Nenúfar - Pureza de corazón

｢Extra VI｣ - Chirp Chirp & Chirp Huai (4)

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Si alguien más viniera a este planeta abandonado en una galaxia remota, probablemente se sorprendería de lo que vería en el planeta. Había varias criaturas feroces que habían evolucionado o mutado en este planeta y, sin embargo, el líder actual de este planeta abandonado era un cachorro joven sin capacidad de lucha.

Veían a un cachorro negro vagando por este planeta en crisis sin miedo, impulsado por la curiosidad y atreviéndose a explorar por todas partes. En el proceso de exploración, si se cansaba, se quedaba dormido. El esponjoso cuerpo sólo necesitaba sacudir la colita que llevaba detrás. Allá donde iba el cachorro negro de ojos redondos y pupilas verticales doradas, las criaturas de ese lugar huían rápidamente.

Podría decirse que este cachorro caminaba libremente por el planeta abandonado.

Por supuesto, las criaturas del planeta no temían al cachorro en sí. Temían a los Tak Zerg que seguían al cachorro. Como padres, los Tak Zerg permanecían con el cachorro en todo momento y lo mantenían sobre sus hombros o cabezas.

Una vez que Gu Huai mostró curiosidad por una criatura aviar parecida al pavo real, esta hermosa y muy feroz rapaz se vio amenazada por el grupo de Tak Zerg y tuvo que dejar mansamente que el cachorro negro jugara con sus plumas, incluso mordiendo y arrancando algunas.

―Chirp chirp. ―Sujetando la hermosa pluma que le gustaba, el cachorro negro, cada vez más redondo, volvió con sus padres. Entonces Gu Huai mostró esta pluma de color rojo fuego a Alves. A Alves no le interesaban las plumas, pero en respuesta, se acercó y lamió los cuernos de la cabeza del cachorro negro.

Gu Huai ya no sentía curiosidad por el pájaro después de conseguir la pluma y el Tak Zerg no tenía intención de atacar. El pájaro fue soltado y huyó rápidamente. Una vez que se la mostró a Alves, Gu Huai continuó mostrándosela a sus padres. Emitió un chirrido y tuvo mucho cuidado de que la pluma no cayera al suelo.

Los Tak Zerg que rodeaban a Gu Huai tampoco prestaron atención a la pluma. Vieron que los ojos dorados del cachorro brillaban y que les llamaba, así que los Tak Zerg soltaron instintivamente silbidos bajos.

El cachorro que recibió una respuesta estaba aún más feliz. La pluma que sostenía claramente no era una rareza, y mucho menos un juguete, pero el cachorro negro cuidado por los Tak seguía feliz. El entorno de vida de este planeta podría ser muy malo, pero Gu Huai había sido protegido desde que nació y, de hecho, no había sufrimiento. Estaba mimado.

Tanto Alves como los Tak Zerg que vinieron después le dieron el mejor trato. Era sólo que las mejores cosas en este planeta abandonado eran tan malas que no podían darle a Gu Huai cosas mejores. Si fuera un buen planeta entonces podrían darle a Gu Huai cosas mucho mejores. ¿Cómo llegar a un planeta mejor?

Gu Huai y Alves eran cachorros y no pensaron en este problema por el momento. Para ellos, este planeta abandonado era ahora todo su mundo.

Los Tak Zerg pensaron en ello pero no encontraron la manera. El buque de guerra que los trajo a este planeta se había estrellado completamente y no había más buques de guerra en este planeta, sin las herramientas necesarias, no podían salir del planeta.

―Chirp chirp chirp. ―No se sabía lo que estaban pensando sus padres, pero el cachorro negro volvió junto a sus padres y empezó a llamar de nuevo. Este grito significaba que quería que lo abrazaran. Después de sólo dos sonidos, el Tak Zerg más cercano a Gu Huai colocó a Gu Huai sobre su hombro.

El mimado cachorro no estaba descontento con el statu quo. Gu Huai permaneció en el hombro del Tak Zerg y se movió a izquierda y derecha. No corría a ninguna parte y se dejaba llevar por sus padres mientras observaba el mundo a su alrededor.