Aphrodite [JenLisa]

Capítulo 47

Salieron del taxi tomadas de la mano. La pelirroja alzó la mirada, observando el alto y amplio edificio que tenían enfrente. Tenía miedo.

Su novia le sonrió, transmitiendole en esa sonrisa, confianza, apoyo, amor. La australiana agradeciéndole desde el fondo de su corazón.

Y sí, tenía miedo. Miedo de no saber con qué podía encontrarse una vez cruzara la puerta de su departamento. O mejor dicho, con quién. ¿Le gritaría? ¿Intentaría pegarle? No creía eso... Después de todo, la conocía.

¿Había estado mal?

Quiso llorar.

¿Había actuado realmente mal?

Ella hizo lo que su corazón le indicó. Quedarse con Lisa, quien, según su perspectiva, la necesitaba más.

En cambio Jennie... Había intentado contactarse con ella la noche después a lo ocurrido, pero no había recibido respuestas. Días después, comenzó a llamarla, pero todas las llamadas eran ignoradas. Una semana después, la había bloqueado.

Jisoo decía que estaba actuando "como una perra", que era increíble que, luego de haberle hecho eso a Lisa, tuviera la audacia de enojarse con ella.

Suponían que todo se había dividido en equipos: "equipo Lisa", y "equipo Jennie", y que, al la australiana quedarse con ellas, Jennie lo había tomado como una especie de traición, de que se quedaba en el equipo de la contraria, de la víctima...y que por eso estaba enojada con Rosé, que por eso la había bloqueado. Porque no quería hablar con ella.

Mas para Rosé no existía ningún equipo. Ella las amaba a las dos; siempre lo haría. No podía odiar a Jennie o algo por el estilo, así como lo hacia Jisoo. No, ella no podía. O al menos, no hasta que pudieran hablar y aclarar lo sucedido.

El celular de Jisoo comenzó a sonar, y se detuvieron en la entrada del edificio. La pelinegra frunció el entrecejo al ver quién llamaba.

—Hola —contestó con frialdad.

—Jisoo...Hola...Te habla...Bambam...

—Ya sé que eres tú, ahora dime qué es lo que quieres.

Rosé la miró con sorpresa, pero la surcoreana mantuvo su apariencia fría.

—Ehh...es sobre...sobre Lisa...

—Dime qué mierda le pasó a Lisa antes de que corra a matarte, Kunpimook Bhuwakul.

—La golpearon, Jisoo. Pero eso no es todo, por favor ven al club así podremos hablar mejor.

—

Ahora sí que Rosé estaba muerta del miedo. Algo andaba mal, muy mal, demasiado. Pero lo único que le había dicho Jisoo fue: "es Lisa". Y no quería preguntar más, ó en realidad sí, pero tenía un poco de miedo.

Se habían dado la vuelta y habían entrado en el primer taxi que vieron pasar. Desde allí que la surcoreana no había pronunciado palabra, y se veía terriblemente tensa.

Bajaron del taxi frente a un McDonald's y, sin esperarla —como era costumbre—, Jisoo comenzó a caminar con rapidez por las angostas y solitarias calles, casi corriendo, y dejando a su novia atrás.

Cuando Rosé la alcanzó, ésta ya estaba ingresando, acompañada por un chico pelinegro, alto y delgado, que por los labios gruesos, dedujo era el tal BamBam al cual Jisoo solía llamar "fake Brat" cuando se enfadaba o recordaba situaciones no muy agradables relacionadas con él y Lisa.