sido.

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holi, lamento muchísimo, muchísimo la tardanza pero como les había dicho ando media complicada. Cosas pasaron y siguen pasando y últimamente prefiero hacer otras cosas que estar en mi casa escribiendo o publicando. En fin, ahora voy a estar tratando de subir más como antes. Espero quede alguna por acá todavía

Love and Death| [House of wax]Where stories live. Discover now