Millie.

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"Pero a mi infierno iré en busca de todo lo que no te di."


Después de aceptar la propuesta de Jamie, Millie se había instalado en una de las habitaciones del hotel, la intranquilidad se había hecho parte de su día a día. No dejaba de caminar por toda la habitación, sentía que estaba a punto de perder la razón encerrada en medio de esas cuatro paredes, le daba vueltas al asunto una y otra y otra vez, se imaginó todos los escenarios posibles, pues aún no tenía claro cuál sería el siguiente paso a dar, estar del lado de Victoria significaría vivir toda su vida a su sombra, en una angustia constante y aceptando solo lo que Victoria y su padre estuvieran dispuestos a hacer por y con ella. Actuar en su contra seria sellar su único destino huir lo más rápido posible, escondida todo el tiempo para que jamás la pudieran encontrar y lastimar o sencillamente morir. Si Alik murió por mucho menos, ella no se quedaría atrás.

En su cabeza solo estaba el nombre de Victoria, ya no importaba el tiempo, no importaba si tenía hambre, si se había bañado incluso no importaba ya cuantos días habían transcurrido, ya nada de eso importaba, los días eran exactamente iguales uno tras otro y las cosas no cambiaban. Esporádicamente hablaba con Jamie, pero no encontraba las respuestas que estaba buscando, eso la desesperaba aún más.

Después de mucho tiempo en silencio su móvil resonaba a un costado de la mesa, al parecer de tanto pensar en Victoria había logrado invocarla. Nunca antes había tenido tan clara la decisión de contestar, como ahora...

- ... ¿Aló?

- Hasta que decides contestarme...

- ...

- ¿Ahora no piensas dirigirme la palabra?

- Es que no sé qué decirte.

- ¿Deberías empezar por decirme donde carajos estás? (Como si no lo supiera.) Te he estado buscando, te llamo y no respondes, es como si te estuvieras ocultando de mi...

- Eso no es cierto.

- ¿Entonces dime qué es cierto? ¿Dime qué es lo que te sucede?

- Tengo miedo maldita sea. ¿Es qué no lo puedes entender? Tú tienes la vida solucionada, tienes un padre que se encarga de limpiarte el camino...

- Queras decir, limpiarnos...

- El caso es que, si tiene que escoger entre tu y yo, las dos conocemos la respuesta...

- Te estas adelantando a los hechos, estas actuando por impulso.

- No victoria, estoy tratando de sobrevivir.

- ¿Y qué harás para lograrlo?

- Lo que sea necesario...

- Entiendo...

- Quiero que quede claro que no te estoy amenazando.

- Eso lo he tenido claro siempre amiga, como serias capaz de algo así, tu, que siempre vas con la verdad por delante. Incapaz de traicionarme. En lo absoluto.

- No me gusta el tono que estas usando Victoria.

- No tienes por qué preocuparte amiga mía, yo tampoco te estoy amenazando.

- Lo estás haciendo.

- En lo absoluto Millie, si fuera así, desde el primer momento que descubrí tu traición me habría encargado de ti. Pero no, acá sigues, respirando...

BelladonnaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora