Nenúfar - Pureza de corazón

C24 - Vigésimo cuarto día de no ser humano

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Mira un poco hacia arriba.

El uniforme militar, el cabello plateado, la cara fría y la cola gris plateada, este era realmente el líder del Primer Ejército Zerg.

Entonces mira hacia abajo un poco.

Cabello negro suave, pupilas redondas y negras, piel blanca normal y temperatura corporal cálida. Esto era de hecho un humano.

¡Un humano!

Mirando a la otra persona custodiada por Alves, Shen Mu y Hammer tenían signos de interrogación. Al menos se dieron cuenta de que el joven humano frente a ellos no era el cautivo que pensaban que era, pero...

Era con el Zerg de cabello plateado...

¿A-Amantes?

Hammer realmente se admiraba a sí mismo. ¿Por qué fue que en este momento de vida o muerte no pudo evitar llenar su cerebro con la profunda vida entre un Zerg y un humano? Pensando en la relación entre los humanos y los Zerg, Hammer incluso pensó en Romeo y Julieta. No, no parecía ser una relación de sadomasoquismo.

Como un estudiante destacado que asistió a la Academia Militar de la Federación y obtuvo resultados sobresalientes, Hammer sabía mucho sobre los Zerg, incluido el tabú del antifaz de Alves. Era algo que nunca podría ser tocado.

Alves era muy militante y pelear parecía ser algo muy agradable para él. El Zerg usualmente inexpresivo de cabello plateado ocasionalmente mostraba una sonrisa burlona en la batalla. Sus labios estaban fuertemente cerrados, su figura alta y recta parecía fría y opresiva y la cola gris plateada se balanceaba impaciente de vez en cuando. Era como un animal salvaje peligroso en estado de caza.

Además, Alves no solía emplear toda su fuerza para que el combate se prolongara un poco más. Entonces, una vez que le tocaba la venda, dejaba de parecer tan despreocupado. Una vez que se quitaba la venda, la otra parte parecía tener cierta pérdida de control y esto era algo que sus enemigos no podían permitirse.

Ahora frente a sus ojos, el Zerg de cabello plateado tomó la iniciativa de quitarse la venda y bajó la cabeza hacia el joven rodeado por esta cola. Parecía estar mirando a la otra persona para confirmar su presencia.

Además, Alves todavía estaba cuerdo. Puede parecer cuerdo, pero no había signos de perder el control. Por qué pensaron que... ¿le gustaba mucho el joven rodeado? De lo contrario, ¿cómo podría darle la tela negra que estaba desatada?

Este movimiento fue equivalente a indicar que solo el otro lado era una excepción a su tabú.

Las caras de los dos hombres seguían cambiando. No sabían si deberían sentirse conmocionados por la increíble realidad o si debían encontrar un pozo decente para enterrarse. ¿Qué podría ser más terrible que secuestrar por la fuerza al compañero del dueño de Tuser, una de las fortalezas de los Zerg? No serían perjudicados incluso si murieran. Su razón para entrar al ataúd estaba claramente escrita en el tablero del ataúd.

Mientras tanto, en el lado de la despierta Gu Huai. De hecho, estaba un poco desacostumbrado a esta posición, pero luego pensó en cómo hizo que los Zerg se preocuparan y tranquilamente permitió Gu Huai lo sostuviera. Alves no tenía prisa por ocuparse de los dos humanos que habían escapado. Primero recorrió a Gu Huai de pies a cabeza. Luego sus ojos se detuvieron en el moretón del brazo de Gu Huai.

Hammer siguió la línea de visión de Alves, vio el moretón y su corazón se detuvo de repente. Puede ser de cuando previamente empujó al joven al suelo. Accidentalmente chocaron con él y...

El moretón no era obvio, pero fue suficiente para que Alves entrecerrara ligeramente los ojos. Luego miró a los dos humanos frente a él y las pupilas doradas pálidas no tenían emociones.