All These Years • jb [3]

Setenta y seis; Cuatro de julio

4 de julio

Sentí una mano sobre mi espalda y al volverme vi a Justin.

—Hey, ¿qué pasa? —Le pregunté curiosa.

—Me voy a ir ya. —Señaló hacia sus espaldas.

—¿Tan pronto? —Esbocé una mueca— Aden, dile a Justin que se quede un rato más. —Miré al pequeño que llevaba en brazos.

—¡Quete! —Le pidió arrancándole una sonrisa a Justin.

—Me encantaría, pero tengo que terminar de preparar las cosas para mañana.

—Tu vuelo no sale hasta las once, las puedes preparar por la mañana —Traté de convencerle—. Quédate hasta los fuegos artificiales, anda.

—Preciosa... —Enarcó una ceja.

Un suspiro se escapó de mis labios y terminé asintiendo.

—Está bien, como quieras —murmuré haciéndole reír.

—¿Chocas los cinco, Aden? —Puso su mano frente a él y Aden no dudó en chocarla con la suya— Nos vemos pronto, campeón. —Se despidió antes de mirarme.

—Hablamos mañana, ¿vale?

—Claro, te llamaré en cuanto aterrice en Los Ángeles. —Me prometió.

Se acercó a mí y dejó un beso sobre mi mejilla, pero cuando intentó apartarse le sujeté por su camiseta, impidiéndoselo. Justin me miró curioso, esperando a que le dijese lo que fuese.

—Te quiero —susurré haciéndole sonreír.

—Yo también te quiero, preciosa —aseguró antes de volver a besarme, esta vez en la frente.

El breve momento fue interrumpido por unos ladridos que se acercaban a nosotros y al apartarnos vimos a Milo entre mis piernas.

—Creo que él también quiere despedirse —bromeé viéndole.

Justin se agachó y acarició la cabeza de mi corgi, que de inmediato se tumbó para que Justin pudiese rascarle la tripa.

—No sabes tu nada... —comentó Justin, aunque le rascó la tripa de todas formas antes de incorporarse— Iré a despedirme de tus padres y tus tíos, creo que son los únicos que me faltan. —Me avisó.

—De acuerdo. —Asentí.

Me guiñó un ojo y se alejó de mí para acercarse a donde estaban mis padres y mis tíos, sentados en una mesa mientras charlaban.

—¿Qué haces aquí parada?

Al girarme vi a Chris acercándose a mí.

—Mami... —Aden estiró sus brazos hacia su madre de inmediato y se lo pasé, para que ella pudiese cogerlo.

—¿Qué quieres que haga? Estaba viendo con Aden como juegan. —Señalé hacia un lado, donde los hijos de Zoe y su padre se estaban disparando con pistolas de agua.

—Déjame reformular la pregunta —Me pidió—. ¿Qué haces aquí parada y no yéndote con él? —Señaló con la cabeza hacia Justin, que ahora abrazaba a mi madre.

—Tiene que terminar de preparar las cosas para mañana. —Me encogí de hombros.

—Bueno, pues ve con él para ayudarle y de paso os despedís en condiciones y no, no hablo necesariamente de la clase de despedida que te sugirió Zoe el otro día —aclaró rápidamente arrancándome una sonrisa.

—Ya nos hemos despedido.

Chirs me miró enarcando una ceja y acomodó algo mejor a Aden entre sus brazos.