All These Years • jb [3]

Veintidós; Bloqueo

21 de noviembre

Blair's POV:

—Gracias por acompañarme —Le sonreí a Jordan tras desabrocharme el cinturón.

—¿Blair Haden yendo de compras por el centro de Los Ángeles sin ningún tipo de seguridad? No creo que fuese muy buena idea —comentó algo divertido y yo reí antes de bajar del coche, siendo seguida por él.

Nos dirigimos hacia la parte trasera del vehículo y mi guardaespaldas abrió el maletero para sacar de éste varias bolsas que se empeñó en llevar él hasta el interior de la casa.

—¿Nate? —pregunté nada más abrir, pero no recibí respuesta alguna— Igual está fuera o algo —murmuré para mí misma—. Puedes dejar las bolsas aquí mismo. —Le aseguré a Jordan señalando el suelo del recibidor.

Él asintió e hizo lo que le había dicho.

—Bueno, supongo que nos veremos la próxima vez que necesites una mula de carga —bromeó ganándose un golpe en el brazo por mi parte.

—No digas idioteces, anda —Le reprendí—. Pero ya que has sacado el tema... quería comentarte algo.

—Dime. —Me miró curioso.

—Sé que el viernes es el cumpleaños de Addison. —Ladeé un poco la cabeza.

—Oh, sí. —Asintió pasando su mano por su nuca.

—La semana que viene no tengo ningún compromiso y probablemente me dedique a ir al estudio. ¿Por qué no vas a verla, aunque sean dos o tres días? —Le propuse.

—No sé, Blair... ¿y si surge cualquier cosa? —Frunció ligeramente el ceño.

—Yo me las apañaré, de verdad. Incluso he hablado con Rick sobre esto y él está de acuerdo —Le aseguré, pero él parecía no estar del todo convencido—. Oh, venga ya... No me hagas usar la carta de la jefa que te obliga a irte a Nueva York unos días para ver a tu novia. —Le advertí y él rió.

—Está bien, está bien —Alzó sus manos sonriendo—. Muchas gracias.

—Ni las des —Negué con la cabeza—. Y ahora vete a buscar algún vuelo. —Le apremié haciéndole reír una vez más.

—Nos vemos. —Se acercó a mí para despedirse con un abrazo.

—Adiós. —Le sonreí al separarnos y observé como se montaba en el coche antes de cerrar la puerta.

Cogí las bolsas que mi guardaespaldas había dejado en el suelo y me dirigí hacia mi habitación, desde donde pude escuchar el ruido del agua de la ducha cayendo y obtuve mi respuesta a mi duda de dónde podría estar Nate.

Dejé las bolsas sobre la cama junto a mi bolso antes de empezar a sacar todo de éstas, si no lo hacía ahora esas bolsas podían tirarse días en un rincón del vestidor.

Estaba guardando un bonito vestido que me había comprado pensando en utilizarlo en Navidad o alguna otra fecha señalada cuando escuché como un teléfono empezaba a sonar. Salí del vestidor algo curiosa y me di cuenta de que se trataba del de Nate y solo tuve que mirar la pantalla para saber que quien llamaba era su representante. Dirigí mi vista hacia la puerta del baño, desde donde se seguía escuchando el ruido de la ducha, así que me decidí a descolgar.

—Hola, Danielle. —La saludé mientras sacaba una camiseta de la bolsa, a la vez que sujetaba el móvil entre mi hombro y mi oreja.

—Blair, ¿qué tal?

—Bien —Sonreí mientras doblaba la camiseta—, ¿y tú?

—Pues ya sabes, liada, como siempre.