Ese Domingo Más Tarde...

32 10 0
                                    

Jamie había estado tratando de ponerse en contacto con Vic, al no conseguirlo buscó a Millie, le escribió pero ella solo leía los mensajes y no los respondía, eso sacaba de quicio a Jamie, decidió llamarle y saber que estaba sucediendo, sus llamadas tampoco eran aceptadas, no tenía idea de lo que sucedía, necesitaba una luz, saber qué hacer exactamente, buscó un número desechable y volvió a intentarlo, en casa de Vic nadie respondía, así que lo intentaría nuevamente con Millie, la primera llamada pasó a buzón pero él siguió insistiendo. La segunda ocasión tuvo más suerte, Millie respondió.

- ¿Aló?

- Millie, por favor no me cuelgues...

- ¿Quién eres? ¿Quién habla?

- Jamie...

- ... ¿Qué haces llamando?

- Necesito saber de Vic, le llamo y me tiene bloqueado, compré esta línea pero tampoco responde. ¿Sabes algo de ella, está bien?

- Bueno, estar, está bien. ¿Pero por qué me lo preguntas a mí?

- Se supone que eres su mejor amiga y ella te lo cuenta todo ¿no sabes lo que sucedió entre nosotros?

- Con detalles no, pero viniendo de ti, nada bueno supongo. Algo me contó pero me dijo que me daría detalles después, así que me imagino que discutieron.

- No, algo peor. ¡Terminó con nuestra relación!

- Debiste darle un motivo muy grande, porque te ha aguantado demasiado como para que te termine ahora después de todo lo que ya le habías hecho...

- No te voy a dar explicaciones a ti.

- Entonces no me llames, tampoco te voy a dar información a ti.

Millie colgó la llamada. Inmediatamente llamó a Vic para ponerla al tanto de todo y de paso reclamar por no contarle semejante chisme tan grande. La llamada pasaba a buzón, pero Millie sabía que tarde o temprano le tendría que contestar, dejó pasar unos minutos y volvió a insistir. No podía dar crédito a lo poco que le había contado Jamie, pero con esa información más la que ya le había dado en su momento Vic empezó atar cabos, gracias a ella Victoria tuvo fuerzas para buscar la verdad y si existía esa verdad fue la causante de todo, se sentía culpable, pero era una culpa buena.

Victoria había estado muy ocupada y en muy buena compañía como para arruinarla atendiendo llamadas. Una vez en casa, cómoda, decidió ponerse en contacto con Millie, la había llamado con tanta insistencia que definitivamente algo había sucedido.

- Tengo ciento y la madre de llamadas tuyas. ¿Estás bien?

- No, no lo estoy.

- ¿Y eso baby, qué sucede?

- Me tengo que enterar por boca de Jamie que ustedes terminaron... Como es eso posible, mi amiga eres tú. Hasta donde recuerdo.

- ¿Cómo que por boca de Jamie?

- Me estuvo escribiendo, llamando, no le respondí, así que se consiguió un número desechable y le conteste porque no sabía quién era, me preguntó por ti, si sabía cómo estabas y cuando le dije que era él quién debía saber cómo estabas me contó que le terminaste.

- Pufff. ¡Que locura! Pues sí, seguí tus consejos, por cierto deberías abrir una agencia de investigación... Me di cuenta que estaba con otras, desde que llegó allí y nada, había una conversación en especial bastante comprometedora y esa fue la gota que reboso todo. Lo confronté y no me lo pudo negar más, aunque lo intento, obviamente sacó excusas como siempre pero no más. Llegué a mi límite con ese sujeto.

- Wowwww. ¡¡¡Qué novela!!! Y yo me vengo a enterar tarde.

- Jajajajaja. Lo siento, pero necesitaba como asimilar lo sucedido, darme mi tiempo para entenderlo y ya después contártelo con calma.

- ¿Y cómo estás? ¿Por qué no te siento llorar?

- ¿Quieres oírme llorar?

- No, no lo digo por eso, simplemente que me imaginé que al enterarte de algo así, ibas a estar destrozada.

- En su momento sí. Me deshidrate llorando jajajaja. ¿Pero siendo sincera, quién es Jamie, qué tiene de especial? Ya me había fallado muchas veces y tú lo sabes, al final, una más, una menos, como que el corazón se aburrió por sí solo.

- ¿Segura? ¿No está pasando algo más?

- ¿Algo como qué? estás un poco paranoica baby, todo está bien, si estuvieras en mi lugar me entenderías.

- Y te entiendo, créeme, solo que sí estoy dolida porque me enteré de todo esto tarde, pero está bien, te perdono.

- Eres muy amable. (Respondió irónicamente)

- ¿Y qué estabas haciendo que no atendías mis llamadas?

No sabía qué hacer, decirle la verdad y Millie en cuestión de minutos estaría visualizando un matrimonio o guardar silencio momentáneamente hasta que Millie nuevamente descubriera todo y tener que soportar otra escena... La verdad prefirió guardar silencio.

- Baby como te dije me estoy tomando mi tiempo en todo esto, salgo, hago compras, voy a que me consientan, unos masajes nunca están de más y cosas así, todo lo que me mantenga ocupada y de buen ánimo bienvenido sea.

- Si necesitas compañía no dudes en decirme, estaré ahí para ti siempre.

- Lo sé, tengo la certeza de eso y créeme que si llego a sentirme así, te buscaré. Por ahora voy a terminar de arreglar algunas cosas en casa y descansare un poco.

- Está bien Vic, te quiero. Hablamos después. No te pierdas tanto.

- Te lo prometo Mill, besos.

Se sentía culpable, claro que sí, pero sabía exactamente qué haría Millie con esa información y es que hasta el momento no había sucedido nada relevante, dos personas con muchas cosas en común se estaban conociendo, pero esos datos en manos de Millie era amor eterno con hijos y mascotas de por medio, sabía que había tomado la mejor decisión aunque no estuviera del todo segura, pero ya no podía hacer nada más, solo esperar...

BelladonnaWhere stories live. Discover now