Belladonna

Jueves 10 de Enero 2019.

4:15 pm.

La ceremonia había transcurrido con total normalidad, las palabras del sacerdote fueron muy conmovedoras incluso para Victoria quien ya mostraba evidentemente signos de cansancio. La mayoría de los asistentes se estaban despidiendo, pues lo que seguía era la ceremonia de cremación y ese era un momento muy íntimo, solo familia y allegados. Victoria pudo apreciar que a la ceremonia habían asistido mujeres que frecuentaban a Alik, no oculto su incomodidad, algo que fue evidente ante los ojos del Señor Pattison quien se encontraba entre la espada y la pared porque no deseaba incomodar a Vic ni a su padre, pero la situación se le había salido de control. No pudo hacer nada más que rogar por que la misa terminara lo más pronto posible para pedir privacidad y así poder deshacerse de esas susodichas personas sin levantar sospechas. El señor Nejati no era ningún tonto, sintió como propia la incomodidad de su hija y miró de reojo al Señor Pattison como exigiendo una explicación, algo que realmente nadie, ni siquiera el propio Alik en persona podría justificar.

Todo estaba por terminar, o eso se decía a cada instante tratando de convencerse, qué otra cosa podía hacer o decir, unos cuantos pasos más y todo acabaría. Ross se acercó sutilmente para pedirle que por favor dedicara unas palabras a su hermano. Le estaba pidiendo un imposible, jamás se le cruzó por la cabeza que tendría que hacer semejante estupidez, pero ahora era ella la que se encontraba acorralada, si no lo hacía llamaría demasiado la atención. ¿Como pudo descuidar esa parte fundamental? Había estado concentrada pensando en otras cosas que lo olvido por completo.

No había forma de negarse ante esta petición, debía improvisar bajo presión o estaría completamente perdida, miraba a todas partes sutilmente como tratando de encontrar una salida, pero todo lo que encontraba era rostros tristes a donde mirara. Vagamente escucho las palabras del Señor Pattison que no fueron muy reconfortantes, se notaba que no lo conocía del todo bien, se notaron los años de ausencia paterno filial, no todo que eran completos desconocidos, Ross fue un poco más sentimental, ella lo hizo en nombre de su madre y su hermana menor, había dolor en sus palabras, pero también amor, ese amor que solo entienden o sienten los hermanos, ese amor cómplice que prevalece hasta el fin.

Cada paso que daba Victoria estaba lleno de duda, de inseguridad, ella lo sabía, esperaba que nadie más lo notara, esperaba que nadie más tuviera ese "Don" para descifrar las miradas, la respiración y por supuesto... Los pasos. Finalmente había llegado al lugar donde debía estar, aunque no quería, dirigió una mirada a todos los que estaban allí presentes y se dispuso hacer lo que Ross le había pedido, se dijo mentalmente "Al mal paso..." Respiro hondo y espero a que las palabras salieran por su boca.

"Gracias a cada una de las personas que hoy se encuentran aquí, que nos han acompañado en este difícil momento tanto para la familia de mi querido Alik como para mí... La verdad no sé qué decirles, estar de pie aquí frente a ustedes es realmente difícil, estoy despidiendo al hombre que iba a ser mi esposo y con el que compartiría el resto de mi vida, vida... Pero fue llamado antes de tiempo para que hiciera parte de todos los ángeles que desde el cielo nos cuidan y protegen en cada paso que damos. Con él viví días maravillosos, me regalo una felicidad plena, sin egoísmos, estuvo presente en cada paso que daba, creo que me malacostumbro a su presencia y ahora no sé qué hacer sin él...

(Pausa para tomar agua y controlar sus lágrimas.)

Solo puedo darle gracias a la vida por permitirme vivir momentos hermosos a su lado. Hemos perdido un hombre maravilloso, un hijo y hermano incomparable, un amigo incondicional y por qué no... Un esposo maravilloso, desde el cielo cuídanos mi amor, y no nos olvides, pues nosotros nunca te olvidaremos..."

Seco sus lágrimas y se hizo a un lado, se refugió en los brazos de su padre quien no había dejado de mirarla fijamente, los aplausos seguían y se confundían en la despedida que le daban al cuerpo de Alik, esos movimientos se habían hecho más lentos ante los ojos de Vic, quien solo tenía ganas de empujar el cajón para poder salir de allí lo más pronto posible.

Finalmente, este circo había terminado, el cajón paso las puertas del horno crematorio, lo demás seria historia y cenizas... Un secreto se quemaría junto con su cuerpo, un pacto sería un nuevo comienzo, no más lágrimas, no más preocupaciones, no más desvelos, no más mentiras. Mañana sería un nuevo día y quedaría atrás todo lo sucedido, pero aún quedaba lo que Mill necesitaba contarle, esperaba que fuera solo su imaginación y que por el contrario todo estuviera bien y solo fuera producto de la paranoia de Mill, esperaba que nada se saliera de su lugar.

Saliendo del lugar, el cielo se estaba poniendo gris, hacia más brisa de lo normal o sencillamente había algo en la cabeza de Victoria que no la dejaba sentirse tranquila, de reojo sintió que estaba siendo observada pero en esta ocasión no se trataba ni de la familia de Alik, ni del Oficial Ryan, era alguien más, no se sorprendió al verla, lo que sí llamó su atención era la distancia que había marcado entre las dos, no quería llamar la atención de los demás, solo la de ella, allí estaba, lo había conseguido... La actitud de Emma de alguna manera la ponía nerviosa, no tenía claro el motivo, solo sabía que así se sentía y eso le perturbaba.