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-¡Maia! – grita Cata entrando y corro a abrazarla –
- ¡Cata! – chillo eufórica mientras ella ríe –
- Prima – dice Marcus y aunque hace un año lo vi, me sorprendo siempre de lo grande que está –
- Marcus que grande estás – digo y él ríe, su voz va poniéndose grave – antes tenías una voz aguda – chillo y asiente, lo abrazo fuerte –
- Eithan – esa era Alice la hija mayor de la tía Kate –

Mi hermano abraza y alza a Alice para darla vuelta, todos nos reímos mientras ellos parecen dos niños. La tía Kate a diferencia de papá tuvo tres hijos, Alice la mayor, Catalina la del medio y Marcus el último. Alice es contemporánea con Eithan y por eso son muy unidos cuando venimos a Filadelfia, en cambio Cata y yo somos de la misma edad lo cual nos hace muy unidas, tanto acá como en distancia. Y Marcus al ir creciendo no tenemos de otra que llevarlo con nosotras, ya que Eithan y Alice obviamente no lo harán.

-Me alegra que estén aquí – dice la tía Kate entrando con bolsas y detrás de ella papá ayudándola –
- Tía – gritamos Eithan y yo para acercarnos a ella –

La tía Kate es el vivo retrato de la abuela, mientras que papá es del abuelo. La abuela era castaña y con el tiempo se volvió pelirroja, aunque ahora mismo está dejando que su cabello sea canoso, según ella le da el toque de elegancia, y yo soy me rio con ella. Y la tía Kate era castaña aunque ahora tiene mechas en el cabello, hace dos años tenía el cabello rubio, pero la comparaban tanto con papá que el 1 de enero busco cambiarse el color de cabello y se hizo las mechas que hasta ahora mantiene. La abuela es ojos marrones oscuros mientras que el abuelo era ojos marrones claros, papá los sacó como el abuelo y la tía Kate como la abuela, son sus retratos.

-Por fin llegaron Kate – dice la abuela bajando las escaleras como digna reina –
- ¡Abuela! – gritan los tres hijos de la tía Kate para correr a abrazarla –
- Siempre son unos niños contigo – dice mi tía saliendo de la cocina y todos nos reímos –
- No son los únicos – dice mamá y mi tía voltea a vernos –

Me acerco a mi tía y paso un brazo por su costado, mientras ella pasa su brazo por mis hombros, vemos a los chicos saludar a la abuela y un rato después Catalina me arrastra hasta el patio trasero, Marcus se va con la abuela a la cocina, Eithan y Alice salen de casa un rato y los adultos se preparan unos tragos para sentarse en la sala.

-¿Cómo te va en la universidad? – me pregunta Catalina y hago una mueca de sufrimiento que la hace reír –
- Bien, bueno llevo todo con buenas notas y… – me quedo en silencio mientras pienso en Cecilia – aprendiendo – respondo para voltear a ver a mi prima quien asiente – ¿Y tú? – pregunto ahora yo – ¿Todavía arquitectura? – pregunto y asiente –
- Amo esa carrera, creo que es lo único que amo – responde y le creo – cuando el abuelo murió yo le prometí seguir sus pasos y lo haré – dice y la abrazo –

Cuando el abuelo murió nosotras teníamos 13 años y a la que más le afecto fue a Cata, ya que ella se quedó en el pueblo esa temporada sólo para cuidarlo, la tía Kate le pagó el colegio acá hasta que el abuelo falleció y volvió de nuevo a su casa en Pittsburgh con la tía Kate.

-¿Y tú papá? – pregunto al no verlo acá con ellos –
- Mamá y él no andan muy bien – responde y asiento triste – yo pienso que si se separan todo bien pero Alice se rehúsa – dice Catalina con rabia y niego para abrazarla –
- Dale tiempo a la tía Kate, ellos tienen la última palabra, no Alice – Catalina voltea a verme y sonreímos –

Catalina es más parecida al tío Gilbert, rubia, ojos verdes, pecosa, alta y bronceada, algo que no entiendo ya que es rubia, pero bueno cosas que pasan, Marcus es castaño, blanco y ojos verdes una liga de ambos, mientras que Alice es el vivo retrato de la tía Kate pero con el carácter del tío Gilbert, ella es castaña, blanca y ojos marrones oscuros, los tres son bellísimos.

Nací para amarte Where stories live. Discover now